Ready to run|•Louis Tomlinson•

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Luna

Jade entró de nuevo a la habitación con una sonrisa. Era una chica muy linda: cabello castaño y ojos marrones. Se sentó en la silla al lado de mi camilla.

-Te iras en cuatro días-me sonrió otra, pienso que nunca se cansa de hacerlo. Al menos no tendría que estar aquí el día de mi cumpleaños-me quedaré todos los días para acompañarte y cuando salgas de aquí te vienes a dormir a casa ¿qué te parece?-wow nunca pensé tener una amiga así

-Me parece genial pero mi padre no me dejará-le intente sonreír pero me salió una mueca.

-No pienso dejarte en tu casa con ese monstruo que tienes como padre. ¿Cómo se atreve a ponerte una mano encima?-bufó frustrada-yo te prestaré ropa tranquila y puedes quedarte todos los días que quieras. A mi madre le encantarás-dios mio amo a esta chica.

-Gracias de nuevo Jade, nunca había tenido una amiga. Y tranquila me quedo solo la noche de salir de aquí no quiero causar molestias y...-me interrumpió.

-Pero que dices, tú no molestas Luna. Mi madre está encantada con que vengas, estuvo llamando cada hora para saber si habías despertado. Tuve que apagar el teléfono porque me estaba poniendo nerviosa-reí. Siempre quise tener una madre así de fantástica.

-Tu madre es increíble, siempre quise tener una madre que fuese así-dije melancólica y triste.

Recuerdo cuando mi madre pasaba de mi, era un estorbo, cuando Sally me pegaba no hacía nada. Jade tenía una madre fabulosa y se la merecía, ella era una chica estupenda.

-Siento lo de tu familia, a mi madre le encantará tener otra hija-la miré atónita. ¿Su madre quería que yo fuese su hija? Definitivamente Jade es lo mejor que me ha podido dar la vida en este momento. Abrí los brazos y ella corrió a abrazarme. Se sentía muy bien tener una amiga y a gente que te quiere. Desearía que Niall estuviera aquí y así sería perfecto.

-Gracias Jade, se siente genial tener una amiga-besé su mejilla mientras me sonreía.

-Llamaré a mi madre para avisarle de cuando sales del hospital y decirla que estas bien- asentí y ella me dedicó una tierna sonrisa mientras salía de la habitación con el móvil en la mano.

Medité sobre no estar en casa estos días. Y tampoco estaría cuando saliese del hospital por que iría a casa de Jade. El día que vuelva tendré una buena tanda de golpes. Mierda, mierda y más mierda. Odio mi vida.

Jade entró a la media hora con una gran sonrisa en la cara. Como desearía tener una familia que me quisiera, amigos, que no me pegaran en casa y en el instituto...

-Mi madre vendrá a recogernos pronto para que podamos pasar el día juntas, ese día no vamos a clases y el siguiente tampoco, necesitas reposo por dos días.

-Vale, muchísimas gracias a ti y a tu madre. Gracias por todo lo que habéis hecho las dos por mí, no se como agradeceros todo-dije triste y alegre. Me encanta tener una amia y gente que me quiere pero no hay nada que les pueda dar a cambio.

-Con verte feliz es suficiente-sonrió y yo lo hice con ella. Estuvimos todo el día hablando de cosas cualquiera para conocernos más.

4 días más tarde

Jade

Luna era una persona genial y me daba mucha pena y rabia a la vez que sus padres la trataran tan mal. No se lo merecía, era una persona feliz y maja cuando se olvidaba de todos los problemas que tenía en casa.

Ya había hablado con Niall de la sorpresa que la iba a dar, era un chico dulce y tierno. Si duda la persona más buena del mundo y una se merecía tenerle como mejor amigo.

Ya habían pasado cuatro días, todo había ido genial. Mi madre le compraba regalos a Luna y yo se los dejaba en el cuarto para que los viese. Cuando los veía y los abría, una sonrisa muy grande adornaba su cara. Me hacía feliz verla a ella tan bien a mi lado, sin duda era una gran persona con un corazón muy frágil.

Miré la hora, las ocho y media de la mañana. Me daba pena despertarla pero quería aprovechar todo el día con ella. La moví delicadamente y comenzó a desperezarse. Abrió los ojos y al verme sonrió y yo también. Le di la ropa que le había comprado mi madre y me miró sorprendida.

-Pero yo no pedí ropa-protestó

-Me da igual es un regalo para ti y te lo vas a poner ahora-ordené seria. Luna soltó una carcajada y yo me uní a ella.

-Gracias Jade-besó mi mejilla y fue a cambiarse. Yo ya estaba lista, llevaba unos shorts rasgados y una blusa rosa junto a mi pajarita. Salió del baño ya cambiada y peinada, estaba guapísima.

-Vamos, mi madre nos espera fuera-la dije. Cogí algunos de sus regalos y ella cogió los que quedaban- por cierto te ves genial- me abrazó y yo la correspondí. Salimos a fuera y nos montamos en el auto de mi madre.

-Hola mamá-besé su mejilla.

-Hola ...-Luna habló

-Llámame Norma cariño-le dijo mi madre.

Luna

Pasamos una tarde increíble, conocí a Karl, su hermano que era un encanto al igual que toda su familia. Jade y yo estuvimos en su habitación hablando, ahora mismo ella me estaba cantando. Tenía una voz hermosa. Terminó de cantar la canción y aplaudí muy fuerte.

-Tienes una voz preciosa Jade- la abracé fuerte y ella correspondió a mi abrazo. Se abrió la puerta y nos separamos. Ahí estaba su hermano Karl.

-Siento interrumpir su gran charla de chicas pero hay que ir a cenar-reí pero enseguida paré. De cenar nada yo me voy a mi casa.

-Yo me voy ya a casa gracias por todo y...-me interrumpió su hermano

-De eso nada señorita tu te quedas aquí- Karl se cruzó de brazos. Negué con la cabeza y él se fue acercando. Retrocedí pero choqué con la pared. Karl me alzó y me colocó en su hombro.

-Karl bájame- dije dándole patadas y puñetazos. Caminó conmigo escaleras abajo- ¡SOCORRO!- grité, Jade venía detrás nuestro riendo- ¡JADE AYÚDAME!- llegamos a la cocina y Karl me dejó en la silla. Crucé mis brazos y puse cara de enfadada.

La cena fue más tranquila, yo fulminaba a Karl, él me sacaba la lengua y Jade y su madre reían. Esta familia era la mejor. Después Jade y yo estuvimos viendo películas ya que mañana faltaríamos también a clase. La madre de Jade ya había hablado con el director y estaba todo solucionado.

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Aquí esta el segundo cap

Espero que os guste

Un voto pliisss☺

Criiss❤