𝕰𝖑 𝕺𝖑𝖎𝖒𝖕𝖔

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(Les agradeceria que voten y comenten )

Espero les guste.

Narrador Omnisciente.

__Espero sepas que eres el diablo en persona __ dijo Anthony hacia Eleonor, al mismo tiempo que ambos caían desde el cielo.

__! Eleonor saca esas malditas alas y empieza a volar¡__ exclamó el pelinegro.

__! No sé cómo¡__ admitió la castaña mientras veía como caían a toda velocidad directa hacia el suelo.

__! Más te vale que empieces a volar Eleonor¡__ le gritó Anthony viéndolo enojado.

Ambos chicos veían como caerían directo hacia el suelo, arrepintiéndose de haber hecho lo que hicieron.

2 horas antes.

Eleonor estaba caminando hacia la casa grande para ver a Quiron y al señor D, cuando una voz la interrumpió.

__ ¡Eleonor! __ él gritó de Anthony la hizo detenerse.

__ ¿Y a hora qué? __ pregunto cansada, Anthony se quedó quieto unos segundos.

__ ¿Sabes volar? __ la pregunta del chico confundió a Eleonor.

__ Sí __ mintió la chica, ella no sabía nada sobre eso, pero no lo admitiría frente a Anthony.

__ Bien __ dijo el chico, acto seguido tomo del brazo a Eleonor y la tiro hacia donde estaban los pegasos.

__ ¿Qué crees que haces? __ preguntó la castaña.

__ Vamos a volar __ dijo el chico.

__ ¿Perdón? __ pregunto la chica.

__ Verás, necesito que vueles y tomes algo por mí __ le explicó el chico.

__ ¿Por qué iba a ayudarte? __ preguntó la chica.

__ Te pagaré __ dijo Anthony.

Eleonor lo miró mal, si las miradas mataran, Anthony probablemente ya estaría muerto desde hace mucho tiempo.

__ Bien, pero tomaré un pegaso __ dijo la chica.

__ ¿Por qué?, puedes volar, ¿O no? __ pregunto confundido Anthony, Eleonor no le hizo caso y se acercó a uno de los pegasos.

Iba a subirse a uno, pero de repente este se dio la vuelta y se fue, Eleonor se quedó quieta sin entender.

Pero otro pegaso se puso frente a ella, era el mismo pegaso del que Luke le había advertido que no se acercara.

__ Ya súbete a uno y vámonos __ exigió Anthony, sin más remedio se subió al pegaso de color gris.

Lo más sorprendente fue que él se dejó montar, sin objeciones, ni molestia, cuando estuvo sobre el pegaso ella volvió a mirar a Anthony.