⏩Capítulo 38⏪

Start from the beginning
                                    

Contengo el aire y apreto los ojos cuando un escozor fuerte, me invade por completo toda la mejilla.

  - Aguanta un poco, Irene.- abro los ojos y veo que me sopla el lado a la mejilla que aún me escocía.

  - Menos mal que me escocería sólo un poco.- sonrío irónica.

  - Esto es lo que hay.- me dice Jesús, girándose para alcanzar el bote del Betadine.

Veo como parte un trozo de algodón cuando el otro lo ha tirado a una bolsita pequeña verde, y observo como el algodón va adquiriendo un color rojo oscuro, y con un tono amarillento quizás.

  - Que asco.- digo haciendo una mueca al ver el color.- Eso no escuece, ¿no?

  - No, esto quema.- sus ojos se clavan en los míos por unos instantes, y su expresión frívola me hace temer durante unos segundos.

  - ¿Qué?- digo tragando saliva, temerosa del dolor que me pueda causar ese líquido.

  - Es broma Irene.- ríe y suspiro aliviada.- Esto no es nada, no lo notas.

  - Algún día te tengo que matar.- digo dándole un golpecito amistoso en el hombro.

  - Te morirías tú también.- me dice, llevando el algodón a mi mejilla. Otra vez lo tengo cerca.

  - ¿Es una amenaza,Oviedo?- le pregunto, y veo cómo sonríe de lado, mientras frota suavemente el algodón por uno de los arañazos.- Me pregunto si debería tener miedo.

  - Oh,no es una amenaza.- me responde.- Es una advertencia, si muero yo,no aguantarías ni un segundo en este mundo sin mí.

Ambos nos quedamos mirando. ¡Cuánta razón! Claro que no sobreviviría ni un segundo sin tenerlo cerca, más cerca que ahora,... Y es que es idiota, y lo podré odiar todo lo que yo quiera y desee pero, siempre habrá sitio en mi corazón para quererlo.

Aparta la mirada para fijarla en uno de los arañazos de la otra mejilla y comienza a frotar ahora esta.

  - Aún no me has contestado.- dice, pasando de un arañazo al otro.

  - Mi respuesta es que claro que me moriría si te pierdo.- trago saliva al ver cómo me vuelve a mirar.- Al igual que con Dani, si se muere él...

  - No me refería a esa.- me interrumpe.

  - Ah.- digo confundida.- ¿A cuál entonces?¿Sólo me has hecho esa?

  - ¿Sigues enamorada de mí?- lo dice con un hilo de voz algo agudo, como si le hubiese costado pronunciar cada una de esas palabras.

¿Que si sigo enamorada de él?

Hasta las trancas.

¿Debería saber que no me he olvidado de él?

No.

Y es que si queremos seguir estando juntos, que no nos separen, debemos olvidarnos de nuestro romance y seguir siendo hermanastros. Sólo eso. No podemos arriesgar, porque sabemos muy bien -y él mejor que nadie- que lo nuestro no tiene futuro, que puede que podamos esconder este secreto unos meses, años, pero no toda una vida.

Y llegará el momento que querremos formar una familia y no podamos.¿Por qué no? Porque ya eso sí que deberíamos contárselo a Eva y a Juan Carlos, pero se negarían y hasta ahí nuestra bonita historia.

Nunca podremos estar juntos, no de la forma que queremos pero debemos conformarnos con vivir en la misma casa y querernos como hermanos. No hay otra opción.

Nunca dejaré de amarlo, y nunca amaré a alguien tanto como lo amé,amo y amaré a él. Podré querer a alguien, pero nunca me enamoraré.

Mi corazón podrá ser compartido, pero siempre pertenecerá a el idiota de Jesús Oviedo Morilla.

Sólo espero que él no me olvide tras decirle lo que le voy a decir ahora; espero que me entienda y que por favor, no se olvide de mi. Y es que eso será difícil, porque él tiene a miles y miles de chicas detrás suya, haciendo y cometiendo cualquier idiotez con tal de que él -y su hermano- la vean como algo más.

Hay miles, y de entre esas miles hay algunas que serán más guapas, más simpáticas, más cariñosas, y menos bordes que yo. Él cree que soy lo mejor pero yo sé que no lo soy, que hay gente mejor que yo.

Pero me gusta que piense que sólo yo le puede hacer feliz.

Pero tiene derecho a formar una familia como Dios manda, y a ser feliz. Y puede que yo solotenga que ser su hermana, pero para mi tenerlo cerca y no perderlo, es lo único que deseo.

Por eso tengo que decirle que No, porque si no volveremos a lo mismo de antes, retroceremos dos pasos, retroceremos un nivel más. Y conforme más bajo sea el nivel, más probabilidades tenemos de que nos separen, de que nos arranquen de cuajo. Porque eso es lo que harán cuando se enteren de que estamos juntos.

Si él hubiese entendido que lo amo pero que no podemos estar juntos, no tendría que verme obligada a mentirle para hacer que se olvide ya de nuestro futuro juntos, porque él nos ve juntos en una casa junto a nuestros hijos pero yo en cambio, me veo en un internado alejada de ellos. Para siempre.

  - No.- digo, y veo cómo apreta el bote de Betadine en la otra mano y el líquido comienza a salir de este.

 
___

Un capítulo intenso, ¿no creéis?

2/*

Y me terminaste odiando #2Where stories live. Discover now