Capítulo 32 - Extra ♥

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Una tormenta azota en la noche la costa, despierto por los truenos y la lluvia. Todos están durmiendo, incluso Roller quien tiene su silla de ruedas a su lado.

Me levanto y abro la puerta para ir al balcón, la lluvia cae con estrépito y me mojo los calcetines. 

—Pequeño Mike ¿Qué haces aquí? —pego un salto y veo a Jack debajo de un pequeño techo que lo cubre de la lluvia, está fumando uno de esos cigarros azules —ven acá, te estas mojando.

Me cubro junto a él de la lluvia, el cielo esta oscuro, no hay ninguna estrella a la vista, el mar desde lejos parece enojado. Miro los cerros que me indico Bill, también están siendo azotados por la tormenta.

Miro a Jack pero está concentrado mirando el mar.

—Me das de tu cigarro —observo el humo que sale de su boca.

Este me mira y esboza una sonrisa —esto no es para niños.

—Solo quiero probar.

— ¿Qué diría tu hermana si te viera fumar, pequeño Mike? 

—Mi hermana no está aquí, así que nunca lo sabrá —me encojo de hombros.

Jack me mira pensativo y me entrega el cigarro, lo sostengo entre mis dedos imitándolo.

—Exhala el humo, sostén y luego bótalo por la boca.

Meto el cigarro azul a mi boca, exhalo, sostengo y toso haciendo arcadas.

Jack me quieta el cigarro y me da palmadas en la espalda.

—No estás listo aún pequeño Mike.

El sabor que queda en mi boca es asqueroso.

—Tienes razón, aún no estoy listo.

Miro los cerros por última vez antes de entrar al edificio.


Reformatorio Wikilson, 30 de noviembre, en el presente.

Narrado por Colton.

Cuando supe lo de mi hermana Annie, lo primero que hice fue llamar a mis amigos para que molieran a golpes a mi padrastro. Annie había intentado escapar, pero entre el temor y la desesperación salió corriendo a medio vestir hacia la avenida principal y un auto la atropello, estuvo en coma una semana.

Ese es el sueño que me atormenta todas las noches, el mismo sueño desde que sucedió.

Me levanto de la cama, llueve afuera, es típico que en este tiempo haga mas frío.

Miro la nota que me entrego Cassey, esta echa una bola en una esquina de la habitación. Cuatro palabras escribió, cuatro palabras que cambian todo "La matare". 

Conozco a Cassey lo suficiente, fui yo quien la recogió de las calles, es huérfana y fue abusada cuando pequeña, algo me hizo sentir mal al verla comer del basurero tras un restaurante chino.

Le dije que viniera conmigo y fue así como nunca se despegó de mi lado, sentía la necesidad de protegerla, ella vivió una situación parecida a la de mi hermana Annie.

Al principio Jota se interesó en Cassey, pero ella estaba más preocupada de sobrevivir en las calles, como obtener dinero fácil y comida, era muy ambiciosa, pero no era eso exactamente por lo que no se había interesado en Jota, era porque ella estaba interesada en mí.

Los primeros años me fue imposible mirar a Cassey más que como una amiga, pero después fue creciendo y comenzó a interesarme.

Terminamos besándonos después de una noche de victoria, habíamos robado una pequeña joyería y teníamos más que suficiente como para sobrevivir dos meses. Sus ojos color avellana me llamaron la atención, me emborraché lo suficiente como para perder la noción del tiempo y me acosté con ella. 

Luego de un tiempo comencé a conocer a otras personas, chicas incluidas, en clubes ilegales y varias me gustaron, ¿pero porque buscaba con tanto afán a las mujeres? Me sentía vacío y quería la compañía de alguien, a Cassey eso no le importo o por lo menos eso creí yo, hasta que conocí a Emily. Conocía a casi todas las chicas del pabellón de mujeres, las veía a diario y ya varias se me habían acercado a hablar.

Ninguna me llamaba la atención, no me interesaba nadie, ni siquiera Cassey, ahora ella solo era una más del equipo.

Un rostro nuevo apareció un día, una chica de ojos color café oscuro, estaba sentada con la mirada puesta en su bandeja de comida e hizo un gesto de asco.

Fruncí el ceño ¿Qué chica rechazaría la comida aun cuando fuesen sobras? La mayoría llegan hambrientas, desesperadas y dañadas, en cambio ella parecía demasiado segura de sí misma.

La observe por unos minutos, miraba a las demás, inspeccionándolas, buscando quizás una posible amenaza, algo la hacía parecer totalmente diferente. Las chicas que entran por primera vez al comedor, son tímidas e inseguras, en cambio ella no. 

Me llamo la atención enseguida. ¿Como podía ser que esa chica nueva no tuviese una pizca de miedo en su primer día? ¿Que la hacia ser tan segura para observar todo y parecer una amenaza? Me acerque y me inspecciono cuando me senté en su mesa. Sus ojos eran calculadores, atentos a cualquier movimiento que la hiciera sentir amenazada, parecía como si tuviese todo bajo control, como si nada le asustara, ¿porque? ¿quien era aquella chica y que ocultaba bajo esa seguridad?

Sigo mirando por la ventana de mi habitación.

Ahora que sé que Emily está interesada en Thomas algo cambio. No entiendo que me esta pasando, ¿Por qué diablos me importa tanto lo que hagan ellos dos?

Empuño las manos y le doy un golpe certero a la ventana, esta se rompe en varios pedazos, la mano me queda ensangrentada. ¿Por qué tuvo que aparecer una chica como ella en mi camino? ¡¿Por qué!? ¿Por qué tuve que fijarme en aquella chica segura y arriesgada, a la que ni siquiera le importan los demás? 

—Odio que me hagas desearte Emily.

El aire frío se cuela por la ventana rota. 

—Te voy proteger, si alguien pretende herirte, yo te protegeré, lo haré Emily Wilde.


Nadie escucho, nadie sintió, nadie supo lo que paso aquella noche. Emily recibió una visita inesperada en su habitación. La Doctora Mónica había estado en la ciudad junto con otros médicos evaluando su caso, la bitácora salida de los exámenes realizados a su cerebro habían arrojado que tenía una glándula más grande que las demás y los doctores habían deliberado hacer más exámenes a fin de determinar el factor detonante, uno de esos exámenes fue llamado "electrochoques por medio de agua" con el fin de determinar cómo actuaba su cerebro en situaciones adversas. Esa noche Emily volvió a la sala de electrochoques.


¡FELIZ NAVIDAD! Ya será el 2016 y no puedo creer que todos ustedes hayan estado conmigo en todo este proceso.

Gracias por todo infinitamente, porque, aunque no lo crean yo he llorado con esta historia, reído con sus comentarios y sonreído con sus estrellitas ♥


Mi Telequinesis © [En Edición]Where stories live. Discover now