Reglas Para Ser Amigas ➽ Kaylor

Capítulo 16

La noche era tranquila, en las calles ya nadie andaba rondando y a las doce de la noche, sonó como tenía predestinado, el celular de Karlie.

Esta en seguida lo cogió y colgó la llamada exasperada. No quería despertar a la chica que permanecía, plácidamente, durmiendo a su lado. La miró en seguida, pero esta no movió ni un músculo, su respiración seguía suave y tranquila. Karlie puso su móvil en silencio y lo dejó sobre la mesita de noche que estaba su lado. Mira a todas partes y no se lo puede creer.

«¿Qué estoy haciendo aquí?»

Pero la pregunta pasó por su cabeza, obligándola a formar una enorme sonrisa divertida. Estaba relajada, respiraba sin temblores en su cuerpo y su ansiedad se había evaporado.

Miró a su lado y gracias a la tenue luz de la lámpara que permanecía encendida, pudo distinguir las pecas que decoraban la nariz de Taylor. Sonrió ya que, no se había percatado de ese detalle y agradeció al tiempo por haberle dado ese momento a solas con la chica rubia de puntas rosa.

«Pronto serán moradas»

Se dijo a si misma, pensando en lo que le había dicho Taylor la vez anterior.

Trató de sentarse y afirmó su espalda en el respaldo de la cama. Miró sus piernas y estas aún permanecían vestidas con aquel blue jeans de la tarde. A Karlie no le importó acostarse con ropa, a veces lo hacía y le daba lo mismo.

Se fijó entonces que su móvil se encendió y vio en la pantalla, el nombre de Selena que estaba llamando. Karlie recordó entonces que a las doce llamaría, pero nunca pensó que sería tan puntual en hacerlo.

— Hola Sel.

— ¿Y te atreves a colgar maldita? ¡Cómo te atreves!

— Sel, no grites... Se escucha tu voz por todo el cuarto... Te hablaré, pero bajito...

— Está bien... Me calmo — Karlie rió bajito y mordió su labio mirando a Taylor con nerviosismo para tratar de que no despertará —. Entonces cuentame ¿Cómo te fue con Taylor?

— Adivina — respondió la ojiverde sin poder apartar los ojos de su propia bella durmiente.

— Por tu tono de voz... No sé qué me ocultas... Karlie ¿Estás bien?

— Sel... Estoy tan bien, que tengo la sonrisa tatuada en la cara - y no era mentira.

— ¡¡Ahhh amiga debes contarme todo!! Dime qué pasó... Karlie tienes que...

— Taylor está durmiendo a mi lado, Sel. Esta justo aquí, apegada a mi con su brazo pasando sobre mi abdomen y su rostro pegado a mi cuerpo...

— ¡¿Qué?! ¡¿Me estás tomando el pelo, Karlie Kloss?! - Gritó Sel y Karlie tuvo que alejarse el móvil de la oreja para poder mantener su oído a salvo.

- Te dije que no gritaras, Sel.

- ¡Me pides que no grites! ¡¿Cómo me pides que no te grite?! ¡Estás acostada con la chica que te anda trayendo las hormonas por el cielo y dices que no grite! ¡Dios mío, esto es mejor de lo que pensé! ¡Te creía más seria pero mírate! ¡Ya te la tiraste!

— ¡No! - Karlie levanta la voz y en seguida aprieta los labios mirando a Taylor. Esta no se movió y dormía como si nada -. No me he acostado con ella... No en ese sentido, Sel. Sólo me quedé en su casa...

- ¡Pero Karlie! ¡Y no han hecho nada! ¡Qué pérdida de tiempo, mujer!

Karlie rió por cómo Selena se estaba tomando todo. Karlie sentía millones de cosas que no sabía cómo expresar, menos aún con una amiga que estaba atónita con la buena nueva y menos aún sin saber que pasaría por la mañana cuando Taylor despierte. ¿Será la misma Taylor que estuvo hablando con ella hace unas horas? ¿Se arrepentirá de lo que pasó? ¿Se arrepentirá del beso?