Severus muere después de ser mordido por Nagini pero por una extraña razón alguien o algo le da una segunda oportunidad.
los personajes son propiedad de JKR.
Todo el mundo corría de un lado a otro, el jardín estaba siendo decorado por los elfos domésticos, Elina Prince revisaba las mesas donde se iban a sentar los invitados, Erlan Prince revisaba por décima vez el pergamino donde estaba el hechizo de unión matrimonial que los novios firmaban cuando decían "acepto" y Esther Prince ayudaba a su hermana con el vestido y el maquillaje, además de darle pequeñas miradas a Severin para que no fuera a ensuciar su vestido de niña de las flores, por suerte la niña es muy tranquila y se entretenía con cualquier libro que le dieras.
—¿Cómo te sientes Eileen?
—Nerviosa, ansiosa y con ganas de vomitar.
—Son solo nervios pre nupciales, ya verás que cuando estés en ese pasillo y veas a Alphard todos esos síntomas se irán.
—Si, tienes razón.
Mientras eso pasaba en la habitación donde se encontraba la novia en el jardín muchos de los invitados quedaron maravillados con la decoración, lo que hacía que el ego de Elina Prince sea más grande de lo que ya estaba.
—Todos a sus sitios, la ceremonia está por empezar— se escuchó la voz de Erlan Prince que se dirige a todos los presentes y unos segundos después el enorme jardín de la mansión Prince comenzó a llenarse por muchos invitados quienes tomaron asiento en los lugares que les corresponden por reservación.
En las primeras filas por parte del novio se encontraban Orión Black, Walburga Black, Cygnus Black y Druella Black, detrás de ellos se encontraban los primos Black (Sirius, Regulus, Bellatrix, Narcissa y Andrómeda Black) además de amigos de la familia Black como los Crouch, los Rosier entre otros. En las primeras filas por parte de la novia se encontraba los padres de esta (Erlan y Elina Prince), su hermana Esther Prince y a su lado Severin Black, detras de estos en la segunda fila estaban los amigos de la familia Prince como los Malfoy, los Mulciber, los Avery entre otros.
Era una boda sencilla en palabras de los novios, frente a todos había un hermoso arco tupido de flores blancas y negras, también era adornado por delgadas cortinas de color blanco. detrás del atril estaba el ministro de magia, a su lado derecho estaba una mujer quien es la encargada de registrar los matrimonios mágicos y al otro lado estaba el novio, Alphard Black, quien lucía un hermoso traje color blanco.
—Te ves nervioso Alphard— escuche la voz del señor ministro —Tranquilo, esta vez no va volver a escapar.
—Gracias por las palabras de aliento señor ministro— trate de no sonar lo menos nervioso en ese momento.
Y entonces la música no tardó en sonar y con ella se dio inicio a la ceremonia. Alphard se enderezó al ver entrar a su hija que tiraba delicados pétalos de rosas blancas por donde indicaba donde entraria la novia y finalmente se vio a Eileen siendo acompañada por su padre hacia al altar.
Cuando la novia llegó al altar Alphard la tomó de la mano y ambos sonrieron.
—Llegó la hora— le dije en un susurro solo audible para mi bella novia.
Cuando la ceremonia acabó Alphard no podía pedir más en este mundo, tenía una adorada hija, una hermosa esposa y sus familias se llevaban de maravilla, ya nada podía salir mal.
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Después de la boda del nuevo matrimonio Black todo fue paz y tranquilidad, Alphard vendió su viejo apartamento y compró una casa rústica lejos del bullicio de la ciudad, solo para él, su esposa y su hija. Habían días que Walburga y Sirius iban a visitarlos, esto en petición del niño ya que se había encariñado con su nueva prima convirtiéndola en su cómplice de travesuras,lo que a veces sacaba de quicio a Walburga ya que ella no quería que su hijo dañara la personalidad tranquila de su sobrina.
En los días de celebraciones que estos dos primos se reunían eran días de tormento para los adultos y el resto de sus primos, Sirius sacaba el lado malo de Severin y Severin sacaba el lado calculador de Sirius, solo se detenían cuando Eileen o Alphard los regañaban.
Las travesuras más famosas de estos dos fueron:
1.Añadir al shampoo de Druella Black un colorante que no salió por un mes.
2.Hacer explotar el pastel de cumpleaños de Orión Black con un hechizo que Severin hizo con la varita de su madre.
3.Liberar a los pavos reales de la familia Malfoy en el aniversario de boda del señor y la señora Malfoy gracias al hechizo "Alohomora".
Fue en esta última travesura que un 15 de junio de 1966 que Severin conoció por medio de su abuelo Erlan a Lucius Malfoy, el unigénito y heredero de la familia Malfoy.
... Flashback ...
—Severin, quiero que pidas disculpas a mi buen amigo y a su esposa— ya era momento que mi nieta conozca más gente de alcurnia, y se disculpara con los Malfoy por el show que armó.
Abraxas y Regina Malfoy eran dos de los más grandes representantes de los pura sangre que se había visto en el país, todos los magos y brujas sabían sobre ellos y era por eso que las familias pura sangre no buscaban enemistarse con ellos.
—Lo siento señor y señora Malfoy— dije con la vista hacia abajo por la vergüenza, aunque Sirius me ayudó con la broma fui la única en ser culpada ya que él se escapó del lugar de los hechos —Discúlpenme por arruinar su aniversario.
—No te preocupes pequeña.
—Incluso nos pareció fascinante el hecho que de tan corta edad ya puedas realizar hechizos de tal magnitud— mi esposa y yo nos miramos pensando exactamente lo mismo, "si jugamos bien nuestras fichas tal vez podamos comprometer a nuestro Lucius con la nieta de Erlan, y si no, también está la opción de comprometerlo con la hija menor de Cygnus y Druella Black".
—Lucius, porque no llevas a Severin a ver a los abraxan— le dije a mi hijo que se había quedado callado detrás nuestro.
—Como digas madre— me acerque a la pequeña niña de cabello negro y ojos negros —Un gusto en conocerla señorita Black, mi nombre es Lucius Abraxas Malfoy— hice una pequeña reverencia de saludo.
—El gusto es mío Lucius Malfoy— respondí el saludo con una reverencia y cuando me levanté el niño Malfoy tomó mi mano y puso en ella un pequeño beso.
Los tres adultos estaban complacidos de la tierna escena que los dos infantes presentaban. Diez minutos después los dos niños estaban observando a los enormes caballos alados sin percatarse que otro niño los veía con enojo.
—Son muy bonitos— dije viendo a esas majestuosas criaturas.
—No tan bonitos como tu por supuesto.
—Solo dices eso para ser cortés.
—Claro que no señorita Black, lo digo enserio— pude ver por el rabillo del ojo como la fina piel de porcelana de las mejillas se teñían de un color rojo.
—Gra...gracias.
—¡Si, gracias por esa empalagosa escena!— ver que mi prima era regañada por nuestra travesura me hizo sentir mal pero mas mal me hizo sentir ver que estaba con el insípido de Lucius Malfoy sonriendo.
—¿Qué es lo que quieres Black?, espero que no venga a molestar.
—No busco nada contigo oxigenado— incluso oír su estúpida voz me fastidia.
—Mira, no pienso rebajarme al nivel de un niño de 6 años, después de todo yo ya tengo 12 años, así que porque mejor no te vas y nos dejas a la señorita Black y a mi solos.
—Eso sí que no, Sevi se viene conmigo y no pienso en escuchar...— no termine mi frase porque mi padre y el tío Alphard llegaron al rescate.
—Sirius, Severin, es hora de irnos— tenia el presentimiento que dejar a Sirius sin vigilancia era una equivocación.
—Si Padre/tío— respondimos Sevi y yo a la vez.
Después de ese espectáculo que dio Sirius supe que no podría decirle que Lucius y yo nos escribimos cartas a veces.
