Prólogo

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Buenos días, Buenas tardes, Buenas noches, depende de la hora a que estés leyendo esto. Primero que nada, mi nombre es Railey Jones, nací en Cambridge hace 18 años atrás, largos y supuestamente dichosos años, en un hospital perfectamente cuidado o al menos eso pensaba yo, tenía 2 hermanas. Kattie mi hermana mayor de 21 años, y Skyler mi hermana menor de 10 años, exactamente soy la invisible del medio, mi madre en estos momentos esta soltera ya que mi padre nos abandonó, puesto que lo último que escuche decir de él fue que todas éramos unas estúpidas y no compartiría la casa con estúpidas, el desgraciado nos insulto y con eso se largó a quien sabe donde, pero eso nadie de nosotras les importa obviamente excepto a mi madre.

Mi madre es muy distraída, no siempre fue así y de eso no tengo ninguna duda, porque ella no sabe que Skyler ya no va al colegio, porque esta se la pasa en su cuarto llorando, a lo que todas hacemos, excepto Kattie que se fue de la casa a los 20 años, diciéndome las siguientes palabras: Railey tú debes salvar esta familia de la desgracia. Yo la mire confundida y en mi mente dije "¿Cómo salvar algo que esta requetemuerto?" Simplemente eso es imposible, a menos que tengas una bonita y perfecta maquina del tiempo, pero eso nunca pasara. Simplemente es mejor no hacerse ilusiones, porque mientras más alto vayas más dolorosa sera la caída, es culpa de la física.

Hablando de algo completamente diferente, lo que más me gustaba hacer era quedarme con mis amigas hasta ver el atardecer. Mis amigas son: Juliette. La chica de pelo castaño y ojos verdes esmeralda, fascinada por la cocina. Destiny mi amiga de pelo pelirrojo con un flequillo de rulos que le cubría la frente, le encantaba hacer deportes. Finalmente Roma, mi mejor amiga más conocida como la chica perfecta, ella tenía una vida perfecta; era una chica de pelo rubio y ojos zafiro, tenía una casa gigante, unos padres que la querían y apoyaban, un hermano empresario graduado de la universidad de Standford. Ella tenía toda la atención, los chicos querían estar con ella mientras yo Railey Jones era la cosa del costado, el bicho raro que se posicionaba a lado de la chica más popular del colegio lo que concluía que me veía como un bulto raro.

¿Saben que era lo peor?, que ella estaba enamorada del chico que yo amaba pero nunca se lo dije porque tenía miedo de que la única persona a quien le importo se alejara de mí, lo peor es que él también le gusta ella, nunca lo ha dicho pero estoy segura que es verdad, porque siempre la mira cuando tiene oportunidad. Mi amiga era la envidia de todas las chicas..... y si incluyéndome, yo la envidio demasiado. No le tengo cólera ni quiero matarla por ello, simplemente son las ganas de que cuando ella sonríe quisiera sonreír con ella, pero una sonrisa verdadera, no una falsa como siempre pongo.

Yo siempre he sido, podríamos llamarlo así como la incomprendida del grupo a la que molestaban e insultaban en el colegio. El bicho raro de pelo negro y ojos negros que cubría mi ojo izquierdo a las que todos menos mis amigos les parecía extraña, y eso que ni estoy segura si es verdad, porque como dicen por los barrios de por allí, no debes confiar en nadie, aunque sea la persona más cercana a ti, pero sobretodo no confíes en ti mismo, porque tú eres la persona que más daño puede hacerte.

Me gusta vestirme como una chica adorable, o de negro, o de rojo, o de rosa, o de celeste, o de morado, digamos que me gustan todos los colores. No soy una chica a lo que la llaman gótica o algo así, simplemente que me pongo maquillaje y delineador negro porque me gusta. Algunos no lo respetan y se burlan pero yo simplemente trato de ignorarlos y ahorcarlos mentalmente. Tengo una mochila muy peculiar, esta es de color blanco pero tiene muchas frases de mis libros y quotes favoritos de personajes famosos. Además simplemente diré que los insultos que me dicen son muy estúpidos pero igual duelen un poco, pero yo ruedo los ojos intentando disimular mi fastidio y mis ganas de agarrar sus cara y comenzar a arañarlos hasta que se le salga la piel. Aparte de todo esto me encanta dibujar porque allí me desahogo sin llorar más de lo que ya lo haga para no levantar sospechas en mis amigas ni en mi familia, aunque a los últimos no les importa la verdad.

A los once años me habían detectado una severa esquizofrenia por la ansiedad, el estrés, depresión, nervios y todo junto. Las voces se escuchaban a una magnitud tan grande que hacía que la cabeza doliera, y me golpeaba la cabeza y me la agarraba para que pararan, mientras decía palabras inentendibles, estuve en un tratamiento de medicinas y no me acuerdo que más, aparte no quiero contarlo, es doloroso y raro recordarlo.

Así que esa persona, mis queridos amigos, era yo, Railey Jones la chica que tenía envidia de su mejor amiga, tenía pereza de hacer algún trabajo y al final sufría las consecuencias, tenía cobardía de defenderse ante sus compañeros, quien sufrió una leve esquizofrenia por el estrés y la depresión, a quien no le gusta las personas que sonríen con sonrisas falsas, quien sabe que la vida tiene un punto en el que piensas que ya es hora de partir, no sabes si llegara muy temprano o muy tarde pero finalmente ese día llegara y voltearas en el pasado y te darás cuenta lo mucho o muy poco que has vivido. La chica que le encantaba encerrarse en su jaula, en su pequeña prisión con un poderos candado , que la llave había desaparecido extrañamente de la faz de la tierra dejando allí encerrada a la chica que prefiere morir y posiblemente ser feliz a que vivir y ser infeliz.

Porque eso soy...............soy una chica infeliz.

Morí en sus brazos Donde viven las historias. Descúbrelo ahora