Capítulo 13

8.2K 495 21
                                    

-¡DÍA DE COLEGIO! –Gritó mamá como de costumbre.
-¿Por qué siempre gritas los primeros días?
-No sé... ¡Apúrate!
-¡Ya!

Matt compró el uniforme, los cuadernos y los libros. Es generoso, pero misterioso. El año pasado y antepasado no se separaba de mí los días que iba. Era como si me protegiera de algo que no podía ver, ni saber. Luego de desayunar, tomé un taxi y fui al colegio.

-¡ROTH! –Gritó Jo.
-¡Jo! –Nos abrazamos.
-¿Nos sentamos juntas?
-S-sí
-¡Que delgada estás!
-Eh, s-sí...
-Que malos son los de allá. No tienen valores y no respetan lo genial que eres
-Gracias.

Fuimos a la sala. Era todo genial, volviendo a lo antiguo y cómodo que era estar entre mis amigos.

-Adelante, joven –señala la profe.
-Gracias. Hola, Roth.
-Jóvenes. Él es Matt. No va a ser su compañero, viene aquí a ver a su compañera, estará todos los días a excepción de los Miércoles. Puedes sentarte. Roth, Josefa, ¿Les molesta –¡Si!
-No, para nada –dije mintiendo.
-Me sentaré adelante con Fer –dijo Jo.
-Okay.
-Permiso –dijo caminando hacia mí.

Nos saludamos con un beso en la mejilla y se sentó al lado del pasillo y yo al lado de la pared. No me dejó sola en ningún momento, ni para cuando quería hablar a solas con Jo. Así que él también escuchó todo lo que hablé. Era incómodo, pero qué se le va a hacer. Ya era hora de irse.

-Adiós, Roth. Adiós, Matt –se despidió Jo.
-Adiós –nos despedimos a coro  –. Es tierna –dijo Matt.
-Sí, y sociable, y atenta...
-Ya entendí. ¿Vamos?
-¿Ah?
-Te voy a ir a dejar. Vamos.
-Oh, vale –tartamudeo.

Fuimos al mismo lugar, o sea afuera. Yo lo miraba, él estaba tranquilo, nada molesto. Su rostro no me muestra preocupación. Entonces, ¿por qué viene? Luego de unos minutos, llegó el auto de Matt.

-Señorita –dijo Jack.
-Gracias.
-Joven Matt.
-Gracias.

Estábamos dentro del auto, yo me encuentro nerviosa, ya eran bastantes cosas que Matt hacía por mí sin siquiera saber el por qué. Jack y Matt estaban hablando.

-... Así que el miércoles a las 12:00am. Y 5:30pm. Tiene reunión con su padre.
-¿Cliente especial?
-Sí, joven.
-Vale. ¿Listo?
-Sí. ¿Cierro la ventanilla?
-Por favor.

Jack apretó un botón haciendo que la ventanilla se cerrara. Esa ventanilla hacía una separación del asiento delantero con el trasero. Nervios acumulándose.

-¿Todo bien? –Me preguntó.
-Sí.
-¿Ocurre algo? –Me quedo callada –. ¿Roth?
-Eh, no.
-¿Segura?
-Sí.

Realmente no quería ir a casa. Iba a estar papá y nuestra relación va de peor en peor.

-Uhm –suspiré –. Es increíble que después de un incidente natural, nos hayamos separado así...
-¿Qué?

Mis ojos se abrieron como platos. ¡Lo dije en voz alta!

-¿Ah? Eh... nada.
-¿Ocurre algo en tu familia Roth?
-No. Olvida lo que dije.
-Me preocupas. Dime por favor.

No, quizás lo metas en la cárcel. Aunque yo fui quien lo provocó yo. No vale la pena hablar de él.

-Matt –suspiré y sonrío de manera forzada –, no pasa nada.
-No te creo, tu sonrisa ni tu tono van de acuerdo a la expresión de tus ojos.
-Uhm –suspiré –. Créeme.
-Lo haría, pero no puedo. No me convences. Tienes la misma mirada triste de ese día –sentía como mi corazón se encogía. No iba a llorar otra vez en su hombro.
-Eso ya es cosa tuya. Si te digo que estoy bien, es porque estoy...
-Roth –interrumpe –. Para de mentir y  dime por favor. ¿Me perdí de algo hoy?
-No.
-¿Y entonces?
-Problemas de la casa. Eso.

Me miró con tristeza. Creo que sabe que me la he pasado mal últimamente, pero no quiero ser una carga para él. Me limité a sonreír.

-Está bien. Te creo. Pero no quiero que me mientas... Ya llegamos.

¿Qué? No. No. No. No. No. No. No. No. No. No. No. No. No. No. No. No. No. No. No. No. No. No. No. No. No. No. No. No. No. No. No. No. No. No. No. Nooooooooo... No me quiero bajar.
Le di una mirada a Matt.

-¿Qué ocurre? ¿Te incomoda estar aquí?
-Algo –suspiro –. Adiós y gracias, Matt.
-¿Tienes algo que hacer el viernes? –Me preguntó Matt con una de sus hermosas sonrisas.
-Eh, no. ¿Por?
-Después te digo. Adiós, Roth.
-Adiós.

Me quedé afuera a ver que se vaya.
Luego entré.

-Hola, hija. ¿Qué tal el día?
-Bien, me recibieron bien.
-Me alegro bastante –susurra –. El papá está en la habitación.
-¿Y?
-¿Podrías ir a saludarlo siquiera?
-No lo sé.

Fui a mi habitación. Todavía me quedan cosas por arreglar pero recién voy a comenzar a llevar todo lo correspondiente la próxima semana.

Pasaron 3 días. Ya es Jueves, ayer Fer se quedó a mi lado todo el día contándome sus ideas locas y, obviamente, preguntándome muchas cosas...

-¿Matt te agrada? –Me pregunta.
-Eh. Sí... Solo que a veces es algo insistente y pegajoso.
-¿Pegajoso?
-Sí. Me refiero a que siempre está al lado mío.
-Ah. ¿Y si le dices que se vaya?
-Tú sabes muy bien que yo nunca podría decir ese tipo de cosas a las demás personas.
-Bueno... Solo decía. ¿Harás algo mañana?
-Eh....

"-¿Tienes algo que hacer el viernes? –Me preguntó Matt con una de sus hermosas sonrisas."

-Ahora que lo pienso. Matt quería decirme algo, al parecer me quería proponer algo para mañana.
-Oh. Será para otra ocasión –suspira y bufa al verlo –. Hablando del Rey de Roma...
-Perdón por el atraso, Roth. Te estaba buscando en la sala y me di cuenta de que no estabas –me dijo Matt inocente.
-Tranquilo.
-Adiós, Roth –sse despidió Fer.

Al parecer, Fer y Matt no se agradan. Cada vez que están los dos, miradas asesinas aparecen...

-Es hora de irse. ¿Te voy a dejar?
-Bueno.

Estamos en el auto. Yo solo escucho. Como siempre. ¿Matt no descansa? Siempre que subo hablan de trabajo, juntas, clientes...

-Joven Matt. Mañana tiene el día desocupado.
-Por fin.
-Se merece un día de descanso tras el gran trabajo y esfuerzo que ha hecho. ¿Cierro la ventanilla?
-Por favor.

Jack la cerró. Matt tomó mi mano derecha y comenzó a acariciarla. Yo no miraba. No quería ver cómo lo hacía... Me tiró.

-¡Au! –Me quejé.
-Perdón.
-¿Qué quieres?
-Nada.
-¿Y entonces?
-Disculpa.

Me iba a sentar bien, pero su otra mano me sujetaba de la cintura. ¿A qué está jugando?

-¿Q-qué haces?

Solo me miró a los ojos, se acercaba y bajó su mirada a mis labios. Me dejé llevar.

-Solo me acerco... para besarte.

Nuestros labios estaban pegados. Me besaba con fuerza y ,sin pensarlo, le respondí.

-Jóvenes. Ya llegamos, voy a abrir a puerta –. Nos separamos con torpeza.
-Voy a enviarte un mensaje. Para que estés atenta. Adiós, Roth.
-Adiós, Matt...

Antes de bajarme, vi como se lamía sus labios. No pude evitar hacer lo mismo. ¿En qué me metí?

Subastada? INITIUM [Visión Roth Montalva] I **CORRIGIENDO**Donde viven las historias. Descúbrelo ahora