Los 6 Elementos ~EDITANDO~ NO LEER HASTA NUEVO AVISO

Capítulo 2 ~ El extraño suceso

   Mi estomago rugía por comida cuando el sol se puso, y ya era de tarde, así que fui a la cocina por un delicioso bocadillo. Al fin y al cabo, era una gordita feliz (nada gordita, por cierto).

   Ya en la cocina, mi madre, y la mugre de su uña, Robert (ah, ¿ven? Eran como Mike y yo) conversando arduamente sobre algunas universidades a las cuales sería bueno que ingresara.

   Robert se había encargado de ser mi figura paterna, pero en forma de tío, tomando el lugar del padre al cual jamás conocí.

   Mi graduación se acercaba, y yo no veía el día en que podría al fin escapar de esa prisión llamada secundaria.

-¡Alice!- me saludó mi madre cuando me acerqué a abrazarle- Pensé que llegarías más tarde por estar con Mike.

   Evadí el tema con rapidez, sinceramente no necesitaba más dolores de cabeza por ese día. Por favor.

-Sí... Eso en realidad no importa, y ¿Qué tal están?- bajé del anaquel de cedro un cartucho repleto de galletas de chispas de chocolate sueco.

-Bastante bien, en realidad- Robert dio un sorbo de su té chino, que no parecía nada más que agua saborizada-. Hablábamos sobre universidades en Rusia...

-¡¿Rusia?! -grité sobresaltando a mi tío, quién pegó un brinco del cual me habría reído si no estuviera tan alterada- ¿Por qué rayos iría a Rusia? Ni siquiera sé ruso.

-Puedes aprender rápido, confío en ello, además- Lily, mi madre, lanzó una fugaz mirada cansada hacia su viejo amigo-, allá tenemos... mejores oportunidades.

   Me puse histérica, y empecé a tener un ataque de ansiedad. Busqué en la habitación cinco objetos que pudiera ver, cuatro que pudiera tocar, tres que pudiera oír, dos que pudiera oler, y una que pudiera probar.

-Abrigo, paraguas, retrato, llaves, espejo...- murmuraba apesadumbrada, mientras que mi madre intercambiaba una mirada preocupada con Robert. Los ignoré, qué caso tenía explicarles- Botas, alfombra, jarrón, dibujo- hice una mueca al detenerme en el dibujo que había hecho como hace siglos para mi madre. 

  En mis diecisiete años había visto a un gato morado más deforme que el que estaba plasmado en esa hoja de papel. 

Continué con una respiración más normal- Gorrión, radio, teléfono- sonreí con suavidad al posar mi vista en las orquídeas que descansaban en el bonito jarrón de cristal que había mencionado- Orquídeas, perfume- me metí una de las galletas a la boca y mastiqué con alegría- Galletas. 

   Practicaba eso de andar controlando mis episodios con más frecuencia. No sé, la vida andaba de maldita últimamente. Tomé aire y miré a la pareja con toda la seriedad que pude reunir.

-¡No pueden hacerme esto! Me niego rotundamente a permitir que destruyan todo lo que he planeado en mi vida mudándonos a Rusia- miro a mi madre y luego a Robert, frunciendo el ceño-. Se supone que somos un equipo, no pueden hacer decidir cosas sin mí. 

   ¿Mudarnos? ¿Acaso habían perdido la cabeza o que? Tenía todo allí, mis amigos, mi colegio, mis clases de arte. Todo. Absolutamente todo.

-Lo lamento, pequeña -Robert intentó tomar mi mano, pero la aparté con brusquedad-, pero tenemos que hacerlo, tu madre y yo lo hemos planeado desde hace bastante y...

   Mi tío fue interrumpido por la voz de James Arthur, cantando el coro de Impossible, a todo pulmón. El nombre de Mike brilló en la pantalla de mi móvil.

   Vaya momento para llamarme, poste, pensé.

-¿Alice?- su voz sonaba pastosa desde el otro lado de la línea, la pareja me observaba con incredulidad- Oh por Dios, chica, lo lamento tanto, quiero recompensarte con...

-¡Mike! Sin cuidado- le respondí, ¿Qué eran dibujos feos y sin sentido? No valían más que mi amistad con ese fideo andante-. Hey, ¿podríamos hacer algo esta tarde? Necesito... aire fresco.

-Claro chica, llego en cinco- colgué el móvil, y me dirigí hacia la entrada para coger mis zapatillas y chaqueta.

-Te dije que no lo iba a tomar bien, no podemos seguir ocultándolo, debes decirle- Robert tenía esta forma de que sus susurros sonaran como gritos, los ojos de mi madre se llenaron de horror. Pero, ¿Qué la había hecho reaccionar de tal manera?

-No creo que sea lo apropiado- dijo ella a su vez, aguantando las lágrimas-. No puedo...

-Si no se dan cuenta, sigo aquí eh- comenté moviendo los brazos en todas las direcciones-. Aparte, entre tanto drama y murmullos, ¿Qué es lo que tienen que decirme?

-Yo... Robert ayúdame por favor- pidió Lily, mirando a su amigo con súplica.

-No, Lily ya no puedo seguir ayudándote, tienes que decírselo tú misma- Robert negaba con su cabeza, y sus cabellos oscuros y lacios se movían de un lado a otro.

   Segundos más tarde, tocaron a la puerta. Fui corriendo a abrirla, y me encontré a Mike con su típica sonrisa torcida de Lo lamento, Harper.

-¡Hola!- me saludó animado, marcando sus hoyuelos,. Lanzó una mirada a mi madre con la intención de saludarle, pero paró en seco, eliminando lentamente la sonrisa de su rostro para mirarme preocupado- ¿Llego en mal momento?

   Rápidamente, le agarré el brazo, y empecé a jalarle por fuera de la casa.

-¡No pudiste llegar en mejor momento!- le apure con un gesto, pero en lugar de moverse, me lanzó una mirada de ¿Qué está ocurriendo?

   Ni siquiera me dio el tiempo de darle un último empujón, cuando Robert se planteó con ferocidad frente a mi madre.

-Lily, ¡Dícelo antes de que sea muy tarde!- nos apartó con un brazo, y cruzó la puerta como alma que lleva el diablo.

-Alice... Ven aquí, tenemos... Que hablar- mi madre clavaba sus ojos en el suelo, jugando nerviosamente con un hilo de su blusa.

-¡No! -chille- ¡Necesito un descanso antes de cualquier cosa!

  Tomé la mano de Mike, y de un portazo cerré la puerta tan familiar para mí. Sea lo que sea que se tramaban mi madre y su amigo, tendría que esperar. 

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Un cambio aquí un cambio allá es un pasito, que se baila por aquí y por allaaa.

¿Mejor, no? Espero que sepan que esto es un regalo para vosotros queridos lectores, no quería que leyeran una porquería, así que lo arreglaré sólo por ustedes.

¡Mis preciados lectores! Vosotros sabéis que sin ustedes, yo no seguiría escribiendo, y es por eso que me mantengo eternamente agradecida ¿Pero podrían hacerme un favor? Aquellos que tienen el inglés como una lengua aprendida, pásense por "Him", una historia llena de drama y romance que hará que vuestros corazones den un vuelco con cada una de las palabras escritas por DarkSpark18.

Besos y abrazos.

~Liebling <3