Me despierto para un nuevo día. Puta la alarma que me despierta, desearía seguir durmiendo, pero mis padres no me dejan faltar a clases y siempre se enteran, no se como pero lo hacen.
Después de ducharme, buscó ropa para ponerme hoy, elegí un vestido rosa con una pequeñas flores y unas sandalias. En mi cabello hago una trenza en cascada y lo dejo liso.
Al salir de nuevo está Jay esperándome. No se cuando me darán mi auto.
--Hola.-- me dice cuando llego a su lado.
--Hola.-- le digo con una sonrisa. Al subir a su auto le voy preguntando sobre lo que estudiamos ayer y acertó en todas. Soy una gran maestra.
llegamos al colegio y todos vuelven a posar su mirada en nosotros. Él pasa una mano por mi cintura y yo me asombro.
--¿Qué haces?.--le digo en español.
--Nada, es solo un acto demostrativo.-- me dice mientras me guiña un ojo.
--No tienes que seguir fingiendo, puede que la chica de ayer diga que en realidad no somos novios.-- aún estamos hablando en español así nadie sabe de qué hablamos.
--No lo creo, por que ella seguirá con la insistencia que somos novio, además quiero que me dejen de seguir esas chicas.-- dice mirando hacia unas chicas que me fulminante con la mirada. Esto es incómodo.--Además por nuestro trato me tienes que ayudar en lo que te pida.-- yo suspiro resignada.-- Y justo ahora me tienes que dar un beso.--yo abro los ojos como platos y lo miro asustada.
--Ay, Jay no mames.-- le digo en tono mexicano.
--Sólo hazlo y ya.-- casi medio grita. Yo resoplo y me pongo en puntillas pero solo le llego al mentón.
--Jay baja un poco que estas muy alto.-- le digo él sonríe y baja la cabeza hasta mi altura. Lo beso como lo pidió, pero ahí mismo me aleje.
--Eso no es justo.--
--Claro si, dijiste sólo uno.-- río triunfante.
--De esta no te salvas, pero por ahora no por que estamos llegando tarde.-- Yo abro los ojos como platos. Me fui sin despedir y corriendo. Llegue al salón de Matemáticas.
--Lo siento maestra no mire el tiempo.-- le digo muy rápido y con la respiración agitada.
Ella me mira con diversión, ¿Qué le causa gracia?.--Tranquila señorita Harris, solo paso un minuto desde que tocaron la campana.-- maldito Jay.
--Estúpido Jay.-- digo en francés.
--¿Que dijo señorita?.--
--Nada.-- niego rápidamente en eso entra Jay, ¿Que a este tonto le toca todas las clases conmigo?.--¿Que tienes todas las clases conmigo?.-- pregunto un poco irritada.
--No son casi todas menos tres.--
--Ojalá te viole una jirafa.-- murmuró.
--Valerie ¿donde quedó nuestro cariño?.-- pregunta divertido.
--Ridículo.-- murmuró.
Después de que acaben las clases me dirijo a mi casa sola, no quiero ir con Jay siempre, salí lo más rápido que pude del instituto para que no me viera y me obligará a entrar en su auto.
Cuando termine de comer me fui a dormir un rato, hoy tuve gimnasia y estoy muerta.
Me despierto por el timbre que suena como loco, ¿Quien será?. Me levanto a modo zombie.
--¿Donde estabas?.-- habla Jay cuando abrí la puerta.
--En ningún lado.--
--No mientas.-- él tiene el ceño muy fruncido, como si en realidad le molestará.