Capítulo 15- El Camino de las Hadas

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-Vaya vaya- dijo el engendro con desprecio- ya pensaba que no regresaría a este lugar nunca más

Luego de haber cruzado el portal y caer torpemente sobre Cameron, el engendro me había llamado "idiote" y comenzó a caminar por un oscuro y húmedo camino sin siquiera esperar a que nos levantaramos.

-Bien- suspiró el engendro- vamos por acá, si mal no recuerdo este camino nos llevará a las celdas...

-¿Celdas?- gimió la maga- oh Dios, lo siento tanto...

-No comiences- dijo Dimitri entre dientes

-Y a esas celdas ¿A quiénes encarcelan ahí?- preguntó Samuel con curiosidad

La oscuridad era tan densa sin la luz de la antorcha de Lemoin, que si me alejaba probablemente no podría ni siquiera ver mi mano enfrente de mis ojos.

-A quienes capturan- dijo despreocupadamente- aunque ya no capturan a tantos desde hace tiempo

-Espera, tú eres uno de ellos, debes de saber algo sobre sus planes- comentó Carrie

-No, desde que trabajo con ustedes queridos amigos, no me dan más información- dijo forzando una sonrisa, tan desdichada que parecía una mueca- lástima, me encantaban sus fiestas llenas de...

-¡No! No gracias, no quiero saber- exclamó Cameron interrumpiendo al engendro

-Y no somos tus amigos- susurré

-Okay, ahora cállense, hace tiempo que no vengo y tengo que concentrarme para no perderme- dijo Lemoin frunciendo el ceño

No me había puesto a ver en el rocoso camino, no hasta que hubiéramos parado en seco y que estábamos en una parte donde había tres caminos para elegir. Lemoin se notaba decidido cuando caminó por el de la izquierda.

Lamentablemente su decisión había sido errónea, ese camino nos llevaba a un acantilado en el cual su fondo tenía brea caliente, todo el lugar olía a azufre.

-Qué car... rayos- se corrigió Cameron al ver mi mirada de reproche

-Sí, mucho mejor- murmuré entre cerrando los ojos- Lemoin, por favor guíanos a la salida

El tipo me miró con el ceño fruncido, masculló algo ininteligible, se dio la vuelta y caminó por donde habíamos venido. Esta vez fue por la de la derecha, caminamos en silencio por un largo rato hasta que escuché unas extrañas voces, sin darme cuenta le tomé la mano a Bianca que tenía a mi lado

-Tranquila- me susurró al oído

-Aquí es, lo puedo oler- dijo Lemoin aspirando el contaminado aire emocionado

-¿Estás seguro? A mi sinceramente me vuele a que algo se murió- comentó Carrie, el engendro la miró indignado

-¿Carrie?- dijo una voz lamentera, una que reconocía muy bien. Mike.

-¿Mike?- pronunciar su nombre hizo que lágrimas corrieran por mis mejillas- ¿Lemoin dónde están?

El hombre me señaló una celda con barrotes de hierro, me acerqué a ésta y pude ver a mis amigos, desparramados en el suelo, con garrotes en las manos.

-Tenemos que sacarlos de aquí- dije, sorprendida de que mi voz sonara tan fuerte y decidida

-Alice, lo siento tanto... oh, gracias a Dios que están bien- dijo Mike intentando levantarse de donde yacía, al no lograrlo hizo una mueca de dolor y regresó a donde estaba

-¿Mike, Eiden está...?- no pude terminar la pregunta, el chico tenía la cabeza gacha y no podía ver si respiraba con normalidad

-¿Vivo? Sí, sí lo estoy- dijo Eiden moviéndose, solté aire, no me había percatado de que estaba conteniendo la respiración

Los 6 Elementos ~EDITANDO~ NO LEER HASTA NUEVO AVISODonde viven las historias. Descúbrelo ahora