Es-- ma--im--io -- un- -ro-- Completa

Capítulo 46

—¿Estás bien?

El mayordomo Seo le dio gachas a Jeong-in con una expresión de preocupación en su rostro. Jeong-in luchó por sonreír. Después de pasar por tal caos por la mañana, sintió dolor y náuseas como si tuviera el estómago retorcido, e incluso después de tomar medicamentos, el dolor no desapareció fácilmente.

—¿No preferiría ir al hospital?

—No se preocupe. Pronto mejoraré.

Jeong-in solo rascó la parte superior de las gachas con una cuchara. Estaba más preocupado por Kim Ha-jun que por él. Se puso a trabajar inmediatamente después de eso. ¿Está bien? ¿Cuánta medicina tenía que tomar para conciliar el sueño? Al observar el comportamiento del mayordomo por la mañana, creía que algo similar sucedió antes.

El mayordomo se sienta frente a él y le da agua para que coma las gachas.

—Al menos coma un poco.

Jeong-in dejó la cuchara, tomó un sorbo de agua y le preguntó.

—Kim Ha-jun... Sabe cuándo empezó a tomar medicamentos, ¿verdad?

El mayordomo Seo parece reflexionar por un momento. Jeong-in esperó a que él dijera algo. Sin embargo, no le dijo nada del presidente, diciendo que sería mejor escucharlo en persona.

¿Es por su culpa? ¿Es por su culpa que Kim Ha-jun tomó medicamentos?

Estaba perdido en sus pensamientos, pero la entrada es ruidosa. Jeong-in volvió la cabeza hacia una voz mezclada con el sonido del metal. El mayordomo Seo rápidamente lo notó, se levantó y salió. Jeong-in lo siguió.

Como era de esperar, la abuela de Kim Ha-jun, Lee Soon-ok, apareció con su secretaria. Mientras permanece sorprendido por la repentina aparición, la abuela da chasquidos con la lengua.

—Ni siquiera sabes cómo saludar a un adulto.

Después de saludar tardíamente, se acerca al sofá y se sienta.

—Señora, ¿qué pasa? Vino sin avisar.

La abuela respondió secamente a las palabras del mayordomo Seo.

—Vine a ir a la casa de mi nieto, ¿debería avisar que vengo?

El mayordomo Seo sonrió dulcemente sin sorprenderse.

—De ninguna manera. ¿Quiere un poco de té?

—No es necesario, tú.

La abuela miró a Jeong-in e hizo un gesto. Mientras Jeong-in se mueve y se acerca, la abuela mira de cerca su rostro.

—¿Qué le pasa a tu cara? Si sedujiste a Ha-jun y te saltaste todas las clases de etiqueta, deberías tener mejor aspecto.

Kim Ha-jun primero dijo que ya no tenía que tomar clases, pero la abuela sarcásticamente dijo que era porque Jeong-in lo sedujo. Pensó que sería inútil poner una excusa, así que cerró la boca y ella dijo algo.

—No te quedes así, ve a cambiarte de ropa.

—¿Qué?

—Como en ese momento, tienes buen ojo para elegir la ropa. Me reuniré con mis amigos la próxima semana, pero no tengo la ropa adecuada. Así que hoy debes venir conmigo a los grandes almacenes.

El mayordomo Seo inmediatamente la detuvo.

—El señor Jeong-in no se siente bien hoy. Creo que ir de compras será difícil.

Ante eso, la abuela mira de arriba abajo a Jeong-in y lo desaprueba. Tiene una mirada en sus ojos que lo critica, '¿No se ve así todo el tiempo?'

«—Entonces compénsamelo el resto del tiempo que queda. Yo decidiré cómo lo pagaras.»