Llegué a la casa de playa temprano. Mason y Katherine seguían en la fiesta al igual que Brooklyn. Traté de dormir, ignorando mis pensamientos y recuerdos que tenía sobre Christopher. Unas horas después escuché un ruido fuerte, me levanté rápidamente y me dirigí hacia esa dirección.
Nadie podía entrar, excepto los que estábamos durmiendo aquí, éramos los únicos que teníamos llave. Cuando llegué a la sala de estar encontré a Christopher tirado en el suelo.
— ¡Christopher!
me acerqué a él para ver si estaba bien.
— ya...ya... — contestó
Estaba ebrio
— pensé que no bebías ¿o me engañaste? — dije mientras intentaba levantarlo y llevarlo a su habitación.
— eso es cierto, no bebo — sonrió — perdón bebía — Trató de caminar, pero el equilibro no lo ayudaba, así que fui su soporte para que no se rompiera el cuello.
— ¿Cuál es tu habitación? — pregunté y luego caí en la cuenta de que estaba ebrio y no se acordaba si quiera lo que comió hoy.
Lo llevé a mi habitación y lo recosté con algo de dificultad sobre la cama.
— ¿te gusta Daniel? — me preguntó haciéndome fruncir el ceño.
Lo miré confundida
— no, no me gusta
El olor a alcohol y cigarrillos estaba impregnando la habitación.
— a él si le gustas — dijo y me giré hacía él — lo sé, pude darme cuenta
Christopher era gracioso en este estado. Me dirigí nuevamente hacia puerta y enseguida escuché su voz.
— ¿a dónde vas?
— voy a buscar algo para que...
— ¿te vas a ir con Daniel? — me interrumpió
¿Que? Esto era... El Christopher que veía botado sobre la cama era más sensible y vulnerable, no como el sobrio Christopher frio y dominante.
— no voy a ir con nadie... solo no voy a tardar ¿vale?
Salí de la habitación y bajé hacia la cocina para preparar algo de café. Cuando llegue a la habitación nuevamente, ahora con una taza de café en las manos note que Christopher seguía acostado en la cama
— No voy a beber nada.... — añadió a regañadientes
suspire dejando la taza de café sobre la mesita de noche.
— como quieras... de todas formas la dejare aquí
Podía sentir su mirada sobre mí.
— te pareces a ella
— ¿a quién?
Tomé asiento en la cama a una distancia decente de él.
— a Wendy.... ella es buena bailando
Me quedé pensando por unos segundos y recordé a la chica con la que estaba bailando en la fiesta.
— oh... ella...
Sonrió mientras me miraba detenidamente.
— pero tú eres más bonita — fue imposible no ruborizarme — y tus mejillas.... eso es adorable...
Trate de apartar la mirada de él, no quería ruborizarme más.
— entonces ¿Por qué decidiste beber? — volví a tocar el tema
suspiro
— tenía un problema — dijo con toda seguridad como si estuviera en sus cinco sentidos — ¿te cuento un secreto? — añadió y me hizo señas para que me acercara
Le hice caso y me acerqué
— estoy ebrio — contestó divertido.
Rodé los ojos y moví la cabeza en desaprobación, pero con una sonrisa.
— apuesto a que si — dije para mí misma.
Después de escuchar a Christopher decir cosas incoherentes por un rato, mis ojos empezaron a cerrarse. Tal vez me iba a dormir a su habitación o a la de las chicas, lo entenderían, o al menos eso esperaba
Me levanté lentamente de la cama, al parecer Christopher ya se estaba quedando dormido. Me acerqué sigilosamente a la puerta.
— quédate — me dijo con voz ronca
— tengo sueño Christopher, quiero dormir...
Se movió dejando un espacio a su lado en la cama.
— puedes dormir aquí — ¿compartir la misma cama? — no muerdo...
Después de pensarlo por un rato me acosté a su lado. Se giró para darme la espalda, y yo hice lo mismo. Mis ojos se cerraron mientras pensaba en todo lo que había pasado a lo que se resume que.... me dormí pensando en él.
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Simplemente Mi Chico Malo
RomanceEvy es una chica tranquila, vive atrapada en su propio mundo. Prefiere quedarse en casa viendo una película, que salir de fiesta un viernes por la noche. Sin embargo todo su mundo se pone patas arriba cuando conoce a Christopher, un chico guapo, se...