Reencarne En Un Mundo Omegaverse

Capítulo 11

Tiempo después

—mañana tenemos la prueba de géneros

Murmuro Dan mientras caminábamos

—¿emocionado?

Le pregunte con una sonrisa

—por supuesto que no... Solo es una tonta prueba

Respondió él con un rostro serio.

Al verlo reaccionar de esa manera me causo un poco de risa

—¿por qué te ríes?

Me pregunto con un leve sonrojo en las mejillas

—es que...Recuerdo que cuando eras más pequeño te costaba un poco expresar tus emociones y ahora pareciera que tratas de lucir genial diciendo "solo es una tonta prueba"

Lo imité con la misma reacción con la que él me respondió

—hump... Por supuesto que no

—si claro... Como digas *voz sarcástica* fu, fu, fu.

Les comento que ya han pasado cinco años desde que Dan y yo somos amigos... Muchas cosas han cambiado desde entonces... En especialmente Dan.

Cuando se terminó las vacaciones de verano ambos sabíamos que nuestro tiempo juntos se acortaría y que solo nos veríamos por las tardes, ya que ambos estábamos en escuelas diferentes y en la tarde era el único horario donde no había escuela para los dos.

Pero un día cuando estaba llegando a la escuela, fue una gran sorpresa ver a Dan ahí en mi escuela, en especial el primer día de regreso a clases. Unos días antes de regresar a clases me contó que su mamá lo había cambiado de escuela porque se había enterado de que sus compañeros lo intimidaban y la escuela sabiendo eso no hacía nada al respecto

"no sé qué clase de escuela es, pero realmente quien permite que alumnos molesten a otros, que enojo me hizo sentir eso, pobre mi pequeño amigo no me imagino las cosas feas que tuvo que pasar estando ahí con esos matones, si hubiera estado ahí yo misma lo hubiera defendido y por supuesto también le enseñaría a Dan a cómo defenderse."

<la violencia no es buena, solo se usa en forma de defensa, mas no para intimidar o molestar>

Fue por eso que la madre de Dan Liliana lo saco de esa escuela y opto por inscribirlo en una nueva escuela sin decirle el nombre claro, ya que sería una sorpresa para él... Y sí que lo fue diría yo y no solamente para él sino también lo fue para mí.

Ahora no solo íbamos a la misma escuela... Si no también estábamos en la misma clase, todo eso se debió a la influencia de mis padres. Al principio mi padre se había negado por completo, pero como saben mi madre lo influencio... Y ya se imaginarán como lo hizo, solo les diré que una mañana mi padre se despertó muy renovado mientras que mi pobre madre no se despertó sino hasta el mediodía.

Desde ese día todas las mañanas nos vamos juntos a la escuela, nos sentamos al lado del otro y almorzamos juntos. Cuando Dan cumplió los ocho años fue el primer niño en manifestarse como Alfa a tan temprana edad.

Al principio él no estaba muy contento que digamos... eso se debía a que pensaba que ya no me agradaría más estar con el sabiendo que era Alfa, supuso que yo misma me alejaría de él.

Así que al saberlo y para que no siguiera pensando esas cosas le dije:

—ya sea Alfa, Omega, Beta ¡Dan es Dan! Y pase lo que pase, ¡siempre vamos a ser amigos!

Recuerdo que ese día fue la primera vez que vi llorar a Dan como nunca, después de ese día paso de ser el niño tímido a ser alguien con más confianza en sí mismo.