Capítulo 198

94 9 1
                                    

Llegada la mañana dentro de la mansión Earhart, Leo se encontraba mirándose en el espejo, arreglando los últimos detalles antes de salir.

"Muy bien..."

Dio una última mirada a su habitación y se comenzó a imaginar que todo estaba lleno de cosas para bebes.

"Muy pronto todo esto cambiará..."

Diciendo eso, cerró la puerta de su habitación y se dirigió al comedor en donde se encontraba Tanaka esperándolo.

—joven amo, ¿Qué paso? —Pregunto Tanaka sorprendido al ver la expresión que traía Leo al sentarse.

—Nada... Simplemente, siento que hoy es un gran día...—respondió al sonreír

—Me alegro mucho oír eso...

Procedió a colocar los platos sobre la mesa junto con el desayuno especial que siempre le preparaba a Leo en las mañanas.

—Tanaka

—Dígame, joven Leo

—¿Cómo era yo de pequeño? —le pregunto curioso

—¿Eh? ¿Por qué lo pregunta?

—Curiosidad...

Tanaka sonrió con los ojos cerrados mientras recordaba a un Leo pequeño.

—Bueno... Usted era un bebe muy tranquilo cuando estaba a mi cuidado, aunque cuando su madre Velia lo llevaba dentro del vientre le ocasionaba muchos malestares.

—¿Malestares?

—Si... Tuvo muchas náuseas, todo lo que comía lo vomitaba...

—Pero eso no es normal en un embarazo

—Por supuesto, sin embargo, todos los embarazos son muy diferente, el de usted fue un tremendo calvario, la para la señora Velia, estuvo con las náuseas hasta los seis meses de gestación.

—Oh... Fui un bebe difícil —sonrió burlonamente

—... Incluso también exigente, apenas cumplió los seis meses, comenzó a gatear de un lado a otro, no podíamos quitarle los ojos de encima y si lo hacíamos usted ya hubiera estado en el hospital, no sé por qué siempre le gustaba ir a las escaleras.

—Sí que fui muy problemático

—Así es... Estoy seguro de que, si algún día se llegara a casar y formará una familia, él bebe que esperaría su futura pareja se parecerá mucho a usted.

—no estaría mal, aunque sería mejor si se pareciera a mi pareja —sonrió con orgullo

—bueno... Te agradezco por el desayuno, me retiro

—de nada...

—antes de irme, necesito que les digas a mis madres que tardaré en llegar y que tal vez traiga a un invitado

—¿Invitado?

—Así es... Claro, si en caso se les ocurre salir hoy

—De acuerdo, se los haré saber

—Muchas gracias, Tanaka

Apartamento de Lisandro...

La mañana llegó y un nuevo día empezó para mí... Al despertarme y desayunar no tuve ningún inconveniente... Es lo que me gustaría decir a excepción de una cosa... Las náuseas matutinas.

"No puedo... Estoy a punto de botarlo todo... Aguanta, aguanta..."

Me decía a mí mismo teniendo la comida en la garganta, sentía que el estómago se me retorcía por cada bocado que daba.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Apr 07 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Reencarne En Un Mundo OmegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora