RE: Capítulo 11

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Reedición del capítulo 11 publicado el 9 de julio del 2022 a las 20.30 aprox.

Ya era agosto, comienzos del segundo semestre en el Instituto del terror que han dado lugar a nuevos cortes en los brazos de Roth que no fueron hechos por la chica rubia, sino que por propia voluntad. Lamentablemente, la joven había iniciado en el cutting eligiendo el dolor físico en lugar del psicológico; ella sabía que no era lo correcto, pero no conocía otra manera de sobrellevarlo y se frustraba por ello.

Lo peor es que ya no era solo acoso por parte de las cuatro, sino que Ámbar se encargó de hacer que todo el establecimiento supiera que Roth Montalva era la pelota que podía ser empujada por los pasillos.

-Te quiero, amor –le dijo su madre.

-Y yo a ti, mamá.

El auto se fue y Roth supo que su momento de alivio se había esfumado... y los demás también lo vieron. Entró cabizbaja escuchando las risas burlescas por su aspecto delgaducho y triste que caminaba sin ganas hacia el terrible pasillo. Uno la tomó de su mochila y la empujó seguido de otro y otro hasta hacerla caer, y eso era lo peor, porque las pelotas se patean. Roth debía levantarse como pudiera para por lo menos ser solo empujada hasta llegar a su aula donde podía descansar.

-Hola, Roth –dijo la piedra preciosa del colegio -. ¿Cómo estuvo tu fin de semana? Yo te extrañé demasiado, idiota.

Las risas de la sala resonaban en las paredes y ventanas; cómo deseaba ver a sus amigos y decirles todo para ver si al menos hablar le ayudaba. También se preguntaba seriamente el motivo por el cual los jóvenes de su edad podían ser tan crueles con sus pares, qué tan rotos estarían por dentro para realizar estas cosas contra alguien que nunca les hizo algo.

Se sentía vacía y hueca; una sensación desagradable interminable que la come por dentro.

La sala de clases era una jaula, pero al estar cualquier profesor, era el único lugar donde ella podría estar a salvo. Sabía que debía ser fuerte, callarse y soportar eran lo único que ella sabía hacer, pero aun así... quería gritarle al mundo que esto era injusto, que Roth Montalva quería defenderse.

Mas su madre no podría soportar que su hija haya hecho algo así; además de convertirse en un estorbo.

La profesora Cecilia estaba sentada en su posición esperando a que fuera momento de iniciar la clase cuando:

-Jóvenes, silencio. Hay un joven en la puerta que busca a alguien –ella se gira al chico -. Entre, por favor.

-Muchas gracias -respondió.

Esa voz, esas pisadas y esa gracia terriblemente ágil solo podía tener un nombre.

Matt Cortez estaba en la sala.

-Qué ojos más profundos y elegantes tienes, ¿no crees que combinarían con esplendidez junto a los míos? -le dijo Ámbar.

-No te conozco, por lo que no tienes ni el mínimo derecho de dirigirte de una forma tan íntima hacia mí -Ámbar palideció -. Y es por esto mismo que yo no buscaría a una mal educada como tú, sino a una chica –mira a Roth a los ojos –mucho más transparente y especial –camina hasta pararse al lado -. Me alegro mucho de poder verte al fin, Roth.

Odió sentir que todos la miraban, incluso la profesora.

-Hola, Matt -respondió con voz muy baja y temblorosa sin siquiera mirarlo a los ojos.

Matt supo que algo andaba terrible.

-¡Qué buena broma! -soltó Ámbar con su voz sarcástica y molesta.

Subastada? INITIUM [Visión Roth Montalva] I **CORRIGIENDO**Donde viven las historias. Descúbrelo ahora