Los 6 Elementos ~EDITANDO~ NO LEER HASTA NUEVO AVISO

Capítulo 24 La manipulación

-Chiquilla, no le harías daño a tu propio padre- siseó mi padre haciendo más fuerza con su cuchilla-. Te he observado, tu corazón es muy dulce, al igual que el de tu madre

-No me conoces- sonreí con malicia-, podría degollarte en trocitos y sin pensarlo dos veces

-Alice, nuestra madre está en peligro- dijo Siu poniendo su mano sobre mi hombro

-¿Qué le ocurre a Lily? ¿Está ella bien?- mi padre soltó la cuchilla dejándola en el suelo

¿Cómo pude ser tan estúpida? Mi padre aún amaba a mi madre. Después de tanto tiempo... su amor por ella no había disminuido. Y yo que pensé que mi padre sólo tenía sentimientos para sí mismo. Soy una pésima hija.

-Llévanos con ella, Siu-

Mi hermano asintió y me tomó de la mano, al igual que la de mi padre. Nos llevó al comedor, donde no había absolutamente nadie. O por lo menos eso creía hasta no ver que apenas llegamos, un elfo de la oscuridad había lanzado con violencia a mi madre sobre la mesa del comedor. Salí corriendo a buscarla, a pesar de los gritos furtivos de mi padre y hermano. Ni siquiera el elfo me importaba... pero por favor! Es de mi madre quien estamos hablando, si no fuera por ella, yo no existiría. Formé un escudo a nuestro alrededor como me habían enseñado; sin usar gran cantidad de mi poder. Me dio tiempo para conversar, pero no el suficiente.

-Resiste mamá, te sacaré de aquí- susurré levantándola, comparada con hace unos minutos, mi madre se veía tan frágil y magullada, como una hermosa muñeca de porcelana rota-. Sólo resiste

Geoff se puso en marcha, y comenzó a darle otras órdenes al elfo; terminar con la guerra. Siu miraba con horror la escena. La criatura le miró extrañada, y se negó rotundamente. Corrió fuera de la habitación, con una nueva orden: matar a cualquiera que se oponga. Por suerte no comenzó con mi padre. Aun así, teníamos un nuevo problema.

-Alice, mi amor- mi madre paró de caminar, y me tomó por los hombros, de su nariz salía sangre, y su rostro tenía severos moretones, y pequeñas cortadas, no creía que ella podría sostenerse por sí sola-, siento haberte ocultado todo esto. Tal vez podríamos haber hecho algo mejor. Todo esto es mi culpa-

-No mamá, no es tu culpa, yo...- miré el costado de la mujer, de éste estaba saliendo mucha sangre. Mi madre cayó en el suelo, ella ya no tenía fuerza- ¿Por qué no me dijiste -lágrimas salían- que estabas herida?

-Déjame ir, yo sólo te causo problemas en tu vida- sus palabras se clavaron en mi corazón ¿Cómo podía decir eso? Puse mi chaqueta bajo su cabeza, tomé con una de mis manos la suya, y con la otra hice presión sobre la herida. Si intentaba curarla, podría acabar con mi reserva de energía, y bueno... terminar como Adam

-¡Siu, necesito un escudo!- le grité a mi hermano, este corrió a mi encuentro y formó mi escudo apenas yo bajé el mío- Gracias, bien madre, resiste, estrás bien, lo prometo-

-Siu... oh mi pequeño Siu... te ves tan guapo- mi madre miró con tristeza a su hijo- te... amo

-Yo también te amo... mamá- ella cerró sus ojos dando sus último suspiro, esperen... ¿Siu estaba llorando? ¡Qué ternura!

Me concentré en la herida, no dejaría a mi madre así, filtré la mayoría de mi poder en esta. Mi madre apretó muy fuerte mi madre para advertirme de que ya no dolía. Había logrado curar a mi madre. Logré salvarla. Eso, tenía que embarrárselo en la cara a Jared, y lo haría con mucho orgullo. La abracé, y Siu se unió al abrazo.

-Esto es demasiada ternura para mis ojos... esto chicos? Hay una pelea afuera y ustedes se están abrazando- dijo una vos interrumpiéndonos. Aguanten un poco. Esa voz... esa maravillosa voz que creí no volver escuchar nunca- Sí cariño, he regresado