DELIRIO

Capítulo 15

Aquello que tanto temió que pasara algún día en ese mismo momento estaba pasando delante de sus ojos. Siempre pensó que Yammal poseía una especie de poder que era capaz de descubrir todo lo que ella hacía aunque no la estuviera viendo, y ese hecho obvio se representaba delante de sus ojos

¿Qué podría hacer? ¿Defenderse? ¿Contra qué?

Laura: -nerviosa- Yammal... yo –estaba temblando- no sé de qué estás hablando

Yammal la observaba con la respiración agitada, como si aún no supiera cómo reaccionar

Laura: -dejando el bolso caer al piso- Yo... te lo puedo explicar

Sentenció ya derrotada y preparada para lo que viniera, quizás que Yammal se enterara de todo no era tan malo, así ella podría escapar de una buena vez e irse con André para siempre.

Yammal: -viendo lo nerviosa que Laura se había puesto- ¿Qué pasa muñeca? ¿Qué tienes que explicarme?

Laura: -tragando gordo- Yo...

Ella sentía que en cualquier momento se iba a desmayar

Yammal: -suavizando su expresión- Estaba bromeando tontita

Alargó un brazo cogió a Laura de la muñeca y la acerco a él, pero Laura temblaba en sus brazos

Yammal: -abrazándola con fuerza- ¡Hey! Tranquila ¿mi amor? – Levantó el rostro de Laura- ya pasó solo estaba bromeando –la besó en los labios- Te amo, no sabes cuánto te extrañe

Había estado demasiado cerca, pensó cerrando los ojos con fuerza y dando un fuerte suspiro. Definitivamente todo lo que estaba sucediendo era demasiado arriesgado para ella y sobre todo para André. En cualquier momento en cualquier minuto la verdad podría salir a la luz y en ese momento ambos estarían perdidos

Laura: -separándose un poco de Yammal- Estoy algo cansada

Yammal: -besándole el cuello- eso puede esperar, te he extrañado demasiado

Mencionó con lujuria.

Laura: -echándose para atrás con una sonrisa- Me gustaría darme un baño –beso rápidamente los labios de Yammal al ver su expresión- Luego hacemos lo que quieras

Mintió para sacárselo de encima

Caminó sin darle la espalda a Yammal mientras cogía su bolsa y subía a su cuarto

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Renato: ¿necesitas ayuda con el equipaje?

André alzó la mirada al escuchar la voz de su padre. La verdad es que no necesitaba ninguna ayuda con el equipaje que traía en la maleta, necesitaba mucha ayuda con el pesado equipaje que traía en el alma.

André: -sonriendo de medio lado- No papá gracias

André dejó los bolsos en el suelo y caminó hacia la sala desparramándose en uno de los cómodos sillones

Renato: -viendo a su hijo- ¿pasa algo?

Lo conocía demasiado bien como para no advertir que algo había pasado, y tenía la certeza que ese algo llevaba por nombre Laura Frisseen

André: -rascándose la cabeza- si paso algo, pero conmigo

Renato: -sentándose al lado de André- ¿quieres hablar de ello?

André: se trata de Laura papá

Renato: ¿ella te hizo algo?

André: si, no... -dio un suspiro- no lo sé, creo que estoy confundido