TERCER ENCUENTRO

EXCESIVO

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Ethan me había encontrado en la cafetería para despedirse  con la promesa de llamar luego para visitar a Nathan, tambien para avisarme que Eugene volvería para estar al pendiente de lo que necesitásemos y llevarnos a casa en lo que nos dieran el alta, aunque le dije que ya estaban aquí mis amigos y que ellos se encargarían, él respondió que se sentiría mas tranquilo sabiéndonos con Eugene, así que lo dejé estar. Se me encogió el corazón al verlo partir y tuve una leve sensación de que él tampoco quería irse. Sus gestos al despedirse y la pesadez en sus palabras lo evidenciaban, aunque claro entendía que él debía ocuparse de sus asuntos y ya suficiente había hecho además de que Logan no hacía para nada cómoda su estadía. <Ojalá sí llame> me hallé pensando en medio de un suspiro.

Él doctor vino a la habitación unos momentos después, evaluó con rigor la herida de Nate y la limpió cuidadosamente, Logan y yo tuvimos que sostener un poco a Nate en medio de la limpieza porque se puso muy nervioso y temió sentir dolor. Logan entabló una conversación con el doctor, prometió supervisar y cuidar la herida el mismo, dando como resultado que Nate podría irse a casa para el medio día. Me sentí aliviada al escuchar aquello, quería sinceramente volver a casa. El doctor siguió comentando algunas recomendaciones con Logan y Ghail no perdió la oportunidad de alejarme un poco e indagar.

-April ¿Estás bien? ¿Qué sucedió anoche?- Inquirió en voz baja llena de intriga.

-Sí estoy bien, solo un poco saturada. Te contaré todo luego.- Le prometí y ella asintió dándose cuenta de que no era el lugar ni el momento, aunque si tenía dudas de que algo había pasado ya yo se las había confirmado.

Alex y Peter también llegaron con desayunos sorpresas para ambos y estuvieron allí acompañandonos hasta que un par de horas después nos entregaron el documento que certificaba que Nate podia ir a casa. La cuenta de la clínica estaba pagada en su totalidad por Ethan. No me sorprendió pero sí me causo bastante incomodidad y no solo a mí; Logan al enterarse no me dijo nada directamente pero se notaba su enojo e inconformidad con todo ese asunto, sumándole que Eugene se ofreció a llevarnos lo cual no pude rechazarlo porque ya Logan lo había hecho sin permitirme a mi hablar, me limité sólo a decirle a Eugene con una sonrisa apenada “Gracias por todo, nos vemos luego.” A lo cual él asintió sin dejar de mirar fríamente a Logan.

Camino a casa el silencio hubiera tornado demasiado incómodo de no haber sido porque Nate estaba contándole unas nuevas estrategias de juego a Logan, yo me limité a ver por la ventanilla. Ghail viajaba en su auto tras nosotros. Era palpable la tensión y pesadez entre Logan y yo. Estaba demasiado molesto sin sentido, ya le había explicado el porqué de la situación ¿Qué más podía decirle?

Entramos al edificio por el lado del estacionamiento buscando el lugar de mi auto que por cierto no lo recordé sino hasta ese momento ¿Qué habría sido de él? Ethan me había asegurado que en la mañana estaría listo pero quizá entre tantas cosas había olvidado decirle a Eugene que me lo entregará. Bueno, ya le llamaría si él no lo hacía y hablaríamos sobre eso.

Para mi asombro y el de mi amigo a mi lado, mi puesto de estacionamiento estaba ocupado. En su lugar se hallaba un auto negro aparentemente nuevo con un lazo gigante. Era un Audi. Fue lo único que pude reconocer, de pie a un lado se encontraba un hombre de unos 40 y tantos años de traje con un sobre en su mano derecha.

Logan detuvo el auto y me bajé para indicarle al señor que estaba estacionado en mi lugar y debía mover el auto.

-Buenas tardes ¿Es usted la señorita April Andueza?- Dijo apenas me bajé del auto antes de que yo pudiera decirle a lo que iba.

-¿Sí y usted es?- no entendía nada de lo que estaba sucediendo. Logan se bajo del auto también y luego Ghail se nos unió.

-Mucho gusto, soy Jasón Vásquez su chofer y este es su auto nuevo, acá le entrego las llaves y la titularidad.- dijo extendiéndome el sobre y las llaves del mismo. Logan bufó y Ghail se carcajeo ruidosamente. Yo estaba perpleja revisando la documentación y efectivamente estaba a mi nombre... Esto tenía que ser una broma.