CAPITULO 22

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Tori

La llegada de sus padres puso a el ruso muy tenso, está de mal humor y su padre también lo está, no me ha mirado en ningún momento, el hombre solo habla en su idioma lo que me es difícil de entender, sin embargo, Ania, su madre ha sido algo más am...

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La llegada de sus padres puso a el ruso muy tenso, está de mal humor y su padre también lo está, no me ha mirado en ningún momento, el hombre solo habla en su idioma lo que me es difícil de entender, sin embargo, Ania, su madre ha sido algo más amable, aunque se permanece a distancia mirando con detenimiento todo mis movimientos.

La noche no terminó hasta que cruzó la puerta Maki, la hermana gemela de Artem, viéndola mejor, más que la última vez que no recuerdo muy bien a la mujer, por mi estado de histeria en ese momento de su visita, él y ella se parecen mucho, y como él dijo, sus pocas diferencias la hacen parecer distinta, pero sus facciones no son tan iguales como su comportamiento, ambos levanta las cejas de la misma manera mientras escuchan en silencia algo.

No creí que Artem estuviera tan molesto hasta que lo escuche gritar a su hermana, todo eso me tenía incomoda.

— Tori, por favor, sube a tu habitación — me dijo con autoridad mirando que estaba en la escalera mirando todo esa escena.

Veo que no solo mi familia estaba en contra de este matrimonio, también el suyo.

Traté de subir pero me detuve cuando su padre dijo algo en voz áspera y subió el primero pasando por mi lado, yo me aparté ya que el hombre se ha portado tan hostil conmigo que preferí alejarme.

Los ojos de Artem siguieron a su progenitor y luego fijó sus ojos en mi.

— Buenas noches, malýshka — dice y asiento, se que no me quiere ahí, está demasiado molesto y tenso con la visita. Tampoco quiero estar mientras ellos se enfrentan por mi culpa.

— Buenas noches — le digo a las mujeres

— Descansa — me responde Ania

— Buenas noches, zolovka — me dice la gemela de Artem y yo lo miro sin entender, no sé si es un insulto lo que me dice.

Pero veo como Artem la mira y pone los ojos en blanco.

— Solo te llamo cuñada, sube ya — me ordena y asiento con aprobación.

Subo.

En la soledad de la habitación repaso la situación, no veo al hombre con una situación así, es difícil ver a este hombre que me ha obligado a casarme con él, tener que buscar la aprobación de su familia.

Es el menor de los cinco hermanos, y por lo que me contó sobre su hermano, ese que se suicidó, ellos se han preocupado por él y que no le pase igual que su hermano, Alek, creo que era su nombre, conseguir la muerte por culpa de una mujer, por mi parte creo que su familia no tiene idea de cómo es la situación entre de él y yo.

Aunque lo obsesionado que está conmigo, y lo loco que es, no dudo que haga algo así. Me preocupa enormemente que Artem tenga en verdad problemas manteles y yo esté en peligro a su lado.

Pensé que con todo esta situación no lograría dormir, pero el día en el trabajo fue agotador, así que dure muy poco tiempo en la cama cuando me quede profundamente dormida, el otro día si me desperté muy temprano y me arregle, quería estar muy temprano en la tienda, tengo muchas deudas y también mis cuentas vacías sin saber la razón, debo ir a los banco a pedir prórrogas para las deudas que tengo con ellos y ver como los proveedores me siguen dando crédito.

Estoy en serios problemas, si, Artem tiene razón, necesito ayuda con todo lo que tiene que ver con mi negocio, pero con todo esto lo menos que deseo es involucrar al ruso, sabiendo que está loco.

Cuando bajó al comedor, el hombre estaba ahí tomando algo que parecía un batido verde con ropa de gimnasio, sabía que ese cuerpo hermoso tenía que cuidarlo muy bien.

— Buenas días, malýshka — habla luego de pasar su mano por su boca — veo que hoy decidiste trabajar temprano.

No le respondo, miro hacia la chica que entra y me mira.

— ¿Quiere su desayuno señora? no tengo nada listo, no sabía que...

— Tranquila — le digo — si hay café solo tomaré eso — le aseguro y me siento en una de las sillas — necesito un celular — le digo al hombre sin mirarlo — no sé que paso con el mío y creo que lo clonaron, y así vaciaron mis cuentas.

Lo miro de reojo, y sé que sigue tomando su bebida.

¿Qué será eso que toma?

Es un hombre que se cuida, idiota, como crees que es tan deliciosamente sexy — pienso en manera zorra desvergonzada.

— ¿Vaciaron tus cuentas? — pregunta con tono alto y serio — si tienes prueba de eso, te acompañaré a poner la denuncia.

— Bueno en realidad no se si fue así — dudo, recuerdo haber gastado sin control durante los preparativos de la boda, mientras Paul se la pasaba en un nuevo negocio. Que también seguro era mentira como todo lo que se refiere a él. — lo digo porque ahí guardaba todo lo referente a mi banco.

— Que osada eres, dejas algo tan importante en un aparato que puede ser robado con facilidad — me critica y voltee a verlo, molesta.

— No es tu problema — acuso — solo necesito un celular nuevo, de mi cuentas me ocuparé yo.

— Bien, te compraré un nuevo celular, no hay problema — dice.

— Te lo pagaré — lo interrumpo — cuando me recupere, pero te lo pagaré.

— No tienes dinero, malýshka. Te robaron y tienes muchas deudas en tu negocio — dice mientras lo veo caminar hacia mi — no quiero que me devuelvas nada, eres mi esposa y tengo la obligación de darte lo que necesites.

— Hablas como un buen hombre y no como un loco — lo digo como burla, hasta que él se inclina hacia mí colocando cada uno de sus manos sobre la mesa a mi alrededor, me aparto cuando siento que está pegado a mi nuca.

— Soy un buen hombre, malýshka — me susurra, y se me eriza la piel, mi corazón empieza a martillar en mi pecho y mis entrepiernas reaccionan al calor de su cercanía — espera que me prepare y te llevaré al trabajo.

Traté de responder pero se fue rápidamente y fue cuando logré calmarme.

Malýshka, es un diminutivo que usan los hombres rusos con sus parejas, eso fue lo primero que pensé porque fue lo primero que investigué luego de averiguar quién era Artem Sokolov.

.... Hombre de negocios con ascendencia rusa, que maneja empresas de grandes capitales, y que es realmente reservado con sus relaciones personales — leí en uno de los artículos.

Y que está completamente loco y obsesionado con una química especialista en cosmetología y cuidado de la piel, que la secuestró y la obligó a casarse con él, y que ni sus padres pueden aceptar esa relación forzada, llena de problemas y contratiempos, por ser tóxica y controladora — nada de esto dicen los artículos que habla sobre el, pero es la total realidad.

Me robe a la noviaWhere stories live. Discover now