Antes que nada, gracias a los que han votado por esta historia, gracias a los que han comentado, para mi es muy importante su opinión, y me resulta alentador, quizá no contesto a sus comentarios pero los leo todos con mucha emoción y la única forma que tengo de responder a ellos, es con otro capitulo... Espero y lo disfruten!
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Un sonido lo despertó, la habitación estaba en penumbra, sus sentidos se activaron enseguida. Con una velocidad impresionante tomo su arma y apunto al intruso.
-wow! Alexander soy yo!- se apresuro a decir Magnus.
El ojiazul pestañeo un par de veces.-Mags, que haces aquí?... Yo lo siento... Estas bien?
El moreno respiro hondo- me acabas de dar un buen susto!
Inmediatamente Alec se puso de pie -lo siento tanto, es que tú nunca habías entrado así a la habitación y son las dos de la madrugada- dijo revisando el reloj.
-eso fue antes de ser tu novio, ¡ahora tengo mas derechos!.
Alec lo miro intrigado- yo .... Mags... este es tu departamento eres libre de entrar cuando quieras .... Solo que nunca lo habías hecho y me sorprendiste. ¿pasa algo?
Magnus se acerco -se me antojo un beso tuyo- susurro a su oído en tono seductor.
El ojiazul se puso nervioso, podía sentir el aliento del moreno rozandole la piel. - Magnus.... Yo...- el moreno lo sujeto de la cintura y lo beso, primero lento y poco a poco fue aumentando de intensidad, los labios de Magnus guiaban a los inexpertos de Alec, saboreaban cada sensación, sus lenguas danzaban en un mar de pasión. El moreno arrastro a Alec hasta la cama y cayeron sobre el colchón, Magnus separo sus labios y beso el cuello del ojiazul, ahí succiono hasta dejar una marca.
La respiración del pelinegro estaba agitada, sudaba, las manos le temblaban. Acaricio la espalda de Magnus, su pijama era de seda,al deslizar los dedos era como tocar la piel desnuda.
Magnus desprendió a Alec de la camiseta que usaba, y recorrió su pecho con los labios, unos labios que le quemaban la piel, quería más, mucho mas.
Giro hasta posicionarse sobre el moreno, como un experto en combate lo inmovilizó, beso sus labios con deseo, bajo hasta su cuello, el aroma de Magnus era embriagador. Sus sentidos gritaban por más.
Levanto el rostro y miro al moreno a los ojos, él le devolvió la mirada, sus pupilas estaban dilatadas, sus ojos gatunos lo miraban con pasión, sus almas sabían que se pertenecían.
-Alec...
-sí?
- estas jugando con fuego- susurro
-no entiendo- dijo confuso
-si continuas así, no me podre contener- explico.
-no quiero que te contengas.
-oh! Alec, mi Alec, no es el momento, quiero que tu primera vez sea especial e inolvidable.
-si es contigo, lo será- dijo mirándolo a los ojos.
Magnus lo miro con ternura - ¿porque tienes que ser tan encantador?.
-porque eso es lo que mereces.
-Alexander. Tengo un pasado del cual no me siento orgulloso- bajo la mirada.
El ojiazul lo tomo de la barbilla y levanto su rostro -Magnus Bane, para mi, tu vida comenzó el día en que te conocí- beso suavemente sus labios- no tienes pasado.
Magnus respiro hondo -gracias por darme la oportunidad de comenzar una nueva vida.
-gracias a ti Magnus, por darme el honor de vivirla contigo...
