5

92 15 2
                                    

Lali

Me pregunto lo que el siempre maravilloso Peter Lanzani pueda querer de mí. No lo he conocido siquiera, pero Simon le ha conocido siempre. Al parecer, él es un gran quarterback y eso le hará ganar puntos con mi hermano.

Rochi y yo hemos estado buscando a través de Facebook a mi chico misterioso. No hubo suerte hasta ahora y estoy empezando a desanimarse.

—Está bien, Lali, lo encontraremos así tenga que pasar por cada chico que vaya a esta escuela.
Me rio.
—De acuerdo, Rochi, tengo que ir a encontrarme con mi hermano y su amigo. Al parecer, necesita un favor.
—¿Quién es? —pregunta arremolinándose alrededor de su silla para mirarme.
—Peter Lanzani. Han sido amigos desde siempre. Me sorprende que Simon lo deje hablar conmigo siquiera —le digo mientras saco mis pantalones de mezclilla. Yo llevaba pantalones cortos de yoga para la cama, pero Simon moriría si caminara en ellos.

—¡Oh mi dios! ¡Él es totalmente caliente! Lo lamería de la cabeza a los pies —dice con una mirada tímida en su rostro.
—No sé porque no lo he visto antes —me rio en su cara y camino hacia la puerta.
—¡Oh, te olvidarás de este otro chico al segundo que lo veas! ¡Es como el hombre más caliente de todos! — chilla mientras da vuelta en la silla.

Me río totalmente de ella y salgo por la puerta. Nosotros vivimos en el último piso y tengo que tomar los cuatro tramos de escaleras hasta el vestíbulo. Odio estas escaleras y deseo que este edificio tuviera un ascensor.

Estoy esperando a que si yo puedo hacer este favor a Peter, entonces tal vez me ayudaría a encontrar mi chico. Me emociono y me apresuro hacia abajo. Sé que él es amigo de mi hermano, pero yo podría ser capaz de hablarle guardándolo de él.

Al salir por la puerta de la escalera me doy cuenta de que ya están aquí. Es sábado por la noche y este lugar está bastante vacío. Las sillas donde usualmente ves las chicas estudiando o viendo la TV están vacías excepto por mi hermano y su amigo. Peter está sentado de espaldas a mí, así que no puedo ver si él es el chico más bueno de todos como dice Rochi. Probablemente no pensaría eso de todos modos por el simple hecho de que el hombre misterioso es el más caliente de todos, bien, para mí de todos modos.

Simon está de pie y agitando sus manos de una manera animada. Creo que están hablando sobre el juego.

Al acercarme a Simon, deja de hablar y extiende sus brazos para un abrazo. Entro en ellos y me siento como una niña pequeña.

Quiero decir, vamos, es más de treinta centímetros más alto que yo. Me escapo a Peter y todo el color drena fuera de mi cara.

Es él y tiene la misma mirada en su cara que estoy segura de que tengo. Voy a darle crédito, porque aunque cuando Simon me deja ir, a Peter se le levanta el ánimo y pone una sonrisa amable en su rostro. Él toma los pocos pasos entre nosotros y extiende su mano.

—Hola, Lali, es un placer conocerte. Simon me ha hablado mucho de ti.

Me mira intencionadamente y me agarra la mano para la sacudida. Mi palma hormiguea donde toca la suya.

—Es un placer conocerte, Peter. Puedo decir lo mismo de ti —le contesto mientras deja ir mi mano—. Tengo que volver a mi habitación, mi compañera de cuarto está lista para comenzar nuestra noche de película, así que dame tu número y podemos resolver ese favor.

Él asiente con la cabeza.

—Suena como un plan. Tenemos una fiesta a la que llegar también. —Tomo mi teléfono del bolsillo. Se lo entrego a él y hace un punto para tocarme cuando lo toma. Él presiona algunos botones y luego lo está poniendo de nuevo en mi mano.

Nos despedimos y me pongo a caminar de regreso por las escaleras hasta mi habitación. Apenas noto el viaje, porque mi mente está en Peter Lanzani. Ahora me doy cuenta por qué parecía tan familiar. Hay una foto de él y Simon en una fiesta del lago un par de años atrás en el dormitorio de Simon. Su pelo era más largo, así que supongo que es por eso que no hice la conexión antes de ahora.

Una hermosa cosa Where stories live. Discover now