•21•

106 6 0
                                    

Al terminar mi pregunta este sonrió, y yo supe enseguida la respuesta.

Me acosté con él.

Y luego río, ¿Le parece gracioso?. Le mire con rabia, él sabía que era Virgen. ¿Cómo permitió que lo hiciéramos y perdiera mi virginidad de esa forma tan... mal?. Le odio.

— Claro que no, aunque por como te comportaste anoche parecía que eso era lo que querías —me dice él. Yo le mire anonadada.

— ¿Me estas diciendo fácil?.

— No, nunca dije eso. Solo digo que no deberías volver a beber sí, te salve justo de una locura que ibas a hacer.

— ¿Así? Y la solución era besarme —le digo, y este sonrió.

— Así que te acuerdas, aunque bien mal. Porque fuiste tú quien me beso, no yo a ti.

— ¿Qué? ¡Claro que no!.

— Claro que sí, yo estaba mas sobrio que tú y me acuerdo perfectamente cuando me besaste. Y lo que si no negare es que, continue el beso —me dice, y me mira. Yo trago saliva nerviosa y frunzo el ceño.

— Rayos, lo siento mucho. Dios, tengo que irme —dije y me levante de la mesa. Pero este tomo de mi mano deteniéndome, le mire.

— No es necesario que te vayas, siéntate y come. Podemos hacer como si eso nunca haya pasado, ¿Vale? —me dice, yo suspiro y después me vuelvo a sentar y comienzo a tomar desayuno. Y vaya que tenía hambre, sentí mi teléfono vibrar y lo saque de mi bolsillo. Era un mensaje de mamá.

"Hija, ire a recogerte a la casa de Jasón en media hora. Necesitamos hablar".

Mierda.

"Sí mamá, aquí te espero".

— ¿Por qué la cara de susto? —Me pregunta Justin. Yo le miro.

— Por alguna razón mi madre cree que estoy en casa de Jasón, y vendrapor mi en media hora más. —le digo— ¿Fuiste tú? ¿Le dijiste que allí estaba?.

Él asiente.

— Anoche estuvo llamándote, por supuesto no le conteste. Así que le mande un mensaje con tu celular diciéndole que no se preocupara que fuiste a la casa de Jasón y que te quedarías allí a dormir.

— Como sea, tengo que irme a casa de Jasón. —dije, y me levante.

— Te llevare —me dice. Por supuesto no me negué, no sabía donde estaba, y tampoco tenía dinero para tomar un taxi, así que lo mejor era que él me llevara. Al final salimos de su casa y nos subimos a lo que supongo sera o su auto o de sus padres y después comenzó a manejar.

— ¿Cuándo aprendiste a manejar?.

— A los dieciséis años. Mi papá me enseño, y después a los diecisiete saque mi licencia.

— Vaya, eso es genial. —le digo, y él solo sonríe. Quince minutos después llegamos a la casa de Jasón, los dos nos bajamos y tocamos a la puerta de su casa. No contesto ni al primer toque, ni el segundo ni el tercero, hasta que al fin al cuarto toque abrió la puerta, este estaba en calzoncillos y con sueño.

— jas... —pero las palabras que diría quedaron en el aire porque sentí que Justin me giraba y tomaba de mi rostro para que lo mirara a él, abrí los ojos en sorpresa y le mire a los ojos. Luego este mira a Jasón molesto.

— ¿No puedes vestirte antes de abrir la puerta? —le reclama Justin. Y ahi entendí que sucedía, creyó que me asustaría o algo si veía a Jasón en aquellas fachas, rodee los ojos. Tome las manos de Justin y este enseguida dirigió su mirada a mí. Solté sus manos de mi rostro y le dije:

Connected heartsWhere stories live. Discover now