Manos a la obra

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-¡Abigail!- la primera voz que escucho al bajar del tren fue la de Howard que se apresuró a recibirla y a separarla de la multitud. -¿Con todos tus conocimientos no te fue posible ponerte en contacto para decirme que estabas bien? Estuve varias horas esperando por una señal de vida y tu simplemente andabas por ahí jugando a ser la heroína.
Ella le sonrió pues la preocupación que él reflejaba en sus ojos la había visto en alguien más, aún no dejaba de sorprenderle lo mucho que su mejor amigo se parecía a su padre.
-Steve puede decirte que intente reparar el transmisor pero la bala atravesó sus circuitos y lo dejo inservible.
-¡Una bala!
-Si, como las que nos lanzaron cuando volábamos ¿recuerdas?- Si él la acusaba de ser arriesgada y temeraria, ella podía inculparlo de los mismos cargos. -¿Cómo estuvo el fondue?
-¿Fondue? -Abigail levanto una ceja incrédula de que él se hubiera olvidado del asunto- Oh, con la agente Carter - Alguna idea pasó por la mente de Stark y lo hizo sonreír - ¿Celosa?
Abigail río - No, más bien curiosa.
-No hubo tiempo, fue difícil salir de esa nube de balas y en cuanto salimos quedaba poco combustible como para ir por un fondue.
-Oh, que desgracia.
-De ninguna manera, ya he notado que la agente Carter no esta interesada en un fondue que no sea con....
-Steve. -pronuncio el nombre rápidamente antes de que Stark lo insultara.
-Si, él. Al parecer tiene un peculiar encanto que atrae a todas las mujeres.
-Creo que es porque no pasa desapercibido, aunque no a todas nos atrae de igual manera. Pero vamos dejemos de lado esas cosas ¿que hacemos aquí?
-Claro, será mejor poner manos a la obra y estar en un entorno más controlado.
-Por supuesto- luego dejo el cartucho que Steve había sacado de la fábrica en su mano -un regalo del imán de mujeres.
-¿Qué es?
-Es lo que vamos a averiguar. ¿Hay un laboratorio o algún lugar para realizar pruebas sin poner a personas en riesgo?
-Si y aunque no se equipará en nada al de la mansión, creo que para fines militares y de investigación bastará.
-Uu ¿Y hay juguetes interesantes?
-Hay algunos muy interesantes.
Juntos se fueron al laboratorio y Stark tenía razón, no era nada interesante, difícilmente podría llamársele a ese lugar un laboratorio pero ellos se las ingeniarían para adecuarlo a sus necesidades.
-Ha, ¿Howard Stark podrá trabajar en un lugar tan humilde?
-¿Volverás a huir con el experimento?
Abi no podía dejar de reírse por la manera en que Howard se refería a él -No por el momento.
-Entonces creo que la estadía será soportable. Empezando por esto -Howard se dirigió a un gran baúl que se encontraba cerca de la pared y lo abrió -La gente de Wakanda ha dado este pequeño regalo al pueblo de Estados Unidos, es un metal muy extraño llamado vibranium, absorbe las vibraciones y es prácticamente indestructible.
Abigail sabía perfectamente qué hacer con él -¿Con qué fin planean usarlo?
-No es mucho y aún no encuentro un fin práctico para él.
-Yo ya lo tengo en mente sino te importa que me adueñe de él.
-Es todo tuyo, siempre y cuando nos ayude a terminar con esta guerra.
-¿Dudas de mi? -le dijo ella fingidamente ofendida.
-No. ¿qué harás con él?
-Es una sorpresa. Descuida quedaras complacido al final.
-Bueno dejemos eso por ahora y vamos a inspeccionar lo que has traído.
por medidas de precaución el cartucho fue introducido en una cámara reforzada y Howard lo manejaba por medio de unos brazos mecánicos.
-El patrón de emisión es inusual - dijo Stark al extraer la pequeña munición resplandeciente- rayos alfa y beta, neutrales. Dudo que Rogers se haya fijado -dijo con mofa a Abigail, pero ella lo ignoro y se refugió lejos del vidrio que los separaba de la cámara, podría no saber que era esa pequeña cosa, pero ya había visto su poder y su alcance -Parece inofensivo ¿Por qué tanto alborotó?- La munición estaba sujeta a una de las pinzas y cuando la otra entro en contacto con ella produjo exactamente la reacción que Abi había esperado y la explosión rompió el cristal haciendo a Stark salir disparado hacia atrás cayendo de espaldas y con parte de su cara chamuscada, ella no paraba de reír - Apunta eso y podrías haberme dicho lo que podía ser.
-Te dije que era un arma, fuiste tu él que lo tomó a la ligera.
-Rogers va necesitar una buena defensa contra estas cosas.
-Y la tendrá.
-¿Qué estas tramando?
-Dame tiempo y lo veras. Sigue con tus experimentos, tengo trabajo que hacer.
Pasó un tiempo y Abigail término su trabajo, había visto muchas imágenes de él y le había parecido un diseño ingenioso, un arma y una defensa. Ella alababa a la persona que lo había diseñado y siempre había creído que esa persona había sido Howard Strak, no sabía que en realidad ella era la autora del compañero incondicional de Steve.
Stark había terminado sus experimentos y había hecho varias cosas para las tropas que ya estaban listas para ser entregadas, pero primero debía de equipar a la cabeza del movimiento, a Rogers y para eso Abigail fue a hablar con la agente Carter.
-Peggie - le dijo entrando en su habitación, ellas estaban solas y eran compañeras de cuarto en las instalaciones de Londres, habían desarrollado una buena comunicación y una camaradería que sólo dejaban ver cuando estaban a solas. -Howard y yo hemos terminado de hacer el armamento ¿quisieras decirle a Steve que vaya mañana al laboratorio a las 8:00?
-¿Me estas haciendo un favor?
-Dijiste que querías verlo fuera del cuartel, algo más informal. Me ha dicho que hoy les preguntará a los muchachos si quieren formar parte de su equipo. Se van a reunir en un bar ¿Que hay más informal que eso? Yo sólo te estoy dando la excusa para ir a verlo.
-Gracias, yo le informaré. -dijo acomodando se su uniformé.
-¿No pensarás ir vestida así? Peggie es tu oportunidad de deslumbrarlo, bueno aún más de lo que ya esta. Necesitamos algo más... Provocativo, que no pueda resistirse a tomar nota de cada parte anatómica de tu ser.
-¿Que es lo que sugieres?
Todos en el bar reían y cantaban, Peggie no estaba tan segura de entrar hace tiempo que no usaba ropa ceñida y su aspecto le era muy diferente al que estaba acostumbrada. El vestido tinto que lucía acentuaba todas sus curvas, era bello y refinado y aún así no mostraba más que lo necesario. Abigail la alentó a entrar y supo que había tenido el efecto deseado cuando los cánticos decayeron y todas las miradas fueron a dar hacia la recién llegada.
Su intención era esperar fuera pero Steve estaba en el fondo del bar y ella quería ver su reacción por lo que la siguió dentro del establecimiento y se paró en un lugar donde podía observar sin ser vista.
La cara de Steve estaba de mil colores, sus ojos no podían dejar de observar el cuerpo de Peggie, aunque lo hacía discretamente cuando ella miraba hacia otro lado. Escuchó una voz familiar y supo que el sargento estaba con ellos y pudo ver que también él estaba atónito ante la agente Carter, aunque ella estaba impasible, se mantuvo firme y serena y una vez que dio su mensaje salió del local no sin antes sonreirle a Abigail.
-Soy invisible- decía Bucky - Me estoy convirtiendo en ti, esto es una pesadilla - y se dejo caer en el taburete donde había estado sentado.
:Hombres : refunfuño Abigail para sí y entró para entregarle una carpeta a Steve.

What if...?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora