Simplemente Mi Chico Malo

▪ Capítulo 22 ▪

Me cambié de ropa rápidamente y escuché el sonido de mi móvil. Lo tomé y miré el mensaje de Kate.

Evy, disculpa por lo de Christopher....

Suspiré Y lo guardé en mi bolso. Bajé las escaleras y encontré a Christopher sentado en el sofá, con los codos apoyados en sus piernas y sus manos juntas cerca de sus labios. Cuando escuchó mis pasos alzó la mirada.

— creo que ya no está lloviendo — dije y miré por la ventana. - además. necesito un poco de aire fresco...

Christopher se levantó y asintió.

«Brillante. eres una verdadera estúpida Evy» pensé

Vamos en marcha ¿a dónde? No tengo ni la menor idea, no quiero preguntarle. No pensaba abrazarme de él, así que me sujeté de la motocicleta o al menos de una pequeña parte donde mis dedos podían aferrarse.

A parte el mismo lo dijo «compañeros» no amigos así que eso seré hoy su compañera.

Christopher aparcó en un pequeño lugar con un letrero en la ventana con luces que alumbraba "cerveza caliente" y había más motocicletas que autos.

Me bajé antes que él

— ¿Qué hacemos aquí? — pregunté en un tono frío.

El empezó a caminar, y no tuve más remedio que seguirlo e intentar llevarle el paso.

Entramos al lugar y por primera vez nadie se dio cuenta de eso. Al parecer era un restaurante, había unas cuantas mesas, un bar, que estaba más lleno que las mesas, con una luz tenue que hacían que el lugar pareciese tenebroso y misterioso de alguna forma

Escogió una mesa junto a la ventana y tomó asiento. Moví la silla provocando un ruido ensordecedor, así que lo hice rápido y me senté lo antes posible. Coloqué una parte de mi cabello detrás de mi oreja y observé por la ventana.

— hola bombón — dijo una voz femenina y volteé. La chica que estaba junto a Christopher tenía puesto un traje por arriba de la rodilla, ajustado y medias negras con diseño. Sonrió al ver a Christopher —¿Qué vas a ordenar? — preguntó con voz sexy y empezó a mover sus pestañas falsas de arriba a abajo.

Christopher volteó hacia el bar y empezó a leer el menú que estaba al fondo.

— el especial de hoy — contestó, luego fijó la mirada en mí, esperando a que yo dijera algo. La chica se volvió y frunció el ceño al verme.

— solo quiero una coca cola por favor — dije. La chica lo escribió en su libreta, tomó el menú y se retiró sin más.

— ¿Qué tienes? — me preguntó Christopher. Colocó sus codos en la mesa y me miró. No le respondí, porque ni si quiera sabía que responder — ¿sigues molesta por que entré a tu casa?

— ¿siempre entras a las casas de las personas así? — dije algo irritada

— sólo a la de Mason... Bueno ...a veces, no siempre — dijo tranquilamente.

— no puedes hacer eso, es...contra la ley

Sonrío. Al parecer no lo estaba tomando enserio.

— Evelyn, no entre a tu casa como tu piensas, tú hermana me dejó entrar o ¿acaso crees que tengo cara de pandillero? — arqueó las cejas.

Lo miré detenidamente. Con las cejas arqueadas se veía jodidamente bien. ¿Hay algo con lo que no se viera bien?

— aunque... Para mí es prácticamente lo mismo...

Rio y negó con la cabeza.

La chica se acercó a la mesa y dejó nuestros pedidos, después de darle un repaso a Christopher con la mirada, se retiró.