Capítulo 10

1.2K 51 0
                                    

Tai se quedó helado. Eso si que no lo esperaba. Izzy y él eran amigos desde los once años y jamás habían tenido ninguna discusión y mucho menos por mujeres. Siempre pensó que su amigo estaba más allá de las relaciones con mujeres, que primero quería recibirse y luego se preocuparía por ellas. Pero estaba equivocado. Justamente estaba interesado en la misma chica que él.

-Lo lamento Izzy. Nunca me había dado cuenta de esto.

-Disculpame por decírtelo de este modo, es solo que últimamente me desconozco. Desde que regresó Mimi no hago otra cosa que pensar en ella. Ya ni realizo mis tareas... no lo sé. Creo que me gusta.

-¿Tú quieres que cancele mi cita?- Preguntó el moreno preocupado de verdad.

Pero su amigo negó con la cabeza.

-En absoluto Tai. Yo fui lento, además tú lo dijiste. Has estado esperando por este momento durante años, no voy a ser yo quien interfiera. Estoy más que seguro que a Mimi le interesas más tú que yo.

-No lo sé. Ahora me siento un maldito traidor.

-No eres ningún traidor... tu no sabías nada de esto... no quiero que revivas...

-Dilo. Soy un un maldito traidor como Matt.- Dijo el moreno mirando hacia el suelo y apretando sus puños.

-¡No puedes traicionarme si no tenías conocimiento de mis sentimientos! – Exclamó el pelirrojo.- ¡Además tú te enamoraste primero de ella!

En ese momento la charla no pudo continuar debido a que la computadora comenzó a hacer ruidos extraños.

En la pantalla se veía un paisaje bastante conocido para sus ojos y en él aparecieron sus dos camaradas: Tentomon y Agumon.

-¡Muchachos!- Exclamaron ambos.

-¡Los encontramos!- Dijo agumon. Y en ese momento aparecieron los demás compañeros digimons de sus amigos detrás.

-¿Cómo están?- Preguntaron a coro.

-Excelente, se podría decir que en mi mejor momento.- Exclamó Tai.

-¿Y tú Izzy?- Preguntó tentomon.

-Yo... no me quejo.

-Deberíamos avisarles a los demás sobre esta comunicación ya mismo.- Dijo Tai de inmediato.

Entonces enseguida le escribieron a todos sus compañeros para que vayan a la casa de Izzy.

En media h ora fueron llegando todos. La última en llegar fue Mimi. Tai le abrió la puerta.

-Pensé que no vendrías.- Le dijo. Era cierto, por un momento tuvo el pensamiento de que no acudiría a la reunión y se sintió triste. De verdad tenía ganas de verla.

-Si se trata de palmon puedes dar por seguro que vendré.- Respondió la castaña con una sonrisa en la boca.

Tai la dirigió hacia el cuarto del pelirrojo. Ambos entraron y todos se quedaron observando extrañados la escena. Pues en los últimos días ellos dos habían querido matarse, por eso resultaba muy extraño verlos así de calmos y juntos.

-Bueno muchachos se preguntarán cual es el motivo de esta reunión.- Comenzó Izzy.

-Resulta que estábamos aquí con Izzy y de repente escuchamos un ruido extraño que provenía de la computadora... nos dimos vuelta y nos encontramos con esto.- Siguió el moreno señalando la pantalla de la laptop de su amigo. En ella aparecieron todos sus compañeros digimons.

E armó un gran revuelo en la habitación debido a la sorpresa del hecho.

-Aún no sabemos cómo abrir la puerta pero podremos comunicarnos con ellos de este modo.- Explicó Izzy.

El hilo rojo (En corrección)Where stories live. Discover now