- Gracias.- le digo cuando me deja caer de sus brazos al interior de la tienda.- No se cuánto tiempo hubiese aguantado con esa maldita ardilla en mi cara.- No las des.- dice Jesús, sentándose a mi lado.- Supongo que no más de cinco minutos.
- Ni más de cinco ni más de medio minuto.- digo llevándome el dedo índice y corazón a un lado de la cara que había sido dañado.- Ay.- murmuré, y automáticamente retiré mis dedos de la mejilla. Ambos estaban un poco manchados de sangre.
- No te toques.- me advierte.- Por suerte me he traído un neceser con alcohol,agua oxigenada, algodón y gasas.
- ¿Te has traído todo eso?- le pregunto alzando una ceja pero no debería de haberlo hecho, pues me dolía toda la cara.
- Sí, espera aquí.- dice saliendo de la tienda de campaña pero se vuelve a asomar,aunque no entra.- No te toques, por favor.Se puede infectar y sería más difícil curar.
Asiento tragando saliva y vuelvo a recostarme sobre la toalla - ya sé que es una tontería pero es que así no me clavo nada y duermo mejor -.
Cuando pasan no más de cinco minutos, entra Jesús con un neceser rosa de la Hello Kitty.
- Sé lo que estás pensando, y no hace gracia.- dice este, volviéndose a sentar a mi lado.
- Oh vamos, claro que hace gracia.- río débilmente, sentándome para alcanzar el neceser.-
- ¿Qué haces?- me pregunta cuando ve que he cogido el neceser que había dejado sobre su regazo.
- Intentar curarme.- le digo, mientras busco el algodón y el alcohol.- ¿Qué es mejor primero: el alcohol,o el agua oxigenada?
- Déjame anda.- dice arrebatándome el neceser que contenía ambos botes.- No te toques.- me dice cuando ve mis intenciones de llevarme los dedos de nuevo a la cara.
- Costumbre.- digo suspirando, me dolía mucho la cara.
- Te duele, ¿verdad?- me dice, mientras echaba un líquido sobre el algodón.
- Se me acaba de tirar una ardilla a la cara, Jesús.- le digo bordemente - Me ha clavado sus asquerosas y largas uñas.¿Esperas que no me duela?
- Perdón.- me dice - No había falta que me hablaras así.
- Lo siento Jesús.- era el dolor lo que me hacía comportarme así.- Pero es que me duele tanto que me parecía una pregunta absurda la tuya.
- Tranquila. Ahora esto te escocerá un poco.- dice avisándome, mientras cerraba el tapón del bote cuyo líquido había sido absorbido en el algodón.
Se coloca de rodillas para estar más cómodo y se inclina a mi. Me echo para atrás un poco por miedo a tenerlo cerca, pero luego comprendí que necesitaba acercarse mucho porque mis cortes y arañazos estaban en mi cara.
Vamos Irene, sólo serán un par de minutos.
Cierro los ojos para no ponerme nerviosa al tener su rostro a centímetros del mío, y comienzo a inspirar y expirar aire tranquilamente para relajarme.
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Y me terminaste odiando #2
FanfictionLa continuación de "Y me terminaste gustando". Es como si hubiésemos dado un paso,y retrocedido dos.