Capítulo 1

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 "Dijeron que andas por ahí luciendo marcas en tus antebrazos, que nadie quiere saber ya de ti y que las pasarelas no han visto tus pasos. Que el autoestima se te fue a Paris y la debacle se mudó a tu casa"

Sentía la boca seca, se sentía cansada y sus parpados pesaban. Temía abrir los ojos, no quería encontrarse con su realidad. Suspiro con los ojos aún cerrados pasando su lengua por sus labios resecos y de pronto un suave beso acabo con su realidad paralela en donde el dolor del alma no existía.

Yammal: -quitando las sabanas del cuerpo de Laura- ¡Arriba! Ya es hora que te levantes

Laura frunció el ceño e intento taparse nuevamente con la sabana que cubría su cuerpo desnudo.

La noche de ayer había sido totalmente desenfrenada. Alcohol, drogas y mucho sexo, tal como le gustaba a Yammal, apodado el Lobo.

Estaba tan cansada...

Yammal: -quitándole las sabanas nuevamente- ¡Vamos Laura! Aquí no estas de vacaciones.

¿Qué no entiende que no puede levantarse?, por dios que alguien le dé lecciones de amabilidad... De repente choco contra la pared, ese hombre siempre ha estado con ella a pesar de todo, y debe responderle como tal. Eso no quita que le de coraje.

Laura: -levantándose molesta- ¡Ya voy! ¡Ya voy! –Exclamó alzando el tono de su voz-

Yammal: -tomándola del brazo- ¿qué paso chiquita?

La ve inyectando aquel gesto autoritario de siempre.

Laura: -agachando su cabeza- Lo siento.

Yammal: No me gusta que me hables en ese tono

Laura: Lo sé, lo siento mucho

Yammal: -mirándola de pies a cabeza- Ve a darte un baño... éstas horrible

Al instante le suelta el brazo y nota como le quedo una marca roja, cada vez le resulta más difícil tomarla de esa manera sin que le quede el signo de Godet.

Laura: -observándolo con tristeza- En cambio tu luces perfecto

Camino sin mucho ánimo hacía el baño. Abrió el jacuzzi y dejo que se llenara mientras contemplaba su cuerpo con depresión. Yammal tenía razón su cuerpo estaba horrible, ella estaba horrible. Su piel cada día perdía el color y sus labios casi estaban morados. Se llevó las manos a la cabeza mientras rompía en llanto

¿Quién la iba a contratar en este estado? Pensó con rabia.

Se arrodillo al frente de la taza del baño mientras una vez más volvía a enfrentarse con su reflejo en el agua. Metió sus dedos a la boca y expulso lo poco y nada que había comida la noche anterior. Se levantó apoyando sus manos en el lavabo mientras reflejaba su rostro en el espejo. El maquillaje corrido y su rostro pálido. Abrió la llave y enjuago su boca y su cara maldiciendo su suerte una y otra vez.

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André: ¡Buenos Días! –Exclamo alegre mientras se asomaba por el comedor- Su madre se pone de pie para recibir a la luz de sus ojos con un beso.

Sara: Buenos días mi amor ¿cómo dormiste?

André: -besando a su madre también- Como un angelito

Ana: -sonriéndole- Que bien por ti hermanito, lo que es yo dormí pésimo

Al instante mueve la mano y casi se le cae un vaso, pero ella fue más rápida y lo tomo.

André: Besando a su hermana- Ya tendrás mejores noches

Renato: ¿vas a la oficina hoy hijo?

André: -tomando asiento- Si, es un día bastante agitado. Tengo una reunión con la comisión debemos escoger el nuevo rostro de nuestra campaña

DELIRIODonde viven las historias. Descúbrelo ahora