"Intercambiando diferencias"

Capítulo 30. "¿Que sucederá a continuación?

April Tyler.

Estaba terminando de vestirme. Miré el reloj que estaba en la pared, eran las 5:37 de la tarde y no se porque tenía un presentimiento raro, me di vuelta para dirigirme al tocador y poder peinarme, pero un pequeño sonido llamó mi atención, giré rápidamente al ver la puerta de la habitación abrirse, mi corazón por un segundo se había acelerado, pero al ver a Connor entrar me sentí mas relajada, esa tranquilidad desvaneció, al notar su semblante preocupado, se acercó a mí y me miró.

Otro sonido pero aún mas audible que el otro se escuchó en la parte baja de la casa, inconscientemente iba a gritar pero la mano de Connor tapó mi boca, hizo un gesto de sigilo y me miró a los ojos por un momento.

Su mirada bajo hacia mis labios, de inmediato recordé aquel beso en la noche, sus labios suaves y rosados contra los mios,  esos labios los cuales siempre me han encantado, aunque no quiera admitirlo, no sabía que me sucedía últimamente.

Poco a poco su mano fue retirada y se acercó aún más, lo miré a los ojos pero estos seguían clavados en el mismo lugar desde ya hace un momento,  los cuales sin darme cuenta rozaban junto con los mios, pero antes, algo me alarmó, algo que hizo que cayéramos de nuevo en la realidad.

Mi celular vibró y me alejé de inmediato y lo desbloqueé, un mensaje yacía en este, el pánico recorrió todo mi cuerpo, al ver que era un numero desconocido y sobre todo... Privado.

Te estoy observando justo ahora. Que lindos se ven juntos, lastima que eso no durará mucho. Ten cuidado April, te tengo en la mira.

M.

El mensaje me congeló, miré a Connor quien me tomó de las manos y agarró mi celular, leyó el contenido y me tomó fuertemente de las manos y antes de salir me miró preocupado.

—Por nada del mundo te sueltes, ¿Ok? —me observó autoritario.

—¿Que... Que haremos? —tartamudeo, estaba muy nerviosa, tenía mucho miedo.

—Bajaremos lo más rápido que podamos y subiremos al auto —dijo y antes de poder responderle abrió la puerta y me jaló del brazo y de inmediato supe que tenía que empezar a correr, ambos bajamos las escaleras de dos en dos y al dirigirnos a la puerta, miré a Connor quien sacaba su celular y marcaba un número, de inmediato llamó.

—Papá —dijo de pronto— necesito que revises las cámaras... —de repente todas las luces y los electrodomésticos se apagaron, ya estaba oscureciendo— Olvidalo, nos vemos en un rato en el mismo sitio de siempre —colgó.

Salimos de la casa a toda prisa, nos subimos al camaro y nos pusimos en marcha, otro mensaje llegó.

¿Que creías?, ¿Que saldrias con la tuya?, no podrás ver nada en las cámaras, tengo a alguien que se hizo cargo de eso, porqué fui más listo que ustedes.