Hermanastro ; Larry Stylinson

cuarentaiocho

-Hazme el amor. –Digo un poco tímido. Louis no reacciona al principio y parpadea un par de veces antes de contestar. –Pero si no quieres no te obligaré a nada. –Sigue sin decir algo.-Solo olvídalo, fue algo estúpido, será mejor que me vaya. –Me paro pero antes de salir de su habitación, Louis me toma de la cintura.

-No, no fue algo estúpido, es solo que... ¿estás seguro de que quieres que lo haga?

-Después de que te vayas no te volveré a ver nunca más, así que lo mejor es que lo haga con la persona que ame y no con cualquier desconocido, ¿no lo crees? –Digo con una sonrisa triste, de nuevo sacando el tema. ''Debes superarlo, no hay nada que puedas hacer'' –Me digo a mí mismo en mi interior.

-Entonces será algo que nunca olvidarás. –Dice y me da un beso en el cuello.

Me sonrojo rápidamente cuando Louis baja su mano hacia mis pantalones.

-¿Lo...-¿Lo haremos aquí?

-No, solo estamos empezando, tú solo sigue en esa posición. -Me quedo un poco rígido al ver que sus manos desabrochan mis pantalones, los baja y comienza a tocar mi pene por encima de los bóxeres blancos. Un gemido inconsciente sale de mí y me tapo la boca. –Grita todo lo que quieras, no hay nadie en casa. –Dice y me saca la mano de mi boca para dirigirla a mi entrepierna.

Desde ahí, todo es placer. Con su mano desocupada saca mi bóxer, liberando mi erección creciente y toca mis testículos. Mientras que con su otra mano que tiene sujetada la mía comienza a masturbarme.

Mis gemidos son cada vez más fuertes y no puedo pararlos. Aprieto los ojos cuando estoy a punto de llegar y puedo escuchar que la puerta de la entrada se abre.

-¡Louis! ¡Yo y Jade llegamos!, ¿estás en casa? –Es una voz femenina, la de Ashley.

-Lo-Louis...-Digo apenas, no puedo hablar bien mientras tiene su mano moviéndose ahí.

-No te preocupes. –Dice y sus movimientos son más rápidos, para ayudarlo, yo también comienzo a mover mi mano rápidamente. Después de unos segundos comienzo a venirme...en su puerta. Oh por Dios, que vergüenza.

Seguimos en esa posición por un rato mientras recupero energía, en ese momento la puerta se abre y al otro lado está Jade.

Nos mira asombrados y totalmente colorada mientras se tapa la boca.

Louis coloca su mano en la punta de mi pene para seguramente no manchar más, muerdo mi labio para no gemir tan alto ya que seguramente Ashley está subiendo las escaleras, pero no aguanto y un pequeño gemido se sale de mi boca. Justo cuando Ashley llega al segundo piso.

-¿Louis? –Pregunta con voz preocupada y el mencionado comienza a gemir...de dolor.

-Ahh. Me duele. –Finge que se golpeó y Jade apunta hacia el baño. Corro y me escondo en él.

-¿Estás bien? ¿Qué te pasó?

Cierro la puerta, no completamente para ver qué es lo que pasa y Louis se tira al piso, tocando su entrepierna. En ese momento Ashley entra.

-Oh mi vida, ¿qué te pasó?

-Estaba durmiendo, me caí de la cama y me golpeé.

-¿Te duele mucho?

-No, ya se pasará, por mientras seguiré durmiendo.

-¿Seguro de que no pasó nada?

-Estoy seguro, mamá, solo quiero seguir durmiendo.