Nueva aventura

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Pucca caminaba con un ritmo pesado, no podía creer que todo siguiera igual, que Garu de nuevo no correspondiera sus sentimientos, mientras ella meditaba todo salió de la nada un pie lo cual hizo que se tropezara.

-tan torpe como siempre, ahahaha.

Pucca- pero que?... Ring ring, debí imaginarlo- si de por si estaba de mal humor eso la había echo enfurecer mas, ring parecía la misma niña mimada de siempre, la que siempre quiere llamar la atención, pero su aspecto había cambiado, su pelo color azul envuelto en un chongo con algunos cabellos por fuera, una camisa rosa que dejaba ver su ombligo y unos jeans azules muy pegados- que quieres?

Ring- así es como saludas, después de tanto tiempo.

Pucca- y tu siempre saludas tirando a las personas, escucha niña estoy de un pésimo humor así que te recomiendo que no me molestes, o quieres ser humillada como en los viejos tiempos.

Ring- las cosas han cambiado cara de sapo, ahora soy mucho mas fuerte, así que por el contrario te diría que mantengas un margen entre nosotras, oh y entre Garu, el solo será mío- toca a pucca con la punta de su dedo, estaba por estallar y dale un buen golpe pero para su alivio Ching estaba por ahí.

Ching- ya déjalo pucca, no vale la pena- barriendo con la vista a ring- ven vamos al restaurante.

Pucca no se iría sin antes darle una mirada asesina a su enemiga ring- esta bien.

Pucca- no ha cambiado mucho por aquí, verdad- ching al escuchar esto de inmediato se imagino que aquellas palabras iban dirigidas a Garu.

Ching- bueno eso es depende de ti sabes- miro a su amiga que poseía la cara cabizbaja.

En el restaurante todo parecía estar mal, el oficial, papa de abyo estaba presente y parecían todos estar preocupados, ching y pucca se preocuparon al ver esta escena, los tíos de pucca estaban parados junto al oficial.

Pucca- que ha pasado?

Oficial- parece ser que han robado mucho de los cubiertos de tus tíos cambio.

Ho- hoy en la mañana cuando bajamos a preparar fideos, bueno, mas de la mitad de nuestros utensilios han desaparecido.

Linguini- sin utensilios no hay fideos.

Dumpling- y el que mas nos preocupa es el cuchillo maestro, veras pucca desde hace generaciones que nuestra familia posee el cuchillo maestro, es uno de los más afilados en el mundo, el cual nos ayuda a preparar los mejores fideos, si algo le pasa nuestro negocio ira hacia abajo, al igual que nuestra dignidad.

Ching- ya se, abyo, pucca, Garu y yo haremos guardia toda la noche, de seguro se volverán a presentar aquí, ya que si es eso lo que les interesa no dudaran en venir, que dices pucca?

Pucca- lo que sea por el restaurante.

Tíos- esa es una gran idea, bien ya esta atardeciendo, por que no juntan a los demás, confiamos en ustedes chicos.

Ching- vamos pucca- salen corriendo del restaurante cuando ching mira a pucca y se detiene- pucca creo que lo mejor será que tu le digas a Garu y yo a abyo.

Pucca- el no querrá venir conmigo, pero lo intentare.

Pucca corría en busca de Garu, si tenía suerte pasaría la noche con el y podría por fin aclarar todo, rápidamente llego a la casa de Garu, toco la puerta dos veces al hacerlo recordó cuando entraron a la casa de Garu la cual era una casa que estaba llena de trampas, no tardo mucho es escucharse una voz.

Garu- ya, ya voy- para sorpresa de aquel ninja sus ojos se encontraron con los de pucca, no estaba ya acostumbrado a que ella estuviera parada en su pórtico- pucca, ya te dije que estaré ocupado entrenando.

Pucca- no es eso, nos han robado en el restaurante utensilios y hay uno en particular que es demasiado importante, tememos que no lo roben y es por eso que debes ayudarnos, abyo y ching irán, entonces vienes?

Garu- bueno si es eso, supongo que no hay de otra,vamos.

Ambos salen corriendo uno al lado del otro, pucca se hace un poco para atrás, solo para mirar si cabello, como se ve con el viento, su ancha espalda y su piel pálida, ya en estos momentos tenía unas ganas enormes de tumbarlo al suelo y ahogarlo en besos, estaba por completa perdida hasta que Garu voltea a verla con una mirada de confusión no entendía que tanto le miraba, pucca se sonroja y le da una leve sonrisa, Garu no hace ningún gesto solo vuelve a mirar su camino, pucca en su mente piensa " de verdad nada a cambiado".

Llegan juntos al restaurante abyo y ching ya estaban ahí esperándolos.

Abyo- pucca, ching me lo ha contado todo, escuchen el plan es este, en la noche ching y yo estaremos ocultos dentro de la cocina, tu y Garu estarán ocultos en las mesas, en cuanto el ladron entre lo tomaremos y lo haremos confesar todo, ok.

Todos- siiii.

La noche llego rápido y todos estaban en sus posiciones, abyo oculto en la estufa, ching en una olla grande, mientras pucca debajo de una mesa al igual que Garu, ambos dentro de la misma mesa ya que según abyo así podrán salir al mismo tiempo y atacar mejor, el corazón de pucca latía rápido, sus hombres estaban rozándose ella no sabia que pensar solo quería estar cerca de el.

Garu- ahora solo hay que esperar- Garu siempre ha sido alguien serio al cual no puedes sorprender tan fácilmente pero por alguna razón pucca siempre lo hacia, ella simplemente estaba en todos los momentos, el le ganaba por dos años a pucca y pensaba que solo la veía como una niñita que quería jugar y que era molesta pero sabia que el también podía ser un poco inmaduro algunas veces.

Pucca- si... Oye Garu, recuerdas cuando éramos niños.

Garu- pucca no es momento para recordar, concéntrate.

Pucca- lo sé pero, en el internado yo siempre recordaba aquellos días, dime en verdad yo siempre te fui una molestia?- los ojos de pucca lo miraron fijamente, sentía que iba a explotar, sus labios estaban solo a centímetros, Garu se sonrojó al oír las últimas palabras pero seguía con su mirada fría de siempre, pucca se fue acercando poco a poco a Garu hasta quedar literalmente a milímetros, Garu confuso y sin poder moverse por la tensión solo la miraba sin decir una palabra, pucca cerro los ojos lentamente mientras se acercaba aun mas, Garu sentía su respiración en la cara trato de cerrar sus ojos pero sin darse cuenta sus labios ya habían chocado, esa sensación no era igual a cuando eran niños, al fin pudo sentir sus labios pegados a los suyos.

Su beso hubiera empezado a tener más emoción sino fuera por que abyo grita.

Abyo- ahí va el ladrooon!!, deténganlo pucca, Garu!!

Ambos se despegan y saltan hacia el ladron pero este saca una bomba de humo, los cuatro chicos salen del restaurante a toda prisa tras el ladron.

Pucca- rayos era la oportunidad perfecta...

Gracias por leer por favor dejen que les pareció este capítulo en los comentarios, les gusto el beso😏😏
Sigan leyendo que se pondrá más interesante 👌🏼👌🏼.

Pucca y garu sentimientos encontrados Donde viven las historias. Descúbrelo ahora