Capítulo 40

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"¿Pero... Qué...?"

Estábamos a punto de entrar a la gala, cuando Matt me detuvo de forma brutal.

-¿O... ocurre algo s... señor?
-Quiero que quede algo en claro. Ahí dentro, van a llegar, o quizás ya estén, personas importantes para nuestro "Hotel Ejecutivo". Tú te quedas cerca de mí, no te apartarás. ¿Quedó claro?
-S... sí... Señor... pero ¿y si lo pierdo?
-Lo arreglaré en la habitación.

Ok...en otras palabras:
"Me alejo de él, y me consideraré muerta".
Entramos.
Las paredes estaban perfectamente pintadas, cuadros llamativos y hermosas flores... estatuas...

"Estábamos ya dentro del lugar, era un sitio muy bien decorado, platos con diseño, cuadros espectaculares, estatuas, etc.
Pasamos por muchas puertas, hasta detenernos en un ascensor.
Me hicieron pasar primero. Descendió y antes de salir..."

Este... ¿éste es el lugar donde me subastaron?
Siento un nudo en mi garganta y un vacío en mi corazón.

-¿No te he dicho que estamos un poco atrasados?
-S... sí... lo siento señor...

Me pegué a Matt como la mantequilla al pan y  él me miró de reojo. No sé si le incomodó o le gustó.
Al entrar a una sala más grande, habían personas hablando y otra bailando con gracia y elegancia.

-Buenas Señor Cortez. -se presentó un señor.
-Es un gusto. -respondió Matt.

Matt se inclinó, así que hice lo mismo.
Esto ocurrió a lo largo de la noche con muchos hombres, mujeres y parejas.
No me separé de él en ningún momento.
De repente, me siento observada.
Matt siente mi incomodidad.

-¿Ocurre algo Roth?
-Eh... Yo...
-Señor Cortez. -interrumpe un señor.

Cuando levanté la mirada, el señor que estaba al frente de mi, era un hombre alto, delgado, su piel morena y ojos pardos y bien vestido con una rosa blanca en su bolsillo.
Matt interrumpe.

-Señor Rotchbell, es un gusto que haya logrado venir.

Ambos se estrechan las manos y yo sólo me quedo viendo... Me siento inútil.

-¿Y ésta hermosa señorita?
-Oh... yo... lo siento, me presento, me llamo Roth Montalva.

Me incliné y recuperé mi postura. Estoy segura de que la cagué brígido. Seguramente le parecí una tonta, y ahora tartamudeo... o sea... ¡SOY IMBÉCIL!
Lo miro con timidez y él me sonríe tomando mi mano derecha:

-Un gusto señorita Roth. -besa mi mano -Yo soy uno de los... eh...empresarios de el Señor Cortez.
-Sí... -le dije.

¿Qué acabo de decir?

-¿Y qué rol hace usted?
-Yo...
-Roth es mi secretaria. -afirma Matt.

Comencé a negar con la cabeza, pero me pellizcó las nalgas así que me quedé quieta.

-Qué linda su secretaria. ¿Le molesta que me sirva algo?
-Claro que no señor Rotchbell. Mi Hotel, es su hogar.
-Gracias.

El Sr. Rotchbell comenzó a caminar hacia una moza que tenía tragos y cócteles. Matt y yo seguíamos ahí parados, hasta que, nuevamente, me sentí observada.

-¿Qué te ocurre? -me preguntó Matt otra vez.
-Eh... yo... me siento observada.

Matt se pasó una mano por su pelo mostrando incomodidad... ¿Qué dije ahora? Luego de suspirar, otro joven se acercó.

-Señor Cortez, después de tiempo sin vernos. No ha cambiado el gusto... -dijo mirándome.

¿Gusto? ¿SE REFIERE A MÍ?
Lo miré y su rostro reflejaba simpatía, sus ojos no son claros ni oscuros.

-S... sí... -dijo Matt incómodo -... Ha pasado tiempo sin vernos.

Se estrecharon las manos y me presentó.

-Ella es mi secretaria...
-¿Cómo se llama esta princesa?

Sonrojada: 100%

-Roth Montalva... mi secretaria.
-Lindo nombre para la linda chica... Roth...

Me incliné para dar a entender que así me llamaba.
Siento incomodidad y rigidez en la conversación entre ellos 2.

-Bueno, que maleducado soy... -dijo -... me llamo Esteban Monterrey...

Esteban.....Esteban.... ¿ESTEBAN?... ¿RIGIDEZ CUANDO HABLAN? ¿SUS OJOS...?

"(...)
-Pero como tú vas a estudiar secretariado... Yo seré empresario para contratarte...

Mis ojos se abrieron de golpe... ¿Me quiere cerca de él? ¡Lo acabo de conocer!

-Suéltala ahora Esteban.

Nos volteamos...
Matt estaba enojado..."

"Esteban, su rostro reflejaba simpatía, una sonrisa encantadora, sus ojos no eran claros ni oscuros, su cara era linda..."

¿Es él? ¿PERO QUÉ?
Lo miré sorprendida... Matt me da un pequeño golpe para volver a la Tierra.
Luego, el Sr. Rotchbell se estaba acercando a nosotros nuevamente, así que Esteban se fue sin antes, dar una reverencia.

-Señor Cortez... -dijo el sr. Rotchbell.
-Usted me puede llamar Matt...
-Y usted puede llamarme Sebastian.

Ambos se estrecharon las manos, ellos deben tener mucha confianza.
La mirada del Sr. Rotchbell se plantó nuevamente en mí.

-Señorita, ¿se encuentra bien?
-Sí señor... -mentí.
-Señor Matt, y señorita Roth, tengo que irme, quizás, en otra ocasión, podríamos alargar este encuentro. Adiós.
-Adiós Sr. Rotchbell. -dijimos Matt y yo a coro.
-Señorita. -dijo mirándome.
-¿Sí?

Se acercó, tomó su Rosa blanca y la puso detrás de mí oreja.

-Para conmemorar este hermoso encuentro.

Luego se fue.


Subastada? INITIUM [Visión Roth Montalva] I **CORRIGIENDO**Donde viven las historias. Descúbrelo ahora