Capítulo 3

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EVAN

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EVAN

Todo esto surgió antes de llegar al pueblo de Morwick. Fue como una señal caída del cielo. En ese entonces estaba furioso y cansado por todas las cosas que había causado, todo era mi culpa y eso me causaba repulsión por mí mismo. Tener que ser la persona que era y donde quiera que vaya recordaría las cosas que hice. En aquellos momentos no sabía a donde me dirigía, lo único que tenía claro, era que necesitaba huir de aquel maldito lugar que me traía horribles recuerdos.

Estaba a punto de arrancar el auto, cuando la vi pasar. Iba caminando por una de las calles hablando por teléfono. Mi curiosidad hizo que me quedara observándola. La poca luz que quedaba de aquella tarde me hizo ver lo hermosa que lucía. El vestido corto negro floreado se le ajustaba por el cuerpo, su pelo largo y negro brillaba como destellos de luz, parecía de seda si lo mirabas demasiado, su piel era como de terciopelo que te invitaba a acariciarla, si fuese posible. Todos mis sentidos estaban completamente centrados en admirarla.

Mis ojos estaban anonados en aquella chica, su forma de caminar, sus gestos y expresiones que hacía al hablar por ese teléfono, la seguí con la mirada hasta detenerse en una casa grande a unas cuadras, ella colgó el teléfono cuando vio a una mujer la cual saludó, supuse que quizás era su madre debido al parecido, sin embargo, no era la única persona afuera de la casa, también estaba un hombre mayor que caminó hacia ella y la abrazó, inmediatamente lo reconocí, aquel hombre que llevaba tiempo sin ver, y que había cambiado por completo mi vida entera, el coraje me invadió que deseé balancearme a él y golpearlo con todas mis fuerzas.

En eso, otra cosa llamó mi atención. Frente a su casa se estacionó un auto de transporte, bajaron dos hombres y abrieron la puerta trasera de la camioneta, mis ojos se abrieron del asombro cuando bajaron una bolsa negra de cadáver, seguido de eso, la metieron cuidadosamente a la casa. Aquella chica y sus padres los siguieron por detrás hasta perderlos de vista.

De no haber sido por aquello, de no haberme cruzado con esa chica, me habría marchado de este lugar y desaparecido por completo, al menos, por segunda vez. Pero esto que acababa de ver, y aquella chica que se me había clavado en la mente, necesitaba saber más de ella y de esa familia.

Fue aquel día, cuando me di cuenta que me había obsesionado con Kirby Fitzgerlad.

¿Qué curioso no? Después de haber intentado huir de aquello que tanto aborrezco y detesto, un día de repente se me pone enfrente, por un momento creí que jamás podría alejarme de todo lo que me recordaba mis peores momentos, pero de pronto se me vino a la mente que quizás, la vida me estaba dando una oportunidad de actuar, de hacer algo que nunca me había planteado y atrevido. Después de varias semanas de haberla estado observando entre las sombras, descubrí que se mudaría a otro lugar por tercera vez, ¿Por qué? ¿Acaso estaban huyendo de algo? Por supuesto que los seguí a donde se mudaron, un pueblo bastante lejos, retirado de todo y muy poco conocido.

Comencé a seguirla a todos lados, tenía su horario grabado en mi memoria de todas las cosas que hacía y a donde iba. Esa familia era todo un misterio, y yo quería saber qué era lo que ocultaban. Tenía un plan que había creado cuidadosamente, descubrí una forma tan fácil y simple de hacerlo, y cuando lo hice, vaya que me llevé una sorpresa. Los dos éramos iguales, ella también cargaba con un peso similar al mío, tal vez menor, pero también tenía una oscuridad en su interior que por más que intentara ocultar o reprimir, siempre estaría ahí. Tan solo necesitaba algo o alguien para ayudarla a sacarlo, a liberarlo de su interior. Y esa, era mi oportunidad y no iba a desaprovecharla.

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