Capítulo 4

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WONDERWALL


Tengo ganas de tomar la guitarra y dejarme llevar por la música, solo que ha pasado tanto tiempo que pienso que sus cuerdas no me reconocerían.

- Baby. Ayúdame.

Veo a Rayna cubierta por mi camisa, acercándose con una taza de café y su computadora.

Hago la guitarra a un lado para que se siente junto a mi.

- ¿Por qué no quieres tocar la guitarra? Nunca te he visto tocar.

En diez años no he vuelto a tocar la guitarra. Rayna sabe que solía tocarla porque mamá se lo dijo una vez en una cena en casa, y aunque a ella le gustaba que lo hiciera, pues de mamá heredé el gusto por la música y por tocar instrumentos, no puedo volver a hacerlo porque sería como rendirle un tributo a Taylor.

Una parte de mi se quedó atrapada en 1999; un lugar del que quiero y necesito salir. Porque seguir recordando a Taylor, con este remordimiento de haber acabado con una historia que pudo ser, es el peor de los sentimientos.

- Ya tengo la lista de todas las personas a las que tenemos que invitar a la boda.

Rayna llevaba meses organizando nuestra boda. Creo que es una boda que estaba organizando desde niña pues sé que ella es de esas mujeres que soñaban con casarse, con tener una boda de espectacular y vivir en una casa de cristal donde todo es perfecto.

Muchos pensarán que no tengo nada que hacer a un lado de una mujer que parece vacía pero Rayna es una excelente compañera, una amiga, y quiero que sea la madre de mis hijos.

- Esto tiene más de cuatrocientos invitados. Rayna es demasiado.

En su afán por tener la boda perfecta, Rayna no había escatimado, ni que decir de su padre, que parece disfrutar de cumplirle hasta el más mínimo de sus caprichos.

- Amor... Tenemos muchas amistades. No puede ser una boda cualquiera.

- Lo sé. Es solo que bueno, yo no tengo tantas amistades o compromisos.

- Quiero que revises la lista para ver si no falta nadie.

- Lo haré.

Falta Taylor. Pensé.

Me pierdo en un abismo que me lleva de regreso a esa época donde estuvimos juntos. Pensar en que falta Taylor en esa lista será una idea que no se me quitará de la cabeza.

- ¿Baby? Pregunta Rayna.

Tomo a Rayna entre mis brazos, besándola. Solo con el sabor de sus besos logro quitarme de la cabeza a Taylor. Sé que no está bien, que pareciera que estoy utilizando a Rayna para arrancarme ese pedazo de mi, ese dolor, pero es la única forma.

Escucho la lluvia golpeando los cristales de la ventana. El olor a café recién hecho se cuela por mi nariz.

Tomo la guitarra entre mis manos. Es como si ella quisiera que yo la tomara para empezar a tocar.

- Son los acordes del inicio de "Wonderwall".

Rayna trae entre sus manos dos tazas de café; Una con canela, la otra con poco de leche light y endulzante que no engorda.

- Sé que te gusta mucho esa canción.

- Me trae muchos recuerdos. Contesto.

Era justo la canción que venía escuchando, cantándola con mucha inspiración. Había tomado ya varios refrescos de cola para mantener los ojos abiertos y no caer dormido al volante.

INSEPARABLES - 1999-Where stories live. Discover now