⑰ Caída

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—¡Nos vemos Elena! —grité, cerrando la puerta principal de casa. Hoy, de nuevo, volvió a regañarme por llamarla por su nombre, y para fastidiarla más, lo volví a hacer mientras salía. La había dejado a ella y a papá desayunando juntos, porque no pude evitar recordar como mamá lamentaba haberse quedado con papá durante su juventud el día de ayer. No me sentó bien saber ese pequeño detalle.

—¿Ahora la llamas Elena? —cuestionó Jamie, recostada en las rejas de mi casa. —¿Qué pasó con los «mami» de pequeña? —se rio.

—No fastidies, Jamie — bufé pasando por su lado. —. Hoy no estoy de humor.

—¿Te has molestado con ella? Cuéntame.

—No lo estoy. —respondí. —. No hay nada que contar.

—Bueno, que humor. Algo debió de haber pasado, ¿es por lo del divorcio?

—Jamie, no saques conclusiones precipitadas.

—Me estoy preocupando por ti, te conozco y sé que este tema es difícil de hablar, pero sé que entre las dos hay confianza y...

—La verdad, no creo que tengamos un gran nivel de confianza luego de enterarme que eres amiga de los mellizos. —solté lo que me guardaba por semanas—. Incluso ahora crees como me siento con respecto a mis padres, pero la verdad no tienes ni idea de cómo son las cosas entre mi familia. No me conoces.

Jamie tenía sus brazos extendidos mientras que hablábamos, o discutíamos. Desvió la mirada unos segundos, y casi ni la escuché cuando me dijo:

—Relájate, Court. Me iré un tiempo a Alemania a visitar a mi familia.

—Bueno, ojalá no te atrases en las clases. —respondí simplemente—. Siempre lo haces, ¿no? Viajar cuando quieres...

—Créeme que yo tampoco quería viajar en estos tiempos, pero mi familia hace reuniones de emergencia y no me queda de otra que asistir. Una mejor amiga me hubiese preguntado si pasaba algo.

—No creo que este pasando algo si estas por irte a otro continente...

Jamie suspiró y rodó los ojos. Nos habíamos detenido justo en la esquina. Me di cuenta que ella no llevaba mochila.

—Antes de irme, quería preguntarte, —me detuvo—¿No te has preguntado el por qué Raúl te terminó? Según tú todo iba de maravilla, hasta que te dejó de hablar...

—¿Por qué parece que sabes algo sobre eso? Has hablado con él, ¿verdad?

—Claro que no, Court. Además, fue Angélica quien me contó sobre tu ruptura, ayer estabas muy enfocada en saber tu nota que se te pasó por alto decirme la razón por la que fuimos a un maldito karaoke. ¿Por qué no has hablado con Raúl?

—No hay nada de qué hablar, está claro que dejé de gustarle.

—Siempre hay algo de que hablar, tú nunca ignorarías algo tan importante-

—Deja de hablar como si supieras lo que pienso. —espeté, irritada. —. Raúl y yo no volveremos a hablar, hemos terminado. Deberías alegrarte, ahora tenemos más tiempo para estar juntas.

—Me voy de viaje, ¿recuerdas? Y si no fueras una cobarde hablarías con él; tal vez hay otra explicación que un simple "Ya no me gustas"

—Entonces si sabes algo y no me lo has dicho.

—No has preguntado. —sonrió cínicamente. —. Lo único que diré es que la razón está más cerca de lo que te imaginas, Courtney. Mi vuelo sale hoy, venía a decirte que me iría, eso es todo.

Cuando Ella LlegóDonde viven las historias. Descúbrelo ahora