h vs b

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Note: No tenía ni puta idea de que poner de título lmao.

-Sólo necesito a dos personas bien preparadas y una 92 FS o una Walther P99- escucho la voz de Harry rogar- diles que les pagaré el triple- entonces hay un pequeño silencio, abro uno de mis ojos levemente y lo veo en frente de mi, caminando de lado a lado solamente en sus bóxers blancos y su iPhone en su mano junto a su oído. Miro su abdomen bien marcado y sus tatuajes, muerdo mi labio inferior- necesito a los mejores John. Si también pagaré el triple por ella. Eres el mejor, hermano- entonces cuelga. Espero unos segundos y me estiro- hey, amor. Buenos días- susurra, me siento y se acerca a mi y besando mis labios, gracias a Dios mi aliento no huele mal en las mañanas, herencia de mi madre.

-Hey- respondo, decido no preguntar nada sobre la llamada, seguramente eran problemas de su empresa- ¿qué hora es?- pregunto y él mira su reloj.

-Once veintisiete- responde y yo asiento- ¿qué deseas desayunar?- pregunta y yo sonrío.

-¿Puedo tener un batido de mora azul?- pregunto batiendo mis pestañas, él sonríe de lado y asiente. Me coloco en mis rodillas, paso mis brazos por su cuello y me acerco lentamente para besarlo. No había caído en cuenta el hecho de que estoy con ropa interior y una camiseta de Harry- ¿tú me vestiste?- pregunto y el asiente.

-Tú dijiste que no te gusta dormir desnuda- susurra cerca de mis labios, sonrío. Rozo nuestros labios y él introduce su lengua en mi cavidad bucal. Yo le respondo- vale, bajemos por tu batido- yo me separo y doy pequeños aplausos. Salgo de la cama y en cuanto me levanto siento un gran dolor en mis piernas, suelto un gemido del dolor y casi caigo al suelo, pero Harry me detiene antes de caer- ¿qué pasa?- pregunta Harry preocupado, yo sollozo. Mierda, mi parte también duele- oh Dios mío- entonces me toma entre sus brazos- lo siento, me declaro culpable- ríe y yo ruedo los ojos. En cuanto llegamos a la cocina, Harry me coloca en la mesa y saca los ingredientes necesarios para hacer un batido de moras- oh, por cierto. Acabo de ir de compras al centro de la ciudad, la pastilla está en la mesita de noche. Lo siento por no avisarte cuando estábamos ahí, la traeré enseguida- murmura y yo asiento con mis mejillas sonrojadas. Camina rápidamente hacia la habitación y vuelve con una pequeña pastilla en su mano y un vaso de agua. Tomo ambas y las trago. Harry mira cada pequeño movimiento que hago.

-Papi- lo llamo en un susurro.

-Este día llámame Harry, amor- me interrumpe y yo asiento mordiéndome el labio.

-Harry- susurro y después suspiro- ¿a qué horas volveremos a casa?- pregunto y él se encoge en hombros.

-No lo sé, quizás noche, o tarde, quien sabe- responde y yo ruedo los ojos con una sonrisa- tenemos todo el día cubierto, amor. Eso es lo de menos.

-¿Iremos a la playa?- pregunto emocionada. Hace años que no voy a la playa.

-Amor, estamos en la playa- responde y yo ruedo los ojos- pero si hablas de ir al agua, claro.

-Pero no tenemos ropa para nadar- susurro y él sonríe.

-No lo necesitamos, estamos en enero, nadie viene a la playa en estas fechas- responde y yo suelto una pequeña risa.

-¿Acaso quieres que muera de hipotermia?- pregunto y él frunce el ceño.

-Mierda, no había pensado en eso. No habrá ida al agua- dice y yo frunzo el ceño- nos quedaremos aquí haciendo cualquier cosa menos nadar afuera- yo ruedo los ojos.

-Vamos, hay que ir. Por lo menos en ropa interior- pido y él me mira directamente- por fis- él rueda los ojos.

-Está bien- bufa y yo doy pequeños aplausos- pero, usaras un bikini, solamente te compre un par de ropa interior. No quiero que la mojes- dice y yo frunzo el ceño.

dulce tentación» h.s [mature] EDITANDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora