⏩Capítulo 86⏪

1.2K 79 11
                                    


  A eso de las cuatro y media, a Yasmina le da el venazo de ir a dar una vuelta al centro comercial. Sinceramente, no tenía muchas ganas pero acabé aceptando ya que Lucía se veía muy entusiasmada.

-    Además, me viene genial porque me acabo de dar cuenta de que me he dejado los tacones en Mallorca.-añade ella, sonriendo nerviosamente.

-    Pues no se habla más, ahora mismo voy a por Cameron y le digo que nos lleve.- dice animada Yasmina.

-    Me alegro de que os empecéis a llevar bien.-digo.

-    Baaah, es por conveniencia.- dice saliendo al jardín, donde se encontraban los chicos jugando a los dardos.

-    Hombre Yasmina.- dice Dani cuando la ve salir y dirigirse a ellos.- ¿Te apuntas a una partida a los dardos?

-    No me gusta tirar los dardos a una diana, prefiero tirarlos a los huevos...En fin.- observo como los ojos de los chicos están bien abiertos, y veo que Cameron está paralizado en posición de lanzar el dardo. - Tú.- se acerca a Cameron.

-    Yo.- dice él.

-    Muy bien, os sabéis los pronombres personales.- dice sarcástico Jesús.

-    Tú cállate o te lanzo un dardo a la cara.- le amenaza Yasmina y veo cómo Jesús levanta los brazos en plan inocente.

-    ¿Tú es que no sabes hacer otra cosa que amenazar?- le pregunta Cameron.

-    Necesito que nos lleves al centro comercial.- le dice, mientras hace caso omiso a su pregunta.

-    Ya. Y yo necesito perderte de vista y mira.- ella pone los ojos en blanco.- Por si no te ha quedado claro, es un no voy a llevaros.

-    Vamos hazlo por Irene.- maldigo a mi mejor amiga por meterme en esto, y cuando veo que Cameron se gira para mirarme, finjo una sonrisa triste y a la vez, hago un puchero.

  Vuelve a suspirar.

-    Termino esta partida y os llevo.- dice rendido, y se gira de nuevo para mirar a Yasmina.- ¿Contenta?

-    Mucho.- sonríe victoriosa.

  Mientras que los chicos terminan su partida de los dardos, nos adentramos a la casa y nos esperamos en la cocina.

  Yasmina abre la despensa y tras varios minutos con la puerta abierta y recorriendo con la mirada cada cajón, decidí preguntarle qué busca.

-    No tienes nada de comer, puta.- me dice sin apartar la mirada de la enorme despensa.

-    Oh vamos, algo tendré, ¿no?- digo y comienzo a girar las ruedas de la silla para acercarme.-  A ver, ¿qué es lo que buscas?

-    Una ensaimada.- me dice y paro de rebuscar.

-    Nunca tengo de eso, Yasmina.- le digo.¿Desde cuándo en esta casa de come ensaimada? Nosotros comemos ensaladas, pero ...¿Ensaimadas? Que yo sepa eso es muy típico en Mallorca pero...¿En Sevilla?

-    Nunca tienes de nada.- me corrige y alzo ambas cejas.

-    ¿Perdón?- digo sorprendida por lo que me había dicho.

-    Perdonada.- pongo los ojos en blanco.

-    Tengo de todo menos ensaimada.- digo volviendo la mirada a la despensa.- ¿No prefieres chocokrispis?- niega con la cabeza- ¿Chocolate milka? ¿Oreo?...- digo nombrando todo lo dulce que tengo en la despensa, que es bastante, pero me niega a todo.-¿Fruta?- ella hace una mueca de asco.

-    ¡No!- pone cara de asco- ¿Qué clase de persona merienda fruta?

-    Yo.- le digo obvia, y ella rueda los ojos.- Pues nada, a morirse de hambre.

-    Yo te dejo que me pegues un bocado.- nos giramos y vemos a Dani entrar por la puerta.

-    No, gracias. Lo que me faltaba a mi, ponerme mala en NocheVieja.- dice y Dani le fulmina con la mirada.

-    Te odio.- le dice y ella sonríe.

-     Ya. Yo también.- le mira ella y él le devuelve la mirada.- Incluso diría que te odio yo más.- la sonrisa de Dani se intensifica.

   Ellos se dicen cosas horribles, pero porque son igual de bordes y sarcásticos. Con eso ya os digo que, cada insulto significa un piropo.

   Vamos que, conforme más se odien...Más se quieren.

   Él se acerca a ella y le da un beso en los labios. A continuación,  entra Jesús y se queda quiero para no interrumpir el largo e intenso beso de Yasmina y Dani.

   Pasa su mirada de ellos a mi, y dijo la mía en él. Durante unos segundos, nos quedamos perdidos él uno en el otro, y seguro que él -al igual que yo- desearía seguir perdido en vez de encontrarse.

   Nuestro juego de miradas, y a su vez el beso de estos dos,termina cuando Cameron entra.

-     Bueno qué, ¿nos vamos?- se calla de golpe cuando ve que ha interrumpido a Yasmina y Dani.- Perdón.- sonríe nervioso y generoso por la mirada de Yasmina.

-     Te insultaría y te abofetaría hasta que tu piel se volviera lila pero claro, necesitamos chófer.- dice suspirando.- En fin,¿vamos?

   Cameron asiente tragando saliva ante la amenaza.

_

No es muy interesante pero espero que os guste❤

Hago lo que puedo por subir capítulo lo antes posible, sry  si ya no soy tan tan tan tan activa como antes.

Y me terminaste odiando #2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora