Bajo la piel del vampiro ©

16- Nuevas fuerzas

Isaac despertó pocas horas después y enseguida notó las nuevas fuerzas en cada músculo. Todos sus sentidos estaban mucho más desarrollados de lo que había conseguido con todo su entrenamiento. Se sentía en perfecto estado y en plenas facultades para vencer a cualquier vampiro.

Ádrian observaba la oscuridad de la noche sentado en el alféizar de la ventana, junto a la cama. Isaac palideció al verlo. La expresión del vampiro iba más allá de la tristeza y, al tomar su sangre, el chico había visto y sentido cosas que Ádrian había vivido en persona. Conocía parte de sus miedos, ahora podía entender mejor el dolor que sentía al recordar a August y, por alguna razón que desconocía, aquello le dolía tanto como al vampiro.

Se levantó de la cama y se dirigió hacia la ventana silenciosamente. Dudó un instante antes de abrazarlo.

—No has hecho nada malo. —El vampiro salió de su ensimismamiento y lo miró entre sorprendido y angustiado.

—¿Cómo te encuentras?

—Estoy mejor que nunca. —Levantó la vista y le sonrió—. Ha sido mi decisión, Ádrian.

—No vas a sentirte así siempre, August. —Isaac soltó su abrazo al escuchar ese nombre y dio un paso atrás, desviando la mirada hacia un lado—. Pronto tendrás hambre, ansiarás alimentarte de sangre. Además, tus poderes perderán su efecto cuando eso ocurra.

El vampiro ni siquiera se había dado cuenta de su error al nombrarlo, así que Isaac decidió callar.

—¿Qué quieres decir con que perderán su efecto?

—No eres un vampiro completo, sigues teniendo sangre humana. Las nuevas fuerzas te abandonarán.

—¿Cuándo?

—No lo sé. Eso depende del tiempo que tarde tu sistema inmunológico en rechazar mi sangre. —Volvió a mirar al cielo—. Al ser medio vampiro, tal vez pasen días. Pero también podrían horas.

—¿Tendré que beber tu sangre cada vez que eso ocurra?

—Mejor eso que matar a un humano. Cuando te dé sed, no serás capaz de detenerte.

—¿Y no hay una forma de vivir como tú?

—¿A qué te refieres? —El vampiro lo miró.

—Tú no tomas sangre humana y no pierdes tus fuerzas.

—Yo soy un vampiro completo, por mis venas solo corre sangre maldita.

—Entonces hazme un vampiro completo.

—¡Ni hablar! —bramó— Ni siquiera debería haberte dado mi sangre. No pienso quitarte la parte humana que te queda para convertirte en un monstruo. —Se levantó y se dirigió hacia la puerta a grandes zancadas.

—¡Yo no soy August! —Lo detuvo agarrándolo del brazo—. No tienes por qué protegerme. Hicimos un trato, y esta es la mejor manera de cumplirlo. Si soy un vampiro completo, y además de tu sangre, las posibilidades de vencer aumentarán bastante, ¿me equivoco?

—No pienso ser yo quien te mate.

—¡Voy a morir de todas formas si no lo haces!

—¡Ya has conseguido suficiente! Y ahora, prepárate. Tengo un mal presentimiento. —Ádrian se soltó de su agarre y salió de la habitación dando un portazo.

******************************************

Os recuerdo que podéis comprar la novela en Amazon, tanto en papel como en digital. O en Patreon, dedicada.

¡Gracias a todos por leerla y por vuestro apoyo! ♥