La princesa de Auradon [Descendientes/Carlos De vil] LPDA1

Capítulo 67."Búsqueda".

—Repiteme exactamente que es lo que tengo que buscar —dijo Harriet al otro lado de la línea.

—Ya te lo dije —respondió Gabe en un susurro—. Necesito que busques un libro.

—¿¡Un libro!? —preguntó la chica— ¿Me hiciste venir a la habitación de Mal e Evie en Auradon Prep por un libro?, ¿Y para que quieres un libro si ni te gustan, Gabe?

—No es cualquier libro, pedazo de... —Gabe soltó un suspiro— Es el libro de hechizos de Mal.

—El libro de Mal... —Gabe escuchó una risita por parte de Harriet— Ahora sí que hablas mi idioma. ¿Y para qué quieres el libro de hechizos de Mal si ninguno de nosotros hace magia?

—No quiero un hechizo cualquiera, Harriet. Quiero un hechizo de amor.-dijo Gabe.

Harriet no respondió.

—Hook... ¿Estás ahí? —preguntó el pelinegro.

—Estoy en eso. —dijo Harriet luego de unos segundos.

Gabe no evitó sacar una sonrisa ante eso. Estaba a punto de empezar el plan definitivo, para asegurarse de que Astrid estuviera con él. Y eso tenía que agradecérselo a Mal y a los chicos.

Había escuchado una conversación entre todo ese grupo y el rubio, y escuchó como este le preguntaba a Ben acerca de cómo había terminado siendo novio de Mal y éste le había respondido que al principio ella le había gustado y así mismo con ella sin embargo como él había estado con Audrey, ella pensó que no pasaría nada y lo hechizó para que se enamorara de ella. Sin embargo, él se había enamorado de verdad de ella al final de todo.

Entoces fue cuando a Gabe se le ocurrió el plan definitivo.

Los chicos no se habían dado cuenta de que él había escuchado todo, lo que dijo Ben era muy cursi, sin embargo eso fue muy útil para el chico.

Gabe colgó satisfecho.

Gracias a Mal y sus amigos tengo la clave para lograr mi objetivo. Pensó con la sonrisa más grande que su rostro podía dar.

***

Harriet miró a su alrededor, esa habitación era igual de rosa que la suya con Holly, la pelinegra reprimió las ganas de hacer una mueca de asco ante la visión, y le suman el fuerte olor a perfume, supuso que esa debió ser Evie. La chica pensó en Holly y como ella había decidido cambiarse al grupo de Evie, se sintió traicionada al principio pensando en que Holly se había dejado convencer fácil por esos chicos de Auradon y los traidores, pero de pronto empezó a sentirse extraña.

Holly hablaba con ella para arreglar las cosas y convencerla de que esos chicos no eran tan malos pero simplemente ella la ignoraba. Sin embargo ese sentimiento extraño no se iba.

Se preguntaba sí sería culpa.

Harriet negó. No, ella era una pirata, su destino era seguir con el legado de su padre. Ella no tenía tiempo para sentir culpa.

Entonces volvió a sí y recordó que era lo que estaba haciendo en aquella habitación.

—¿Si yo fuera Mal dónde escondería el libro de encantamientos de Maléfica? —dijo Harriet.

La chica empezó a buscar en todas partes sin hacer tanto desorden, ella sabía que los piratas eran desordenados y desastrosos. Pero ella no soportaba el desorden. Había aprendido a vivir con una tripulación en el antiguo Jolly Roger y sabía los sucios que los piratas eran, pero tal vez, sería la única cosa pirata que no aceptaba.