Capítulo 50

11.2K 985 527
                                    

The last person in the room she hugged

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

The last person in the room she hugged

Was the person that she loved the most

Nobody noticed that I was down on the rug

I'm getting better at becoming a ghost

Would You Fight For My Love? — Jack White

☆★☆

Los empujones me conducen hasta el otro extremo del lugar, no tengo ánimos para evitarlos, y me siento desubicada por unos horribles segundos. Frente a mí se alza la pequeña carpa donde venden cerveza y, por la expresión del chico que atiende, sé que debo parecer un espantapájaros.

—¿Mal día? —pregunta con una amplia sonrisa mientras rellena un vaso enorme de cerveza con el logo de la empresa patrocinadora.

Este chico tiene talento como bartender.

—Malísimo...

Compro la cajetilla de cigarros más cara de mi vida y acepto que encienda el primero para mí.

Me abro paso, con energías renovadas por la cerveza, hasta un rincón al otro lado de la entrada al backstage. Escribo un mensaje rápido a Sofia para avisarle que estoy bien y que sólo he salido por aire. Apago el celular ignorando los seis mensajes de texto de Eric.

Puede enviárselos a Berenice ¿No?

Además, no le he mentido del todo a So... Salí por aire, alcohol y cigarros, excelente fórmula para encontrar un poco de paz.

Todo se va al demonio cuando una de las bandas se despide con un cover de The Witcher y un nudo se instala en mi garganta mientras canto con los demás asistentes. Es Perla y una de las canciones que más amamos Sofía y yo; debería estar gritando a todo pulmón con ella. Limpio algunas lágrimas astutas y termino mi primer vaso gigante de cerveza; al caminar el suelo se mueve un poco.

Todavía tarareo los últimos versos de la canción cuando el chico rellena mi vaso y me lanza una mirada preocupada.

—¿Si sabes que no es buena idea terminar ebria en un evento como éste?

—Sí, gracias.

Le arrebato el vaso y regreso a mi pequeño rincón donde ya hay más personas, más parejas ¿No pueden ir a examinarse las amígdalas al otro lado del universo? ¡No quiero ver sus lenguas!

Eric y Dimas pasan muy cerca, pero no me descubren. Sólo consigo verlos por su altura y creo que me buscan...

Que se jodan ambos, medito en medio otro largo trago de cerveza.

Un rato después pasa Cedric, apenas a unos metros de mí, y entonces me siento mal porque debería estar divirtiéndose con mi amiga y no buscándome. Enciendo mi viejo celular y envió otro mensaje a So diciéndole que en verdad me encuentro bien y que sólo deseo ver el concierto a solas. Sin embargo, ignoro los doce mensajes de texto de Eric, que han atorado mi celular por unos segundos, y apago el aparato cuando recibo uno más.

La Melodía de Aura 1 - PreludioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora