Honda DN-01

Capítulo 5. Algo que me pertenecía

- Concéntrate en buscar lo que es tuyo. - habló SunHi del otro lado del teléfono.

- Sí, sí, ya voy. - Miré hacia todos lados, buscando un indicio de mi Holy. Recorriendo a paso lento todo el taller. - Sólo hay autos aquí y...herramientas. ¿Dónde está? - ¿Y si no estaba allí? ¿Y ya la había vendido?

- HaNi, el otro cuarto. Se ven muchas motocicletas.

- Una puerta ¿dónde, Tony? - comencé a correr en dirección opuesta a la que iba.

- Al fondo a la izquierda. Espera, hay alguien trabajando ahí. - Comencé a abrir la puerta tratando de hacer el menor ruido posible. - Ten cuidado. - Me escondí detrás de una de las diez motos que estaban allí. Levanté un poco la vista y, evidentemente, ahí estaba uno de los secuaces del video que habían ayudado a robar a Holy, estaba en cunclillas ajustando una de las ruedas de una moto. Silenciosamente, cogí una llave 20 que estaba en el suelo y me acerqué por detrás del tipo. - ¿HaNi? - ¡Pum! Golpe en la nuca. El sujeto cayó al suelo en el mismo instante.

- Dime. - no solté la llave, podría servirme.

- Nada, nada. Iba a decirte que no lo golpearas, pero...bueno. - sólo reí. - ¡Tu moto! HaNi, al final.

- ¿Qué? - miré hacia el final de la gran habitación y ahí estaba. Casi completamente tapada con un manto blanco. - Ahí está. - susurré.

- ¡HaNi detrás de ti! - solté el teléfono y la llave cuando sentí unos brazos rodearme el cuello con fuerza.

- Ahí está qué, princesa. - otro de los ladrones. Salté aún con los brazos del tipo rodeándome, y en el aire puse mis pies por detrás de sus rodillas con fuerza, haciendo que callera al suelo arrodillado y yo de pie. Me soltó y recordando las tácticas de defensa personal de mi padre y de mi hermanastro, solté uupercut izquierdo (un golpe de boxeo) justo debajo de su mandíbula. El sujeto cayó al suelo de espaldas quejándose y tocándose el lugar del golpe.

- No me llames princesa. - Se puso de pie con dificultad acechándome con la mirada. Tomé la llave del suelo. Con un grito de furia se abalanzó sobre mí. Caímos duramente al suelo, pero con el impulso logré empujarlo hacia el otro lado con mis piernas. Me levanté y no esperé más. - No tengo tiempo de sobra. - Me acerqué a él corriendo y aprovechando que me daba la espalda lo golpeé fuertemente en la nuca con la llave. Cayó inconsciente. Tomé mi teléfono - Uno menos. Ahora, mi moto. - Corrí hacia ella y saqué las llaves de mi bolsillo, rápidamente le di arranqué. - Tony, sácame de aquí.

- Claro, preciosa. - Casi al instante las grandes puertas de metal se abrieron y el auto de Tony se acercaba. Colgué la llamada y mi amigo bajó del auto. - ¿Sigue el plan?

- Sigue el plan. - Bajé de Holy y Tony subió en ella.

- No te demores. - SunHi ocuparía el lugar del piloto en el auto de Tony, mientras él manejaría la moto. Saldrían del recinto y esperarían mi llamada.

Había algo más que hacer.

~ Veinte minutos después ~

Un chico de cabello rubio, alto, moreno y muy apuesto, venía entrando por la gran puerta de su taller, encendiendo las luces y comenzando a adentrarse en el lugar. Pasando por entre medio de los autos tarareando alguna canción. Se dirigió a la sección en donde estaban las motos, dejando su chaqueta en una silla y tomando unos papeles sobre el escritorio, seguramente revisando tarifas...Cosas de ricos. Yo sólo lo observaba detenidamente, en la planta superior del edificio.

El chico se detuvo de pronto, al notar un extraño bulto bajo un manto blanco en medio del lugar. Se dirigió hacia ello y quitó el manto de un tirón.