26-hermosa mañana...

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SAM

Desperté por el maldito despertador, que raro ¿en qué momento cambié el sonido de mi despertador? mi cabeza me iba a explotar y no logré abrir los ojos, solo estire mi mano y traté de apagarlo, pero no lo logré simplemente lo tiré al piso y dejó de sonar, me volví a acomodar y un aroma a cereza entró por mi fozas nasales, un momento mis sabanas no huelen asi.

- Sam! -la voz mas angelical que he oído en mi vida me regaña, me removi de reojo a una Sarah adormilada, con su cabello alborotado y sus ojos aún cerrados. Inspeccione el lugar donde estaba y me percaté que era la habitación de Sarah ¿cómo mierda terminé aqui?. No le di importancia y me volví a acomodar para seguir durmiendo- levantate -me dijo Sarah mientras caminaba hacía el baño, mierda ese pijama era muy provocador, esos short de algodón son demasiados cortos. Un momento, me quite las sabanas de mi cuerpo y confirme que estaba vestido, asi que sexo no tuvimos. La pregunta del día ¿cómo amanecí en la cama de mi novia cuando recuerdo que estaba en un bar? Bueno no sé, pero dormí con mucha comodidad.
Suena raro decir mi novia ,pero por otro lado es lindo saber que es mía . Me levanté frotando mis ojos con las palmas de mis manos, mi cabeza dolía demasiado y también la cara como si me dieron un puñetazo, me levanté con dificultad y traté de estirarme, en eso Sarah salió del baño en una bata rosa y su cabello húmedo.

- buenos... -empecé a decir con una sonrisa adormecida.

- no hables -me interrumpió poniendo una mano en mi cara- era nuevo sabes -dijo levantado el despertador ,el cual aún seguía en el piso, gruño cuando lo revisó y lo dejó de mala gana en la mesita de luz.

- lo siento no fue a propósito -salió sin pensarlo, ella se sorprendió al igual que yo.

- me debes un despertador y uno bueno -dijo algo molesta y yo solo le sonreí.

- por supuesto -dije y fui hacía el baño, donde lave mi cara con agua fría.

- ten tomatelo -habló entregandome una aspirina en la mano- te ayudará con la resaca -dijo tímida saliendo del baño. Me tomé la aspirina y me quedé mirando a Sarah mientras ella revisaba en su placar.

- ¿vas a decirme como carajo amanecí aquí? -pregunté sentándome en la cama.

- ¿enserio no recuerdas nada? -pregunta mirándome algo triste, noté que se estremeció y eso me hizo pensar que fue lo que pasó . Algunos recuerdos aparecieron en mi mente, borrozos pero logré entender el porque.

- solo algunas cosas -dije sonriendo con malisia sabiendo que ella se ruborizara cuando lo recuerde.

- ¿cómo cuáles? -preguntó sin mirarme.

- mmm....no sé ,a ver, como tú encima de mi gimiendo -dije y ella no habló, y eso me dijo que di en el blanco- ya enserio como aparecí aqui y porque me duele la cara como si alguien me diera un buen golpe -me sobe la frente con una mano.

- te caiste del porche -cuenta divertida y pues eso me dio una idea de como estaba- te embriagaste y tuve que ir por ti porque el dueño del bar estaba arto -dijo algo enojada y comencé a recordar un poco más . Bueno ahora sé como llegué.
Fui a su dirección y me paré detrás de ella, no puedo evitar morder mi labio inferior cuando se agachó estirando el trasero a recoger la blusa que se le calló, la tomé de sus caderas y la pegué a mí, ella se estremeció y sabía por ante mano que sentía la misma electricidad que yo porque comenzó a moverse con lentitud contra mi cuerpo, mi corazón estaba latiendo a mil y traté de controlar mi respiración. Era algo que la tranquilizaria. Que la toque y a mi me encantaba hacerlo. Su respiración comenzó a acelerarce cuando mis manos comienzan a deslizarce hasta llegar a su entre pierna que era donde Sarah me las apartó , se volteó para enfrentarme y me di cuenta de que no estaba contenta.

- ¿qué sucede? Creí que te gustaba mi compañía -dije algo molesto alejandome un poco.

- el alcohol no es algo que me agrade mucho, y tú parece que lo adoras -habló recta. Suspire hondo y traté de no decir idioteces.

- el alcohol siempre fue parte de mi vida -confesé algo atónito.

- claro -soltó con sarcasmo y se metió al baño con ropa en mano.
Tomé mis llaves y salí de la habitación y de la casa sin decir nada, ya me arte de que se comporte así , si la dejo sola tal vez mejore. Perdón por hacer de tu día una mierda.
Cuando salí no vi mi auto, mierda, seguro que aún estaba en el bar, comencé a caminar con cautela, me pregunto ¿cómo hizo para arrastrarme del bar hasta su casa? Ni la menor idea.

Sonreí cuando los recuerdo de Sarah sobre mi gimiendo sin parar llegaron a mi mente, eso en verdad me excitaba más que ver un video porno, era tan angelical que era demasiado tentador verla de otras formas, traté de apartar esos recuerdos porque no quiero tener dos erecciones en menos de una hora. Llegué al bar y vi que mi auto era el único que estaba estacionado, fui hasta el y subí, comencé a conducir hasta la casa de los chicos, donde iba a quedarme hasta que mi casa estuviera lista. Cuando llegué no había nadie a la vista, no era algo raro, podían salir de quien sabe dónde y hacerte una broma muy pesada. Entré a la casa y me inundó un completo silencio, observé el reloj de mi muñeca y eran las 7 de la mañana, joder, fui al garage y los autos no estaban, significaba que ellos tampoco. Que demonios?. Ellos nunca se levantan a estas horas. Que importa, entré en la cocina y busqué los cereales favoritos de Larry ,una vez que los encontré me los debore, subí a mi habitación temporal, que estaba junto a la de Matt, era exclusiva para mi, pero prefería vivir sólo, es mejor así.

Me duché,me vestí, me cepille los dientes y metí un caramelo de menta en la boca para una sensación más fresca. Salí de la casa con mis cosas y fui directo a la preparatoria, me fume un cigarrillos antes de entrar. Esos últimos dias fueron desastrosos pero eso me unió aún más a Sarah y eso era lo que me importaba. Que ella fuera mía y solo mía . Si lo sabía ,era muy posesivo, pero es que lo que yo quiero lo tengo, no porque sea un malcriado pero la realidad era que la necesitaba, no quiero que me la arrebaten, quería que estuviera conmigo y que nunca se apartase, me sentía libre junto a ella y sus besos, sus caricias y hasta sus ojos me volvían loco mas que ver a una chica que enseña mucho más. Solo quería a Sarah junto a mi es todo. Solo ella podía conmigo y mis humores de mierda. Como quisiera decir que no estoy enamorado.

Mi Amor PeligrosoWhere stories live. Discover now