Los opuestos se atraen

Capitulo 33:

Volví con mis amigos tratando de sacar una de mis mejores sonrisas, pero ellos siempre notan cuando estoy feliz y cuando no, ellos son verdaderos amigos.

-Joy, ¿que pasa?, ¿te sientes bien?.
-Sólo un poco deprimido, pero se me pasará.
-¿Y que es lo que te deprime viejo?.
-No es tan importante, ¡hey!, tengo un nuevo ritmo de batería, ¿!lo queréis escuchar!?.
-La batería es toda tuya.

Corrí hacia mi instrumento muy orgulloso, eso es, la música siempre me anima, así que, ¡a tocar todo el día!.

Cuando me pongo mis casco y empiezo a tocar con fluidez, que dejo llevar mis manos dejándolas hacer arte, me lleva a otro mundo, me siento feliz, y esa es una de las principales cosas por la cual me encanta ese tipo de música que otros consideran "horrible", es movible, puedes gritar, puedes moverte como quieras, hasta puedes romper cosas si quieres, aunque eso último es para los que aman esa música a otro nivel, yo me siento satisfecho con lo que tengo.

Aunque me gustaría verme desde otra perspectiva, pensar por un segundo en un mundo... Juntos. ¿Como sería entonces?, no me hago las típicas preguntas de "¿que pensaran mis amigos de mi?, bla... Bla... Bla, etc", por que se que ellos me aceptarán igual, miren, Jonathan tiene a David y lo tomamos de lo más normal, ¿porque yo no?. Pero... Igual, no lo conozco, ni siquiera se su nombre completo, no se como es su actitud, como me tratara, cuales son sus gusto. Si me diera una oportunidad para conocernos, realmente no se que haría.

Pasamos casi toda la tarde ensayando, hasta que paramos un momento para tomar algo.

-Uh, que calor, ¿alguien quiere ir a buscar algo para tomar?.
-Claro.
-¿Tú no viene Joy?.
-No, yo me quedare un rato más.
-Bien, te traeremos algo, volvemos en unos minutos.
-Hasta luego.

Cuando cerraron la puerta detrás de ellos comencé a guardar mis baquetas, realmente después de esto tomare una muy larga siesta.
Tocaron un par de veces la puerta y sin querer deje caer las baquetas por el susto, ¿volvieron tan rápido?. Abrí pensando que podían ser los chicos, pero la sorpresa que me di cuando deje caer las baquetas no se comparan con esta ahora.

-¿Q... Que haces aquí?, ¿y como sabias en donde encontrarme?.
-Solamente quiero hablar contigo, sólo serán unos segundos.

Me dijo Jason, mirándome directamente a los ojos, lo pensé dos veces y lo deje pasar, realmente no se de que podría hablarme.

-¿Y de que quieres hablarme?.
-Sabes... tenías razón con que debía de enamorarme de nuevo y, quería agradecerte, ahora me gusta alguien.
-¿Qué?, digo... ¡Que bien!.

La falsedad de mi sonrisa era demasiado notoria, pero que más podía hacer, ya lo perdí definitivamente, esas palabras, esas simples palabras lo derrumbaron todo, y yo soy más ingenuo al pensar que realmente podía gustarle. ¿Porque me hice falsas esperanzas?

-Sí, pero tengo un problema, quiero decirle que salga conmigo.
-No te preocupes, te ayudare, ¿cuando lo harás?.
-Lo acabó de hacer.
-¿Y que te dijo?.
-Cuando lo harás.

Me tomó menos de 10 segundos darme cuenta de lo que realmente estaba hablando, al principio estaba confundido, pero luego mi cara no dejaba de expresar sorpresa e ilusión.

-Jason que...
-Ahora que captaste la indirecta, ¿quisieras salir conmigo?.

Mi corazón empezó a latir muy fuerte, era una nueva sensación, algo dolorosa pero cálida, casi podían escucharse los latidos, quería abofetearme para ver si no me había quedado dormido. Esperen, ¿como superó tan rápido esa persona?.

-Oye, ¿no estabas enamorado de otra persona?, ¿como es que la superaste tan rápido?.
-Realmente no lo supere por completo, pero como dijiste, debía enamorarme de nuevo, y eso hago, no pensé que pasará enserió, pero hubo algo en ti que...
-¿Que?.
-Que me dijo, que si te entregaba mi corazón, por más frágil que fuera, tú jamás lo romperías.

Los colores vinieron a mi cara como bombillos de árbol de Navidad, no esperaba para nada esto.

-¿Y que dices?.

Se acercó a mi cara de forma atrevida, y yo asentí inocentemente, dejando todas mis dudas a un lado.

-Bien, nos vemos en el parque el sábado. No faltes.
-Okey...

Sonrió y antes de irse pasó su mano por mi cabello, pude sentir como se estremecía mi espalda al sentir ese tan cálido tacto. Al abrir la puerta, ambos vimos con claridad a mis amigos, que se notaba que nos habían estado espiando todo el rato, que vergüenza. Al parecer a Jason no le importó y se fue sin antes decirme "Adiós".

-Vaya, vaya... Nuestro pequeño Joy esta creciendo.
-No puedo creer que nos hayan espiado.
-Lo lamentamos, es que fue inevitable, la conversación se ponía cada vez más interesante.
-Sí, además ya me di cuando de porque estuviste distraído todo el día, "corazoncito".
-¡Coranzocitos tu abuela!.

Salte encima de Lucas de forma infantil, mientras que nos reíamos todos juntos, mejores amigos que estos no puedo desear.

Esa noche no dormí, estaba muy feliz como para pegar un ojo, sólo podía estar mirando al techo con una sonrisa de niña enamorada, ¿como pudo leerme la mente?, quiero decir, me escogió a mi, un completo extraño que conoció por casualidad, y que probablemente no tiene ni la menor idea de con quien esta saliendo, aunque a juzgar por sus palabras...
"-Por más frágil que fuera, tu jamás lo romperías..."
He de admitir que eso fue asquerosamente cursi, pero me gusto, que coño, me encanto, se nota que los defectos le importa lo más mínimo... Que chico tan curioso... Y lindo.

*Punto de vista de Jason*

Que es lo estoy haciendo... Se supone que tengo el corazón echo pedazos. Y aún así, no puedo dejar de pensar en él.