Capítulo 24

2K 120 32
                                    

Desperté horas después. Siento el cansancio en todo mi cuerpo, como si una máquina moledora me hubiese pasado por encima. En toda la noche no pude olvidarme de los azotes a Jota, del guardia, ni de Colton.

Lilly nos envía al comedor y voy junto a Winnie, quien me ha hecho un montón de preguntas.

Estoy ansiosa y nerviosa, mi cuerpo parece actuar sin mi consentimiento, y tengo la extraña sensación de que algo malo viene por mí y estaba en lo cierto. 

Cuando volvemos a nuestras habitaciones con nuestras caras lánguidas y aburridas, Lilly me detiene.

—Necesito hablar contigo —susurra.

Frunzo el ceño — ¿Por qué estas susurrando?

—No quiero que nadie nos escuche —mira por sobre mi hombro.

— ¿Qué es lo que pasa?

—Algo anda mal Emily. La Doctora esta mañana mandó a llamar a todas las enfermeras, han pedido resguardo para este pabellón, cosa que nunca antes habia pasado. Hoy vendrán guardias a resguardarlas.

— ¿Por qué?

—No lo sé —se encoje de hombros —pero quiero que te mantengas tranquila, yo sé cómo eres y espero que no hagas ninguna escena que exalte a los guardias, porque no solo te pondrás en un peligro tú, si no que a todas las demás chicas.

—¿Desde cuándo que te tomas la molestia en advertirme?

—Desde que me di cuenta que eres como una tormenta, pasas y arrasas con todo —suelta con malicia —no lo tomes personal, pero no quiero poner en riesgo a las demás.

—Si lo que te preocupa es que me encierren de nuevo o haga algún escándalo, despreocúpate que no tengo la intención de armar algún show.

—Bien —dice entre dientes — y si tienes algún problema ven a hablar conmigo.

—Te estas comportando como una amiga Lilly, y créeme que eso es lo que menos quiero de ti.

—Solo mantente al margen, ahora entra a tú habitación —luego de eso se marcha.

¿Resguardo? ¿Guardias? Ya sé que es lo que está ocurriendo. Vendra el alcalde.

En la hora del almuerzo me formo junto a las demás y Winnie se acerca a mi lado tímida y asustada.

— ¿Qué es lo que te pasa? ¿Por qué tienes esa cara?

—Andan tipos vestidos de negro —dice en voz baja —y uno acaba de quedarme mirando.

— ¿Qué? —me doy vuelta, ahí están. Tres tipos vestidos de negro con boinas y armas hablando con Lilly y otras enfermeras. Uno nos está mirando — ¿Qué tiene que te haya mirado?

—No lo se, no me gusto de la forma en que lo hizo. —se abraza los brazos.

—Creo que estas siendo un poco paranoica ¿No crees?

Winnie mira hacia atrás donde se encuentra el guardia y vuelve la cabeza justo cuando este nos vuelve a mirar, yo en cambio lo sigo observando, sus ojos son negros como la noche, debe tener unos veintiuno o veintidós años, le sostengo la mirada todo lo que puedo, hasta que Winnie me pega un codazo.

—No lo mires, nos pueden hacer algo.

—Calma —dejo de observarlo —a mí no me pueden hacer nada.

Recibimos nuestras bandejas de comida, veo que en las esquinas del comer hay guardias apostados, visten de negro, nos están vigilando a todas. 

—No me agrada —dice Winnie mientras nos sentamos en una mesa apartada —ninguno de ellos, me ponen los pelos de punta.

Mi Telequinesis © [En Edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora