Psicópata [Luke Hemmings] TERMINADA

Narra Luke (editado)

EDITADO

—si quieren sobrevivir, síganme— El muchacho ese, el de la película Divergente, dijo desde la pantalla.

______ se quedó dormida y la acomodé sobre el sillón, haciendo que use mis piernas como almohada, para que esté más cómoda. Seguí mirando la película por el simple hecho de no querer levantar mi perezoso culo del sofá. Estaba bien ahí.

—¿Luke?— ____ se removió, despertándose.

—¿Sí, amor?

—¿Cuánto tiempo vamos a estar aquí?

—no lo sé.

Mi idea era salir del estado, e ir a algún país lejano, pero parecía una locura ahora. ______ me miró y asintió, cerrando los ojos.

—iré a preparar algo para comer— dijo, parándose y yendo a la cocina. Vi que tocó su costado, donde estaba la marca que le había hecho.

— ¿te duele?

por un momento me arrepentí de lo que le había hecho pero sabía que había estado bien al hacerlo. Ella debía saber — al igual que todos lo que la vean— que era mía. Sólo mía.

Ella asintió.

—ve a darte un baño.

Ella se paró sin rechistar y caminó hacia el pasillo, quedándose quieta en la entrada. Miró todas las puertas y terminó encontrando la que correspondía.

Mientras esperaba a que mi chica salga del baño empecé a saltear algunas verduras para hacer una tortilla. Apoyé mi espalda baja contra la mesada y silbé una canción mientras que rompía algunos huevos para batirlos y así unir la mezcla.

—¿Qué estás haciendo?

____ se sentó en la mesa y mordió su uña, como siempre. Tenía ese hábito desde que la conozco.

—cocinando, ¿No es obvio?

—bueno, me refería a qué estás cocinando.

—salteado de verduras, ¿Puedes poner los platos en la mesa por favor?

Ella asintió y se paró. Buscó los platos, agachándose para recogerlos del cajón bajo, dejándome ver su tan delicioso culo.

Tómala. ¡Hazlo! Ella es tuya.

Sacudí mi cabeza. Estaba empeorando cada vez más.

De nuevo, sentí ese impulso de poseer a _____ contra la mesada de la cocina.

—¿Son estos, no? —me preguntó, mostrándome unos platos blancos.

—si, esos— asentí y respiré entrecortadamente— ¿Puedes acercarte un momento, por favor?

Ella lo hizo, con los ojos abiertos, pero lo hizo. Antes de que terminara de hacerlo, estiré mi brazo y agarré el suyo para acercarla más rápido y más cerca de mi cuerpo.

—¿qué haces?

—quiero besarte.

—n-no.

—¿No? ¿Por qué no, amor?

—porque no, Luke.

—eres mía

—¡No soy tu puta personal, joder!

Quise hacerlo. La voz me lo decía y yo estaba de acuerdo. Sabía que no podría conformarme con su cuerpo, también necesitaba poseer su mente y su alma. Ella debía pensar en mí, respirar por mí y para mí. Yo debía ser su mundo, porque ella era el mío.

—¿Y eso debería importarme? ¿El que seas o no una puta?

—si, debería.

—puta o no, eres mía y te haré mía de todas las formas posibles, habidas y por haber. Tu cuerpo es mío, tu mente, tu corazón y toda tú deben ser para mí. ¿Entiendes?

—¡Loco de mierda!— ella se sacudió, tratando de sacarme de encima.

Era obvio que no lo lograría. Su brazo libre palpó la mesada en busca de algo. Los ojos de mi chica estaban húmedos. ¿Por qué ella me temía cunado yo sólo quería amarla?

—no me temas— le dije— esta es mi manera de amarte.

—¡pues busca otra! Me lastimas, Luke. ¡Nos lastimas!

—¿TÚ CÓMO CREES QUE ME SIENTO? ¿FELIZ COMO UN CRÍO EN NAVIDAD? ______ es horrible ver que la persona que amas te odia y te desprecia.

—Es horrible ver como la persona que amas te lastima— dijo ella.

—¿Qué has dicho?

Ella dijo 'la persona que amas'. ¡Ella me amaba!

—n-na-nada.

—repítelo.

—¡Nada!

—¿Me amas?— no pude evitar cierta desesperación en la voz.

—no, Luke, Jamás te amaría. Las personas como tú no merecen ser amadas.

Sentí algo haciendo 'crack' en mi pecho. Debió ser alguna costilla acomodándose, porque yo no tengo corazón.

—bueno, es una lástima que no me des una oportunidad, porque yo contigo seré paciente, ______. Esperaré a que me ames.

—¡Nunca lo haré!— ella masculló cerca de mi cara y volvió a sacudirse— y espera sentado, o te cansarás.

Sonreí.

—tú no sabes lo que dices. No sabes nada, _____. Soy capaz de todo por tener tu amor.

—no, Luke. Porque tú no sabes de lo que yo soy capaz de hacer por huir de ti.

Finalmente, solté su brazo.

Lo principal para atrapar una presa, es dejar que se relaje. Como el sapo, si lo pones en agua hirviendo, él saltará, pero, si lo pones en agua tibia y la calientas de a poco, él se relajará lo suficiente como para ahogarse y morirse.

Yo sólo debía esperar. _____ se dormiría sobre el agua y tarde o temprano caería sobre mis redes.

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