Soy...¿su compañero?

Parte 38 Pervertido

L- Es mejor que te disculpes.

W- Estaba enfadado. No creo que sea buena idea.

L- Si estaba enfadado es una razón más para que te disculpes tonto.

W- Asusta. Me asustan sus ojos. Aún no me acostumbro a ver así a Vegetta.

L- Si le quieres tendrás que aceptarlo completamente tarde o temprano.

Asentí y seguimos paseando hasta que el sol se ocultó tras las montañas.

W- Hace frío, ¿cuánto tiempo llevamos fuera?

V- Quizás, ¿dos horas? ¿Quieres volver? Probablemente ya haya acabado con esos dos.

W-...

Asentí con la cabeza y recordé todos los momentos que había pasado con Carlos. Por unos segundos me sentí realmente mal al recordar nuestra convivencia en Los Ángeles, pero se me pasó al instante en el que recordé todo lo que nos había hecho pasar, a Luka, a Vege y a mí.

Pasó un cuarto de hora más hasta que llegamos a la casa. Se ve que mi suerte me había dejado ese día...Nada más abrir la puerta Vegetta también salía de la puerta del sótano...lleno de sangre. Sentí que me faltaba el aire, retrocedí unos pasos y choqué contra Luka.

Otra vez tenía esos ojos...

V-...

No dijo nada, ni siquiera replicó cuando me vio con Luka. Sólo se fua a nuestra habitación en completo silencio.

L- Creo...que si está bastante enfadado.

W-...¿Qué hago?...

L- Entra y fóllatelo

W- ¿¡Qué dices!?

L- Si le esperas en la cama ya verás que todo se soluciona.

W-Me niego, las cosas se solucionan hablando.

L- Pues ahí tienes tu respuesta.

Me cogió de los hombros y me llevo a empujones hasta la puerta.

L- Entra y habla todo lo que quieras. Nos vemos mañana.

W- Espera, ¡no me dejes solo con él!

L- Es tu pareja idiota, ni que te fuera a matar...

Y sin más me cerró la puerta en las narices.

¿¡Que clase de amigo eres maldito...!?

Resignado fui hasta la habitación. Entré y oí el sonido del agua...¿Qué hago?...Me paré frente la puerta el baño y cogí el pomo de la puerta. Después de haber dicho todo eso, ¿me perdonará?

Tragué con dificultad y decidí abrir la puerta. Entré casi temblando y encontré a Vegetta ocupando todo el largo de la bañera con la cabeza apoyada en el borde. El agua seguía llenando poco a poco la bañera.

W- Vegetta...¿podemos hablar?

V- Ahora mismo no quiero tener otra discusión. Puedes ir a dormir con Luka.

W- Yo, lo siento mucho. No pensé en lo que decía...

V- Si no lo pensaste es casi peor, ya que todo salió de tu corazón.

Me quedé callado sin saber que responder.

V- ¿Sabes qué Willy? Estoy cansado de esto. Cuando se arreglan las cosas uno de los dos la caga. A veces pienso el por qué te conocí.

...Un pinchazo me sacudió e hizo que cerrase los ojos.

V- Si no te hubiese conocido, no te habría pasado nada, habrías conocido a una chica mona y podrías tener una familia. Conmigo no llevarás una vida normal, no podremos tener hijos, todo sería muy complicado...