La princesa de Auradon [Descendientes/Carlos De vil] LPDA1

Capítulo 71"Dos semanas intensas"

Cinco chicas esperaban con ansias detrás de la puerta de la habitación de dos hijas de villanas, cuando escucharon y vieron cómo se abría la puerta de poco a poco e intercambiaron miradas.

Evie habia cruzado la puerta, y todas las presentes se levantaron en cuanto vieron a su amiga de cabello azul entrar a la habitación.

—Oh, hola chicas. —dijo Evie con una sonrisa.

—¿¡Cómo te fue!? —preguntaron rápidamente Jane y Lonnie e hicieron que Evie retrocediera.

—Chicas —dijo Audrey— Dejen que llegue la pobre, obviamente nos va a contar y por eso estamos aquí.

—Tengo que admitirlo... Pero Audrey tiene razón —dijo Mal.

—¡Gracias Mal! —dijo Audrey llevándose una mano al pecho y mirando a la pelimorada.

—Como sea... —dijo Lonnie— Evie tiene que contarnos.

La peliazul sonrió.

—Lo haré, lo haré...

Y ahí estaba Evie contándoles a sus amigas cómo había ido su cita con Doug, cómo salieron al cine y luego a caminar a la plaza. Y entonces Doug le pidió ser su novia y ella aceptó gustosa antes de inclinarse y darle un beso.

Las chicas empezaron a decir cosas cómo "Awww" o "que lindo" a lo que hija de la reina malvada les contaban, pero Evie sólo se limitaba a ver a la castaña y recordaba lo que había pasado con Carlos, no por eso iba a dejar de ser amiga de Astrid, pero quería que las cosas se arreglasen entre los dos.

Ella debía hacer algo por él.

—Astrid... —la llamó Evie— Nosotras podemos hablar.

—Claro Evie... —dijo Astrid en respuesta.

Ambas chicas se despidieron e Evie y Astrid salieron rápidamente de la habitación.

—Oye Astrid... A lo mejor no vas a querer hablar de esto —dijo rápidamente la peliazul— Pero opino que no deberías ir al baile con Gabe.

—¿Por qué no? —preguntó Astrid extrañada.

—Bueno empezando porque es un egoísta, manipulador, y egocéntrico —dijo Evie, ella todavía recordaba cuándo era así, pero había escogido el bien y planeaba seguir así—. Y luego por Carlos, créeme que él la está pasando muy mal, me preocupa, lo quiero cómo un hermano y todo lo que quiero es que esté bien.

Pero Astrid no respondió. Evie la miró detenidamente a ver sí ella respondía con algo,  sin embargo unos según dos después vio cómo Astrid sonreía levemente.

Lo que la extrañó.

—Evie... —dijo Astrid— No puedo creer que con el tiempo que nos conocemos no te hayas dado cuenta todavía.

La peliazul frunció extrañada.

—¿Qué? —preguntó.

***

—¿Escuchas la voz de tu madre, otra vez? —preguntó Holly mirando como su amigo peliblanco salía del agua rápidamente.

—Sí... Y cada vez es más fuerte... No sé cómo pararlo —dijo Urell.

Holly le pasó una toalla y éste se secó rápidamente.

—¿No le vas a decir a tu novia? —preguntó la chica de mechón rojo.

—No y... Por enésima vez, Holly... Melody no es mi novia —dijo Urell.

—Todavía... —se burló la chica.