siete

2.2K 176 44
                                    

-Lo sabía. –Digo después de un largo silencio.

-¿Por qué?

-Ningún heterosexual hubiera dejado que le hiciera eso que te hice en la mañana...bueno, ayer.

Suelta una pequeña carcajada. -¿Entonces no eres hetero?

-No.

-¿Gay?

-No.

-¿Pan sexual?

-Tampoco. –Ruedo los ojos.

-Bisexual.

-Por fin adivinaste.

-No pareces uno.

-No lo demuestro mucho. Menos cuando estoy con mi familia.

-¿Ninguno de ellos sabe?

-No, solo mis amigos. -¿Alguien de tu familia sabe?

-Sí. –Murmura.

-¿Y alguna vez has tenido novio?

-Sí. –Sonríe.

-¿Todavía siguen juntos? –Digo un poco sorprendido.

-No. –Suelta una carcajada.

-Ah. –Me relajo.

-¿Y tú?

-¿Ah?

-Si alguna vez has tenido novio.

-No, solo algunas salidas, pero nunca novio.

-Es raro imaginarte siendo novio de algún chico.

-¿Lo estás imaginando?

-Eso intento, pero como dije, es raro.

-¿Por qué? –Río.

-Porque pareces más de esos chicos...mujeriegos.

-¡Hey! Eso dolió.

-¿Entonces no eres de esos chicos?

-No, no me gusta jugar con las mujeres, es algo horrible.

-¿Y desde cuando eres bisexual?

-Desde...no sé, creo que desde siempre, todos nacemos bisexuales.

-Pues yo creo que nací gay.

-¿Por qué?

-Nunca las chicas me llamaron la atención; siempre eran los chicos.

-¿Alguien de tu familia notaba eso?

-Mi hermana comenzó a notarlo.

-Adivino: Ella fue la primera que lo supo.

-Sí. –Sonríe. –Me apoyó bastante.

-Al parecer se llevan bastante bien.

-Sí, es como mi mejor amiga.

-Siempre quise tener una hermana, o un hermano gemelo, como un mejor amigo al que podía ver todos los días y le podía decir todos mis secretos.

-Bueno, yo soy prácticamente tu hermanastro.

-Pero a ti no te puedo decir todos mis secretos, apenas te conozco.

-Entonces podemos ser amigos, si quieres.

-Ser amigo de la novia de mi padre...no parece buena idea, pero acepto.

-¿Por qué mi mamá te cae tan mal?

-Es más por naturaleza. Ya sabes; odiar a la novia de tu padre que conoce después de separarse de tu madre.

-Lo entiendo, supongo, tu padre igual me cae un poco mal.

-¿Enserio?

-Sí, supongo que por naturaleza. –Se encoje de hombros.

Río.

Nos quedamos un rato mirando las estrellas y sin darme cuenta me quedo dormido.

[...]

Cuando despierto estoy en la cama, ¿acaso todo fue un sueño?

Me doy vuelta y Louis no está en su cama. Me paro y camino hacia la terraza del techo para ver si está ahí. Cuando subo ahí está, arreglando las sillas.

-Buenos días. –Le digo.

-Buenos días. –Responde.

-¿Cómo es que desperté en la cama?

-Te tuve que cargar.

-¿A mí?

-No, a tu padre. –Dice con sarcasmo. –Claro que a ti, idiota. –Sonríe.

-¿Por qué?

-Mira; mi mamá cree que me estoy tomando las pastillas y que estoy mejorando. Por favor no le quites esa pequeña felicidad.

-¿Por qué no le dices la verdad?

-Porque después del divorcio quedó muy devastada, fue mucho para ella; mi insomnio, el divorcio, los problemas de Jade, la pelea por la custodia.

-¿Problemas de Jade?

-Ese es otro tema del que no quiero hablar.

-Pero ustedes se quedaron con Ashley.

-No, todavía sigue en juicio, en cualquier momento nos podrían decir que nos debemos ir con mi...padre a Los Ángeles.

-¿Los Ángeles?

-Sí, se cambió allá.

-Oh. –No sabía que fuera tan delicado.

-Por favor prométeme que no le dirás nada.

Silencio.

-Por favor. –Me miró con cara de súplica, fue tanto que me dio pena.

-Está bien. –Rodé los ojos. –Pero no por eso seré más amable con ustedes, además tú también me tienes que prometer algo.

-¿Qué cosa?

-Cada vez que no pueda dormir solo dime y me quedaré contigo, así no estarás tan aburrido o solo.

-Pero te tendrás que quedar prácticamente toda la noche despierto, no podrás estar así.

-Lo haré.

-Harry... -Dice doblando la cabeza.

-Louis... -Repito su acción.

-Está bien.

-¿Promesa? –Le estiro el dedo meñique.

-Promesa. –Responde y dobla su dedo meñique con el mío en señal de promesa.

Le sonrío y lo ayudo a doblar las sillas y llevar los cojines hacia la habitación.


Hermanastro ; Larry Stylinson Where stories live. Discover now