Mamá ya se había ido al trabajo, la casa estaba vacía así que tomé las llaves y salí al instituto. Caminando. Mi móvil comenzó a sonar, lo saqué de la mochila y leí el mensaje de Katherine, diciéndome que quería hablar conmigo. Lo guardé nuevamente y seguí con mi camino.
Llegué al instituto justo a tiempo, iba casi corriendo a clase de anatomía; aún que no estaba muy segura de asistir. Llegué al aula y ya todos estaban en sus asientos. El profesor me miró fijamente.
— Buen día profesor ¿puedo pasar? — pregunté.
Todos me voltearon a ver y se sorprendieron al verme. El profesor me dejó entrar a la clase y de inmediato localicé un lugar disponible, por desgracia Christopher estaba sentado en el asiento de al lado.
— necesitamos hablar — me susurró después de cinco minutos
Lo miré. Sus ojos mostraban melancolía por primera vez. Tenía que ser fuerte a esa tentación, regresé mi mente a lo que me dijo en la fiesta. Me creía una chica estúpida, idiota, patética y cursi. No le contesté y miré al frente para prestar atención a la explicación del profesor.
— necesito hablar contigo — volvió a susurrar.
— ¿De qué quieres hablar conmigo? ¿vas a decirme que hay chicas mejores, a burlarte de mí y ofenderme? — contesté con el mismo tono, sin mirarlo si quiera
— sólo necesito que me entiendas Evelyn...
— No —añadí — me insultas y luego vienes a mi como sin nada... Jódete
— necesito que me escuches y no voy a aceptar otro "No" de tu parte
¿Que? Lo miré seria. Abrí la boca para contestar, pero una tercera voz me interrumpió.
— señorita Adams, señor Gibson pueden seguir hablando en detención — dijo el profesor — la charla debe ser bastante interesante, pero este no es el lugar
«No puedo ir a detención» fue lo primero que pensé. Eso dañaría mi historial académico
— profesor, está todo bien, prestaré atención — dije nerviosa.
A este punto el profesor estaba frente a ambos, cruzado de brazos, mostrando la autoridad correspondiente.
— iré yo en su lugar, fue mi culpa — añadió Christopher — yo la distraje
— dije que ambos irán a detención — contestó el profesor serio y con un tono más fuerte de lo normal.
Me levanté, tomé mis cosas, ignorando las miradas de mis compañeros y salí hacia la sala de detención.
Esto era sumamente vergonzoso y decepcionante.
La sala de detención no era más que un aula con suficientes sillas y semi vacía en cuanto a decoraciones escolares, las ventanas estaban ocultas por cortinas grises y una pizarra verde, de las que se tenían que utilizar tizas blancas. Lo único moderno ahí eran esas horripilantes cámaras.
Entré y no había nadie, estaba vacía. Tomé asiento en un lugar al azar, no era que importara mucho a estas alturas. En la pizarra estaba escrita una plana de "no debo arrojarle un condón usado a mi compañero"
La puerta se abrió y entró Christopher.
Me crucé de brazos y desvié la mirada. Estaba tan molesta ahora...
— no era mi intención meterte en problemas. Lo siento
Me levanté, no quería estar cerca de él, dejé mis cosas en la silla y me coloqué al lado de la puerta. Se acercó a mí y no hice más que poner los ojos en blanco.
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Simplemente Mi Chico Malo
RomanceEvy es una chica tranquila, vive atrapada en su propio mundo. Prefiere quedarse en casa viendo una película, que salir de fiesta un viernes por la noche. Sin embargo todo su mundo se pone patas arriba cuando conoce a Christopher, un chico guapo, se...