Tratos y revueltas.

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Poco a poco Bulma comenzaba a completar las esferas del dragón. Mientras que Goku y Vegeta esperaban en el infierno junto a Milk para protegerla. Aun que Goku sabia que gracias a su hermano Turles y su padre la protegían bien, el no quería dejarla sola en ese lugar. Los enemigos de Goku no se asomaban por esa área ni siquiera para mirar. Esto sabían que el nivel de pelea de esos dos había incrementado demasiado. Incluso el de su esposa. Aun asi era la arrogancia tanta que estos había juntado fuerzas para pelear con ellos. Bardock y los demás sabían que era cuestión de tiempo. Conocía bien a Freezer al igual que rey Vegeta y sabiendo que Goku estaría hay no aprovecharían ese momento, para tratar de vengarse de el y matar al menos a su esposa.

La mayoría de los enemigos de Goku estaban acercándose al lugar donde estaban, al menos los mas poderosos. Al ver el batallón que se aproximaba Raditz desapareció del área. Sabia que no quería tomar partido en, eso solo se quedaron Turles, su padre Goku, Vegeta, Milk y el padre de Vegeta. Bardock había ordenado a su hijo a llevar a Gine al paraíso, para que su alma estuviera segura. Goku hubiera deseado que su esposa no formara parte de esa batalla pero conocía a Milk y sabia que esta no renunciaría a algo como eso. Vegeta y Turles parecían emocionados sonriendo sintiendo euforia ante ese reto. Solo Goku y Bardock se mantenían serenos, callados, al Milk verlos a los dos sonrió no cabía duda que esos dos eran padre e hijo.

-Milk si te pido que no pelees ¿lo harías?- dijo su esposo seriamente convertido en ese hombre de cabello rubio aun sin mirarla.

-Ya no soy la misma Goku, no le daré la espalda a una batalla.- raspo Milk mas seria que el curvando una sonrisa.

Vegeta y Turles curvaron una sonrisa. Turles había convertido a esa mujer en un arma letal. Vegeta miro con admiración a Milk.

-Temo por ti Milk, si yo muero iré al cielo al igual que Vegeta, pero si mueres aquí tu alma desaparecería.- explico Goku aun mas serio tomando la mano de su esposa viendo como sus enemigos gritaban amenazantes.

-No me importa, no te dejare pelear solo.- dijo Milk decidida hablando como toda una sayayin mirando a su esposo.

Goku la tomo en sus brazos y la beso apasionadamente y muy largamente. Todos se quedaron perplejos, menos Bardock que sonreía.

-NO CREES QUE ESTO NO ES MOMENTO PARA ESOOO.- espeto Vegeta algo celoso y alarmado.

Goku se separo poco a poco de su esposa acariciando su mejilla...

-Lo siento Milk, por mi culpa estas aquí. Te amo.- susurro casi con voz ahogada.

Milk lo miro asustada ya sabiendo cual era sus intenciones....

-GOKU NO...- grito esta, pero luego su grito se ahogo.

Goku le propino un golpe tan fuerte en el estomago que la dejo inconciente. Este rápidamente la tomo en sus brazos acariciando su rostro. Sabia que nada detendría a Milk de pelear y que esa era la única manera de impedir que su alma desapareciera. Al golpearla Goku sintió como si el alma se le hubiera ido del cuerpo, viéndola en el suelo aguantando las ganas de llorar. Al ver lo que hizo Vegeta se quedo impactado conocía bien a Kakaroto y sabia que este no era capas de golpear a su esposa. El ki de Turles y de Vegeta subieron al ver lo que había hecho. En ese momento Vegeta le propino un golpee la cara a Goku que este recibió de buena manera.

-MALDITO KAKAROTO, SI VUELVES A TOCAR A ESA MUJER TE MATOOOO ME ESCUCHASTE.- le espeto Vegeta a Goku.

Luego de darle el golpe Goku escupió un poco de sangre un poco entristecido.

-Lo hizo por su bien Vegeta si muere aquí su alma desaparecerá.-anuncio Bardock mirando a Milk.

-Rey Vegeta, por favor proteja a mi esposa.- le pidió con amabilidad Goku a el padre de Vegeta.

El descenso de Milk. Parte IIIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora